Tarde por la noche, un buque de carga zarpó de Bahía Azul, llevando a Stephen a Tahití en el Pacífico Sur.

Stephen se paró en la popa del barco y sintió una oleada de emociones mientras observaba cómo la ciudad se alejaba cada vez más en la noche. Una vez fue un ayudante de confianza del padre de Charlie, Curtis. Hace veinte años, Curtis le había encomendado dos tareas. La primera era proteger la seguridad de Charlie después de su propio incidente y la otra era obedecer todas las órdenes de Ashley. A lo largo de los años, aunque Stephen permaneció y sirvió como mayordomo para los Wade, todo lo que hizo en realidad se basó en las instrucciones de Ashley.

Durante más de diez años, ni siquiera Jeremiah supo si su nieto, Charlie, estaba vivo o muerto. Esto se debió a que Curtis no hizo ningún arreglo para que Stephen le informara a Jeremiah sobre la situación de Charlie. Ashley seguía siendo la que controlaba todo detrás de escena.

Fue solo cuando Ashley sintió que era el momento adecua