Anís.
Me despierto temprano como siempre me siento de la cama y me tallo los ojos escucho un movimiento a mi lado me volteó rápidamente y me doy cuenta de que Drados que está dormido, me colocó la ropa antes de que me vea y voy a tomar un poco de sol, escucho la puerta del cobertizo y sé que es Dragos no necesito voltear, inhalo y exhalo para no enojarme con él ya que él ha sido muy amable conmigo y me ha permitido estar en su casa, me ha comprado ropa, me da de comer y prometio ayudarme con lo que sea
-Buenos días Anís.
-Buenos días Dragos.
-Podemos hablar de lo que pasó anoche.
-No tengo nada de que hablar solo me moleste, no me gusta que me digan que hacer y que no puedo hacer y lo que más me molestó fue que me quisistes imponer una nana, no tengo 4 años Dragos.
Volteo a verlo y le doy una mirada molesta, creo que estoy haciendo la misma mirada que hacía mi madre cuando hacíamos algo malo, Dragos baja la mirada y es increíble que el siendo más grande que yo y fuerte lo intimido con una mirada, muy apenas le llegó al hombro volteo así al frente y me concentro en el pequeño estanque que tiene pequeños peces y renacuajos que nadan tranquilamente.
-Lo siento no fue mi intención, no lo sabía disculpame pero es en serio no quiero que te pase nada en el bosque.
-Ya te dije me puedo cuidar yo sola.
-Sí lo sé, iré a ver si ya está listo el desayuno.
Escucho como Dragos se aleja y después la puerta de la casa es cuando por fin puedo dar un suspiro, no me gusta hablarle así pero odio esto, no puedo esperar para esta noche e invocar a otso y poderme ir, será lo mejor ya que estos sentimientos que tengo por Dragos no son correctos, tengo el deseo de estar a su lado pero no solo para obtener su semilla sino para pasar mi vida junto a él y eso es una grave falta para una bruja elemental.
Después de unos momentos me levanto y me dirijo a la cocina, saludo a las dos señoras y el pequeño niño, voy al comedor donde ya están los novatos y Dragos comiendo, me siento en el único lugar disponible y como en silencio, siento la mirada de Dragos sobre mí pero no le doy importancia, no estoy molesta con el pero creo que ya debo de mantener un poco de distancia, al terminar mi desayuno me levanto y decidí ir a la biblioteca para terminar la enciclopedia que empecé, ya solo me falta un libro y la verdad me ha servido mucho conozco ya demasiadas cosas y creo que es suficiente para poder valerme por mí misma y separarme de Dragos ya que lo que siento por él es muy intenso, deseo estar a su lado para siempre y no puedo permitirme eso, me concentro en el libro y escucho que la puerta se abra es Dragos.
-Porque no te sientas en los sillones al leer.
-No le veo mucha diferencia lo que quiero es leer el libro no reposar mi cuerpo.
-Qué más necesitas aparte de la madera para imbocar a otso.
-Necesito una ofrenda y será un venado adulto, quiero ir de casa antes de que caiga sol.
-Sabes casa.
-Ya te dije Dragos hay muchas cosas que no sabes de mí.
Vuelvo a enfocar mi atención en el libro, Dragos se levanta el sillón y se siente enfrente de mi se recarga en el librero, me mira directamente a la cara, se queda fijamente viendo cada detalle de mi, siento como mis mejillas arde ligeramente así que bajó la mirada y me concentro de nuevo en el libro pero siento como me toma de los hombros y me jala hacia, Dragos me da un abrazo qué no sé cómo responder.
-Quieres que te acompañe a cazar.
-No debo de hacerlo sola.
-Está bien.
Dragos me suelta y retomó la lectura, siento como la temperatura de mi cuerpo ha subido, intento disimular que no tengo nada pero sigo sintiendo la mirada de Dragos sobre mí, porque no se va a su oficina y me deja sola para mi mala suerte Dragos no se va y permanece cerca de mí todo el día hasta que el sol comienza a caer, me pongo un vestido blanco y ligero y me dirijo al bosque, Dragos cumple con su palabra y se queda esperándome enfrente de la casa, aunque la última vez que lo miré tenía una mirada preocupante en sus ojos, eso será lo que más extrañe de él cuando me vaya su mirada tiene unos hermosos ojos qué hacen que mi corazón lata aunque no esté conmigo, invoco mi armadura qué es solo una capa de hielo que se forma sobre mi cuerpo y una máscara en mis ojos, invoco mi arco de hielo y camino por el bosque hasta que miro un gran venado se ve tan puro inocente y en verdad me da pena lo que voy a hacer, preparo el arco hago la flecha con hielo y detengo la respiración suelto ambos, el venado es atravesado y su cuerpo se congela voy hasta el venado me arrodillo enfrente de y comienzo a rezar y pedir perdón a la diosa de la naturaleza Cuonnotar por arevatarle la vida a uno de sus hijos y agradezco a la diosa de la caza Nyyrikki por bendecirme por tan buena ofrenda qué le haré a los Dioses del bosque Tapio y Mielikki, tomo el venado y lo colocó sobre mis hombros, está pesado pero lo llevo por mi propia cuenta, camino hasta llegar a casa apenas puedo arrodillarme y dejar con cuidado el venado sobre la hierba, siento como alguien me toca el hombre es Dragos que me extienden un vaso de agua, lo bebo y doy un suspiro para mirar al cielo.
-Gracias.
-No puedo creer allas cargado ese venado tu sola debe de pesar unos 20 kg.
-Te sorprenderías.
-Sí todos los días qué pasó a tu lado me sorprendes con algo nuevo.
Dragos me da una dulce mirada y no puedo evitar sentir una calidez en mi cuerpo, el sol por fin ha caído y su contraparte la luna ha salido comienzo a colocar las ramas de roble blanco en un círculo para hacer una fogata que tenga un hueco en el medio, muelo una rama hasta conseguir mucha viruta que dejó en el medio prendo fuego y comienzo a recitar las palabras en mi idioma natal.
-Invoco a Antero Vipunen gigante que descansa en los bosques conocedor y protector de la sabiduría y de la magia ancestral, te invoco hoy ante la diosa luna y pedirte ayuda a que traigas a mi animal espiritual otso, te ofrezco este hijo de la madre Cuonnotar cómo ofrenda para que lo traigas de nuevo al mundo de los vivos.
Tomo el venado y lo aviento en el centro de la fogata, espero unos minutos a que realmente acepte la ofrenda, el fuego se torna de un azul muy intenso y la llamo aumenta hasta elevarse y tomar una altura considerable, en el fuego se forman claramente dos ojos y una sonrisa de felicidad llena de dientes, conozco esa mirada escucho como los árboles comienzan a tronar y veo como muchas sombras se deslizan por la hierba y se meten a la fogata sofocando la en su totalidad, espero unos cuantos minutos y me acerco a las cenizas, miro como un pequeño bulto se comienza a mover y a tomar forma de un pequeño venado, meto las manos dentro de los troncos quemados para tomarlo entre mis brazos y darle un abrazo.
-Hay osto te extrañé tanto.
*Yo también Anís.
Escucho su voz en mi mente cómo lo hacía antes pero me extrañas escuchar su voz un poco más grave supongo que él también ha crecido ya que estamos conectados, lo suelto y Dragos se acerca se queda viendo muy extrañado a otso.
-Este es tu animal espiritual debo admitir que me siento un poco decepcionado pensé que iba a hacer algo no sé más grande, más feroz e intimidante.
Otso camina un par de veces a su alrededor y lo mira de pies a cabeza, acerca su cabeza a la mano de Dragos, la fruta un par de veces para después morderlo.
-¡No osto!
Veo como Dragos se observa la mordida y parece que le dejo plantados los colmillos y me mira sorprendido y señala a otso.
-Eso tiene colmillos.
-Si tiene colmillos, come de todo, es muy sensible y puede entender perfectamente lo que le estás diciendo.
-Me hubieras dicho eso antes de empezar a hablar.
Dragos me sususra eso y a mí me produce gracia, miro a otso ya tengo todo lo que necesitaba para poder irme de aquí tranquilamente y con el dolor que siento en mi cuerpo miro a Dragos, en verdad me cuesta lo que voy a hacer pero es lo más correcto.
-Bueno te doy las gracias por todo lo que hiciste por mí Dragos, por liberarme, darme asilo, alimento y vestime pero creo que es hora de irme.
Al decir esas palabras el rostro de Dragos cae muy rápidamente.
-No te tienes que irte, pues quedarte el tiempo que quieras.
Alzó la mano para detenerlo.
-Lo siento pero tengo que buscar al alfa de la manada, él tiene algo que es mío, necesito encontrarlo con urgencia.
-Pero no sabes dónde está yo te puedo ayudar a localizarlo pero por favor no te vayas.
-Lo siento Dragos, otso vámonos.
Otso mira detenidamente a Dragos y se sienta a su lado.
*Este lugar nos pertenece, no nos iremos a ningún lado, él también es parte de nosotros.
-¡Que!
Como que se me acaban de revolver un poco las ideas con lo que cabe decir otso.
-Otso creo que te afectó el sueño tan largo que tuviste, si escuchastes lo que dijistes.
*Sí me escuché pero como tú guía espiritual te digo que te tienes que quedar aquí.
-No quiero.
Dragos interrumpen la plática y se escucha muy preocupado.
-No te tienes que ir puedes quedarte todo lo que quieras.
-No Dragos debo de irme, debo de encontrar al alfa que me tenía prisionera.
-Porque tienes tanta insistencia de ir a buscarlo.
-¡Porque tiene mi corazón!
Dragos deja de hablar y siento que todo se ha quedado en un silencio muy incómodo, se pasa la mano por el cabello y da un suspira.
-Te enamoraste de él.
-Que, no literalmente tiene mi corazón, Dragos una bruja elemental al alcanzar cierta habilidad de magia su corazón sale de su cuerpo en una pequeña esfera, yo decidí poner la mía en un collar y dársela al único miembro de mi familia que no tenía magia que era mi hermana mayor, el alfa de la manada en aquel entonces fue en busca de nuestra ayuda, se la negamos ya que su petición llevaba a derramar demasiada sangre inocente, el fingido comprender y engatuso a mi hermana que le revelo cosas de nosotros que un mortal no debe de conocer, una noche la convenció de huir con él pero solo fue un engaño le arrebato mi corazón y la utilizo como escudo para poder entrar a la aldea si que nadien lo dañara, me amenazó con matar a mi familia y después a mi o dejarlos vivir e ir con el y ya sabes mi respuesta, es por eso que debo de buscarlo necesito mi corazón, tú no sabes lo que se siente estar muerto por dentro, no tener ni siquiera pulso.
Siento como una tristeza se apodera de mi y un dolor invade mi pecho a pesar de que no tengo un corazón qué lata.
Dragos. No puedo creer todo lo que me ha dicho Anís, no puedo creer que un ser vivo no tenga corazón pero se ve realmente triste, Anís toma mi mano y la pone en su pecho abro los ojos con sorpresa al darme cuenta que en realidad no tiene pulso y está fría. -Esta es la razón por la cual las brujas elementales vivimos tanto tiempo pero es la misma razón por la que vivimos solas, no tenemos un corazón que late en nuestro pecho ni sienta amor por otro ser vivo, necesito a otso porque él puede sentir mi corazón y porque nunca pude terminar mi entrenamiento con mi abuela ya que falleció antes de poder terminar. Siento mucha pena al ver el rostro de Anís triste y veo como algunas lágrimas se deslizan por sus mejillas, eso hace que un peso se sienta en mi pecho tomo las mejillas de Anís entre mis manos y seco las lágrimas que se han escapado y hago que me vea el rostro. -Anís te prometo ayudarte a conseguir tu corazón pero por favor no te vayas, no creo poder vivir sin tu compañía, haré t
Anís.Cuándo Dragos me sienta en su regazo siento como un calor invade rápidamente mi cuerpo y miro a los ojos de Dragos y siento que todo el miedo que estaba en mi cuerpo y preocupación desaparece, se que no debo de sentir afecto por el pero no lo puedo evitar, me recargo en su hombro y escucho el latir de su corazón es una sensación que me relaja tanto que caiga profundamente dormida, me despierto al sentir que alguien me está muriendo, me siento y me estiró libremente para darme cuenta que sigo sentada en las piernas de Dragos el cual me mira con una sonrisa.-Ya llegamos a Rusia anís.-En serio si me paresieron solo 5minuros los que dormí.Me levanto y me dirijo la puerta del avión donde un joven abre para mí, me desilusiona un poco ya que en las enciclopedia mire que Rusia era una ciudad y esto parece un bosque y uno no muy bonito.-Dragos seguro que llegamos al lugar indicado esto no se ve como en los libros.-Si ya llegamos solo que el hangar está en un lugar apartado pero ya
Dragos.Me recupero y me levanto con mucho dolor me recargo en el lavamanos, quien diablos era ese maldito mal nacido y como que conoce a Anís desde hace mucho, sacó mi celular y marco a Maximiliano ya que estamos muy lejos para poder enlazarme mentalmente con el.#Maximiliano dime cómo está Anís.#Ella está bien alfa ya llegamos al hotel y está cenando pero está tarde se encontró con un conocido de ella.#¡Que! Como era.#Era un hombre alto, delgado y de cabello negro, estubieron hablando un rato hablando en un salón a solas pero no dijieron nada importante lo que se me hizo extraño que estuviera muy cercana a ella.Un fuerte gruñido sale de mi pecho un ataque de celos me invade, rompe el celular como si fuera de madera frajil, salgo del baño y me dirijo a la salida hecho una furia, escucho que me hablan pero no me detengo subo al auto y voy rápidamente al hotel, subo las escaleras en menos de 2 minutos y casi derivó la puerta voy al cuarto principal y al percibir su aroma mi lobo s
Dragos.Cada palabra que me dice Anís desgarra mi corazón, en verdad la amo pero sus palabras son crueles y frías a mis oídos, lo tengo bien meresido cómo fui tan imbécil como para decírsele eso directamente y no es que no quisiera estar con ella es algo que deseo y anhelo con mucha desesperación pero no quería que solo fuera para que se quedará preñada de mí, deseo estar a su lado el resto de mi vida no quería que esto solo fuera un acostón deseo tener Anís el resto de mi existencia, veo cómo se dirige al auto y quiero con ella para intentar arreglar este gran estupidez que hice o más bien dicho mal entendido que ha ocurrido pero para mí sorpresa veo como el auto estalla y Anís cae sentada hacia atrás una barrera de hielo nos protege de cualquier escombro y cosa que nos pueda pasar, el muro de hielo desaparece y rápidamente voy al lado de Anís para ver si no ha sufrido alguna herida de algún tipo pero para mí alivio está totalmente bien pero su cara es de miedo tiene los ojos muy abi
Anís.Un escalofrío recore mi cuerpo al escuchar la palabra vampiro y todos los recuerdos de sus ataques a la manada donde me tenían prisionera llegan a miente como una ola que asota en las piedras de un acantilado, el miedo recorre mi cuerpo.*Anís ten calme y recuerda lo que eres y lo que te enseñaron.Reacciono al escuchar la voz de otso en mi mente y lo veo parado frente a mi, also la mira al escuchar los murmullos de dos mujeres y veo a una señora castaña, alta y delgada parada al lado de una jovencita de cabellera café, son las misma que mire asé algunos momentos en la puerta de la casa, tienen miradas de preocupacion y miedo, me recuerdan a mi familia eras las mismas miradas que tenían el día que me fui, no dejaré que los vampiros amenacen a más personas, no dejaré que le hagan daño a Dragos, me dirijo a la misma dirección en la que fue Dragos y otso se materialisa a mi lado en su forma adulta, me subo a su lobo y me lleva a dónde se escuchan los gruñidos, dejó que el hielo sal
Anís Voy a mi cuarto, me baño y me colocó un vestido es uno negro de manga larga con los hombros descubiertos que me llega a la rodilla, me quedo en mi habitación hasta que escucho que alguien la toca la puerta.-¿Quién es?-Soy Dragos, ya llegaros los alfas y quería ver si me ibas a acompañar o no en al reunión.Me levanto de la cama y abro la puerta con mucha determinacion.-Claro soy la más interesada en que este tema.Dragos camina detrás de mí en silencio, desearía poder tocar su mano y tocar de nuevo sus labios gruesos qué me provocan en morder los pero me debo de mantenerme serena y calmada, Dragos y yo llegamos hasta un gran salón y al abrir la puerta veo muchos hombres, Dragos entra con mucha seguridad y empieza hablar con todos.-Señores alfa les agradezco que hayan acudido a mi llamado tenemos un gran problema entre nuestras manos en alguna parte de este gran territorio tenemos un alfa que tiene en sus manos, algo de gran valor qué debemos de recuperar a toda costa.Un hom
Anís. Mientras los recuerdos de mi hermana llegan a mi mente doy una sonrisa, en serio la extraño mucho pero ya no puedo haer nada al respecto y mejor dirijo mi atención a Elena. -Elena que me querías mostrar. -Sí ya sé me avía olvidado pensando en mi amorcito. Elena me toma de la mano y me lleva a lo que creo que es su habitación es una más pequeña que la de Dragos pero está muy bien distribuida y es muy bonita. -Sabes Anís me doy cuenta que usas vestidos largos y ligeros, no usas maquillaje y el cabello lo traes suelto qué tal si te hago un cambio de look. Miro desconcertada a Elena ya que esa palabra no la encontré en los diccionarios ni se parece a nada que haya escuchado antes y me ha dejado confundida y Elena se da cuenta de esto ya que intenta explicarme pero hace mucha señas con las manos. -Ya sabes look qué otra palabra puedo usar estilo de ropa. -Ohh ya te entiendo y no me lo tomes a mal pero no me gusta la ropa de varón, la he usado antes pero en realidad no me gus
Anís.Me gusta esta pequeña salida que tengo con la hermana de Dragos, Eena me encanta estar con ella su personalidad es muy alegre y vivaz, me recuerda tanto a mi hermana Hestia nunca se queda callada y siempre tiene algo que decir y es entretenido verla, paseamos durante varias tiendas y en algunas compramos ropa y cosas asi, en una miro unos gemelos de perlas blancas de esos que se ponen en los trajes finos Dragos, no se por que se los compre y pedí que los envolvieran para regalo, salimos de esa tienda y me da gracia como Elena le coquetea abiertamente Ramón esté solo se sonroja y desvío la mirada pero varias veces mire como daba sonrisas leves, me doy cuenta que siente algo por Elena pero supongo que por su edad y por ser la hermana del alfa no desear de ariesgar el pellejo.Por fin nos detenemos y nos sentamos a comer algo pero para mí sorpresa llega un joven alto, delgado y de cabello negro, tiene unos lindos ojos cafeses y unas pestañas realmente largas y curvas parecen las d