Las otras siete personas tenían expresiones serias y no pudieron ocultar su emoción cuando dijeron: “No se preocupe, Comandante. ¡Definitivamente haremos nuestro mejor esfuerzo y no decepcionaremos al Señor Británico!”.

“¡De acuerdo!”. El hombre al que se dirigieron como comandante se rio audazmente y dijo: “¡Hermanos, esta noche es la noche en la que acumulamos más logros!”.

Después de decir eso, miró al conductor y dijo: “Pequeño 4, según el plan, la camioneta quedará estacionada aquí temporalmente. Puedes infiltrarte con nosotros y, si la misión va bien, regresarás en medio de la misión para conducir la camioneta”.

El conductor dijo sin dudar: “¡De acuerdo, Comandante! ¡Entiendo!”.

El Comandante asintió y dijo fuertemente: “¡De acuerdo! ¡Salgan de la camioneta!”.

Tras su comando, se abrió la puerta trasera del contenedor de cargamento y los ocho asesinos vestidos de negro, sosteniendo pistolas negras y usando máscaras negras, saltaron de la camioneta en silencio. Luego desapare