Capítulo 4
María miró a Diana con ojos suplicantes, pero Diana percibió de inmediato la provocación en su mirada, comprendiendo también que la foto que había recibido había sido enviada por la misma María.

Incluso, María le había mostrado deliberadamente su tatuaje, con el propósito de decirle que ella y Manuel estaban juntos.

¿Y Manuel?

Diana sintió un profundo dolor en el corazón mientras miraba al amable hombre que se encontraba a su lado. ¿Él también lo había hecho de manera deliberada para que ella lo supiera?

¿Lo había hecho con el propósito para forzarla a pedirle el divorcio?

—Diana, primero ayudaré a María a cambiarse de ropa —dijo Manuel, quien todavía lucía como un esposo cariñoso—. Mientras tanto, ¿podrías ocuparte de atender a nuestros invitados?

—Claro —respondió Diana, ocultando su amargura y forzando una sonrisa.

Sin embargo, Diana estaba preocupada y las imágenes del teléfono móvil no dejaban de aparecer, una y otra vez, en su mente.

María y Manuel no se comportarían de esta manera, ¿verdad?

De alguna forma, sus pasos la llevaron automáticamente detrás de ellos.

—¿Diana?

Las puertas del ascensor se abrieron, y Diana no se dio cuenta hasta que alguien la llamó por su nombre.

Alzó la cabeza y se dio cuenta de que dentro del ascensor estaba Valentín y su asistente.

El hombre miraba con frialdad, y su rostro apuesto y duro no mostraba ninguna expresión.

—Lo siento —dijo Diana, mirándolo, y se acercó con incomodidad.

Una vez las puertas del ascensor se cerraron, el aire se volvió opresivo y sofocante. La presencia del hombre detrás de ella era imponente, y el suave aroma a tabaco se filtraba inevitablemente en sus fosas nasales.

Cuando finalmente llegaron al primer piso. Diana salió de manera apresurada, pero la voz del hombre que se encontraba detrás de ella la detuvo de repente.

—Diana.

—¿Qué pasa? —preguntó Diana, volviéndose hacia él.

Valentín alzó la mirada hacia ella, sus oscuros ojos brillaban con una intensidad gélida.

—Si surgen problemas en medio del proyecto, lo detendré en cualquier momento.

Diana se quedó sorprendida por un momento, entendiendo que él estaba cuestionando su compromiso. Sin embargo, su expresión cambió ligeramente y respondió con seriedad:

—Valentín, puedes estar tranquilo. Seguiré este proyecto hasta su completo éxito.

Valentín le lanzó una mirada y curvó ligeramente los labios en una sonrisa burlona.

—Está bien —repuso y, acto seguido, las puertas del ascensor se cerraron nuevamente.

Diana se quedó parada junto a las puertas durante un momento, sin entender del todo el significado de la sonrisa del hombre. Sin embargo, pronto se volvió y salió a toda prisa.

El aire exterior era sumamente frío, por lo que apenas dio unos pasos y sus piernas comenzaron a temblar.

Diana miró a su alrededor y finalmente vio el coche de Manuel estacionado a un lado de la empresa.

Antes de acercarse, escuchó vagamente gemidos de una pareja haciendo el amor que parecían provenir del interior del automóvil, por lo que se quedó paralizada en su lugar, por un momento.

El coche se movía ligeramente, y los susurros suaves de la mujer y los gruñidos reprimidos del hombre resonaban claramente en sus oídos.

Las puertas del coche estaban cerradas herméticamente, pero las ventanas traseras tenían un ligero empañamiento que dejaba entrever las huellas de la intimidad de la pareja.

¡Todo era real!

***

En el mostrador del bar.

Diana estaba sentada en el borde del mostrador, bebiendo una copa tras otra, sin cesar, mientras la escena que había visto se repetía constantemente en su mente.

Manuel la había traicionado.

—Diana, me gustas, te he estado deseando durante mucho tiempo.

—Diana, cásate conmigo, te trataré bien.

—No importa, Diana, no poder tener hijos no importa, siempre serás mi esposa.

¡Era un mentiroso!

Todo frente a ella estaba borroso, y sus ojos se llenaron de lágrimas. Su corazón estaba profundamente herido.

Tres años de matrimonio, tres años de lucha, para nada. Todo había sido una broma.

Capítulos gratis disponibles en la App >

Capítulos relacionados

Último capítulo