A la mañana siguiente o mejor dicho a medio día me desperté y baje a desayualmorzar ya que me había perdido la hora del desayuno.
La familia entera se encontraba a la mesa me preguntaron por mi primo y les informe que pasamos la noche viendo tele y que estaba roncando como un cerdo en mi cuarto.
No le dieron tanta importancia era costumbre que uno o el otro durmiera en el cuarto del otro a diferencia de mis otros primos Marcos y yo nos llevábamos de maravilla claro hay que acotar que éramos los únicos de la misma edad.
Ya que entre los tíos de mi padre, es decir, mis tíos abuelos el mas joven tenia 50 años, luego le seguían los hermanos de papa y sus primos donde el mas joven tenia 31y entre los bisnietos que era la generación en l que entrabamos mi primo y yo éramos los mayores, ya que el que se nos aproximaba tenia 15 años y el resto eran niños. Así que como comprenderán éramos como hermanos desde niños.
***
Volviendo a mi patética vida, ese día recibí una llamada de paulino el italiano diciendo que tenia una semana para arreglar todas nuestras cosas e irnos a Italia.
Así que la semana paso entre congelar mi semestre en la universidad, arreglar mi documentación e irme de compras con mi madre.
Durante esa semana tanto mi primo y yo nos escapábamos en las noches y nos íbamos de fiesta.
Recibíamos constantes reclamos en la mañana de parte de nuestros padre pero nos excusábamos con que era nuestra semana de soltería, claro esto se lo decíamos con u nivel de de alcohol por las nubes.
Pero ya era viernes y mañana partiríamos a Italia.
Amaneció tan gris como mi estado de ánimo. Me encontraba ojerosa. Todas esas noches de fiestas me estaba pasando factura uno de los sirvientes de la casa. Entro a mi habitación por mis cuatro gigantescas maletas (si mi madre era una exagerada y me hizo empacar ropa para todo tipo de ocasiones), cuando baje ya paulino se encontraba con mi familia mi primo Marcos, todos estaban presente para despedirnos, la hipocresía mata el cariño, y lo digo porque quería a mi familia pero al ver que se mostraban melancólicos por nuestra partida me enfermaba.
Los únicos que de verdad se les veía que les afectaba eran a los abuelos y a nuestros padres.
Nos despedimos. Trate de no llorar cuando me despedí de mi padre que era el más afectado. Mi madre como siempre se porto seca e indiferente. A veces no la entiendo.
Calme a mi padre diciéndole que todo estaría bien y que por lo menos no me iba sola. Marcos me acompañaba, y en cierto modo eso me mantenía tranquila.
El solo pensar que fuera sido yo sola me fuera muerto de los nervios. Porque seamos claros apenas pise Italia estaremos en una familia a la cual no conocemos, y me aterra pensar que no nos traten bien o nos hagan la vida imposible.
No se en que momento ya estábamos abordando el avión venia muy distraída pensando en mi padre y en lo que nos esperaba en Italia, solo se que Salí de mis pensamientos cuando escuche la voz del capitán del vuelo:
"Señor pasajeros, abrochasen sus cinturones, despegaremos en pocos minutos con destino a roma, Italia."
Listo ya no había vuelta atrás. A mi lado marcos se acomodaba en su gran asiento de primera clase. Y se disponía a dormir. Yo por mi parte me dedique a escuchar música en mi celular.
Dentro de unas horas estaré en mi nueva vida.....
Italia
Después de tantas horas de vuelo. Llegamos a Italia, específicamente a Roma.
Al pasar por todos los procedimientos del aeropuerto nos dirigimos a la salida. Y abordamos un auto que era nada más y nada menos un Audi S4 Negro, que nos estaba esperando para llevarnos a la casa.
Si mi primo se encontraba nervioso o incomodo no lo demostró, durante el vuelo se limitó a dormir y durante el trayecto en auto no me dirigió la palabra. Empezaba a pensar que ahora si le estaba afectando y estaba en shock.
Luego de una hora de viaje en auto llegamos a una colina donde se vislumbraba una gran mansión o debería llamarlo palacio. Era la casa más grande que había visto parecía un museo (y yo que pensaba que mi casa era grande).
El chófer nos abrió la puerta y cuando trate de tomar mis cosas me indico que él se encargaría...
Al subir por las escaleras me quede más asombrada la casa era elegante y tenía pinturas que para mi opinión no creo que fueran replicas sino originales...
La casa era la exquisitez en gusto de decoración, porque era antigua, pero a la ves elegante y moderna tenia los tres factores más importantes.
En el recibidor se encontraban unas muchachas que probablemente eran de mi edad o menores.
Muy buenas tardes—nos dijo—si me permiten los acompañare a las que serán sus habitaciones—tomaron nuestras cosas de las manos del chofer y nos indicó que las siguieran.
Caminamos por unas series de pasillo con ventanales tan grandes que eran desde el techo al piso por donde podías apreciar un hermoso jardín interno con bancos esparcidos por todos lados, mesas para tomar o comer algo una mesa como de 20 o 30 puestos.
Al fin doblamos a la izquierda y llegamos a otro pasillo sonde había muchas puertas que deduje que serían las habitaciones.
Entramos a la que iba hacer mi habitación y más loca me quede era del tamaño de mi cuarto y el de mi primo juntos.
Esta habitación tenía no solo un baño que dejaba en ridículo en de mi casa, sino que hasta tenía un cuarto aparte de ropero más grande que el de casa.
Esta es el área de las habitaciones de los jóvenes la habitación de su primo es la que se encuentra al frente—me dijo la chica y al ver mi cara me explico mejor.
vera la casa como ve es muy grande, y aquí no solo vive una sola familia. La casa fue construida con el objetivo de que todos vivieran aquí.
—(vaya igual que en casa pensé)—
Pero debido a que como es natural hay jóvenes y mayores decidieron escoger un ala para los mayores y este para los jóvenes, así no se molestan y digamos que así reina la paz. Disculpe no paro de hablar
—deduje que dijo eso por la cara de idiota que tenía, pensé.
—mi primo no espero más y sin aun dirigirme la palabra se fue con la otra chica a su nueva habitación.
Al ver que la chica no continuaba hable—
Tranquila no te preocupes— no encontré que más decirle, aun me estaba haciendo a la idea de que viviría aquí.
El señor Paulino nos pidió, que le informáramos, que la cena será dentro de dos horas, que aprovechen a descansar y se preparen; el mismo vendrá por ustedes para llevarlos al comedor.
¿Gracias...? —debió de darse cuenta que no sabía su nombre porque se presentó—
Micaela y seré la encargada personalmente de usted mientras este aquí señorita Julietta—pude percatarme que la chica era latina tenía la piel trigueña, cabello oscuro al igual que sus ojos.
cualquier cosa que necesite solo tiene que marcar el botón azul del teléfono y estaré aquí enseguida—me fije a donde ella me señalaba y junto a la cama había dos teléfonos uno en la mesita de noche y otro en la pared que era el que ella indicaba.
Gracias Micaela—le dije—voy a darme un baño y descansar para luego prepararme.
¿Le parece si paso dentro de un rato a traerle algo de tomar y la ayudo a prepararse? —se ofreció—puedo ir desasiendo sus maletas mientras se relaja en el baño y si necesita que algún vestido sea planchado para la cena estaré en cantada de ayudarla.
Me parece muy bien. Voy a ver como esta mi primo. Puedes hacer lo que quieras con mis maletas y gracias. —le dije mientras salía y cruzaba el pasillo para ir a la habitación de mi primo.
Entre a la habitación y vi a la otra chica enfrascada en las maletas de mi primo y este se encontraba boca abajo en su cama, su habitación era idéntica a la mí a.
Me acosté al laso de él y lo abrasé. Él no me miro ni hablo. Solo me abrazo y enterró su cara en mi cabello y comenzó a llorar. Lo calmé con palabras suaves y le dije que estaríamos bien. Después de unos minutos el dejo de llorar y me miro a la cara.
Lo siento jul... –me dijo secándose las lágrimas con las manos—lo siento tanto.
¡Ey! ... porque lo tienes que sentir, ni tu ni yo somos culpables de esto— le dije mirándolo.
No lo digo por eso, de eso estoy claro— expresó.
¿Entonces porque me estas pidiendo disculpas? — le pegunte.
Porque, desde que salimos de casa, me he comportado como un idiota— me confeso.
Yo no pienso eso— le aclare.
¿No? — pregunto sorprendido
No. Pienso que te habías tomado esto --- dije haciendo un movimiento con mis brazos, como si abarcara todo dentro de ellos--- demasiado tranquilo, y ahora es que has caído en la cuenta, de que de verdad está pasando—se quedó pensativo, como si estuviera analizando mis palabras.
¿Sabes? Creo que tienes razón--- me dijo alzando la mirada--- tenía la vaga idea de que esto no era real, pero ahora que estamos aquí, me siento como encerrado.
Se lo que sientes, la chica que me fue asignada, debe de pensar que soy idiota, porque, mientras ella me hablaba, yo solo me estaba tratando de hace me a la idea de que viviremos aquí ahora— las ultimas palabras las dije soltando un suspiro.
¿La chica que te asignaron? —pregunto mi primo extrañado—¿de qué hablas?
¡De las mucamas! Tú también tienes una, cuando entre ella estaba sacando tu ropa y acomodándola en el vestidor—dije buscándola con la vista, mi primo hizo lo mismo, al no verla me levante de la cama y la busque en el baño y el closet, pero no estaba—creo que ya no está.
Creo que estas algo loca, no recuerdo a nadie—dijo mi primo sentándose en la orilla de la cama—
El loco eres tú , porque estaba una chica rubia cargando tus cosas—
¿Estas segura? —
Si muy segura—
¿Y porque ya no está? ---
Creo que se asustó cuando te vio llorando—comente mientras me tapaba la boca para no reírme.
Genial creerá que soy una niña llorona—
Relájate, no creo eso, y cambiando de tema Paulino pasara dentro de una hora por nosotros, para asistir a la cena con la familia, así que arréglate, yo iré hacer lo mismo—me acerque a él y le di un abrazo estilo oso—y tranquilo estaremos bien pero si quieres seguir llorando puedes ir corriendo a mi cuarto solo tienes que cruzar el pasillo—esto último lo dije riéndome y soltándome muy rápidamente, mi primo solo se limitó a mostrarme su dedo del medio mientras se reía.
Entre a mi nueva habitación encontrando a una Micaela terminado de colocar mi ropa. Por lo visto la chica era buena en su trabajo porque ya había sacado todo de las tres maletas y solo cargaba un vestido en manos.
Le di las gracias y le dije que me dejara ese en la cama que era perfecto para la cena. Era un vestido color hueso la parte de las mangas y el busto y la falda eran de color rojo pasión, la cual iniciaba debajo del busto y solo llegaba hasta uno o dos centímetros sobre la rodilla. Era delicado pero elegante a la vez.
Ella me comento que lo dejo de último porque le pareció perfecto para la ocasión. Me dijo que buscaría los zapatos indicados para él. Entro al closet y saco unos zapatos del mismo color rojo del vestido, si les soy sincera no tenía idea de haber metido ni el vestido, ni los zapatos, eso quiere decir, que mi madre era la causante de ello.
Micaela se retiró para que yo me bañara y preparara, no si antes decirme que pasaría antes de la cena por si necesitaba algo más.
Me estaba terminando de maquillar y me di cuenta que apenas eran las 7:30pm, en pocas palabras de los nervios terminé de arreglarme antes de tiempo, decidí acostarme un rato para tranquilizarme un poco.
Cuando mi puerta se abrió de repente con un Marcos nervioso sin camisa y solo en pantalones negros de vestir, en sus manos llevaba dos camisas de vestir una del mismo rojo que mis zapatos y la otra de color azul rey.
Ayúdame no sé qué ponerme---me dijo todo estresado.
La azul—le dije sin dejar de levantarme de la cama.
¿Estas segura? —
Si la azul te resalta más el color de tus ojos, sin mencionar que te queda perfecta—Le dije terminado de pararme.
Y porque no la roja—
Porque la roja nuca me ha gustado con te ha quedado, aunque el color te luce, pero el estilo de la camisa no, y si te la pones parecería que nos pusimos de acuerdo para combinarnos—al decirle esto él se fijó en mi ropa.
Estas hermosa---dice con una sonrisa--- Me encanta como luces en ese vestido. Resalta tus caderas y tus piernas sin mencionar tu busto—me dijo con cara de sorpresa—no sabía que tenías buen cuerpo—me dice riéndose y yo también me rió de su comentario, ya era algo común en el decirme eso cada vez que me ponía un vestido soy más de pantalones o shorts que vestidos.
¡Gracia! pero apúrate ya deben de venir por nosotros--- le dije
Él se retiró a su habitación. A los minutos apareció Micaela. Me indico que Paulino ya estaba por pasar por nosotros.
Me pregunto si necesitaba ayuda y le dije que como fue ella quien arreglo mis cosas, me localizara por favor, un par de zarcillos de perlas rojas con un juego de pulseras, que quedarían perfectos con mi atuendo. Me los entrego y cuando terminaba de colocarme la pulsera llamaron a la puerta.
Paulino se encontraba detrás de ella...
Las presentaciones y problemasMicaela abrió la puerta, mostrando a un Paulino impecable, con un traje gris hecho a su medida detrás de él, se encontraba mi primo.Caminamos por el mismo pasillo por el cual nos habían dirigido a nuestras habitaciones, como ya me sabia el camino me dirigía a la puerta que lleva a la gran sala, cuando Paulino nos indicó que dobláramos a la izquierda, al parecer había otro pasillo y no me había fijado.Cuando llegamos al final este nos condujo a una gran puerta de madera.Entramos a un despacho, todo era de madera hasta las paredes y estaba lleno de estantes con libros, en el fondo había un gran escritorio de madera y a sus lados dos puertas, me fije que había en total cuatro puertas las dos del escritorio, por la que entramos y otra que era de vidrio y madera parecía una gran ventana. Por ella se vislumbraban luces tenues y una suave música.Me percate de que tres personas se encontraban en la gran habitación.Julietta. Marcos, estos son mis sobrinos, s
Sociedad:Al llegar al gran salón, nos encontramos con un gran recibimiento, había en total de unas 100 personas aplaudiendo nuestra entrada. O eso pensé eran muchas y supuestamente eran familiares y amigos más cercanos de la familia.Nos presentaron ante todos y nos llevaron al centro del salón donde nos colocaron con nuestras respectivas parejas para que iniciáramos un baile.El solo pensar en que debía tocar a ese imbécil me daban ganas de vomitar allí mismo sin ningún tipo de vergüenza.Me coloque entre los brazos de Christiano, evitando su mirada o mejor dicho su rostro, hasta su perfume, que era una exquisitez me empalagaba y me daba nauseas. El solo pensar que tendré que vivir con él y darle un hijo me hacía ver que estaba grave la situación para mí.Mientras nos movíamos al compás de la música observe como mi primo se veía muy relajado con su futura esposa. Por una parte, me alegraba que a él le estuviera yendo bien.Un euro por cada uno de tus pensamientos—dijo Christiano sac
Poco después.Me desvestí, llame a Micaela y le pedí que me trajera algo de cenar y algo dulce para después, como también agua y refrescos.Micaela apareció a la hora. Con una bandeja con mi cena y con una canasta llena de aperitivos y bebidas los metió en una pequeña nevera que no me había fijado que había en un rincón de la habitación.Se retiro. Y decidí salir a la gran terraza a fumarme un cigarrillo, estaba muy estresada. Me fije que era grande y que mi habitación compartía la terraza con otra, tenía una gran vista de la ciudad y de la piscina de la casa.Cuando me disponía a encender el cigarrillo escuche que llamaban a la puerta.Corrí hacia la habitación y me coloqué un pijama lo más rápido que pude. Me acerque a la puerta con temor de quien fuera.¿Quién es? —pregunte.Es Marcos. Abre necesitamos hablar--- Le abrí a mi primo y él se dirigió directo a la cama.¿Creo que tenemos que hablar? —me dijo.Crees no. Tenemos—dije¿Qué propones? — dijo mientras se incorporaba de la cam
En la mañana me despertó la sensación de no poder respirar. Al abrir mis ojos me encontré con que Marcos tenía todo su peso sobre de mí. Lo empujé como pude y el muy estúpido ni se despertó. Logré zafarme de él y me fui a mi habitación, tenía que vestirme para ir a desayunar.Al entrar a mi habitación me encontré con una Micaela preocupada.Señorita ¿Dónde estaba? — se le veía lo angustiada que estaba.Tranquila dormí con mi primo, mi vecino de cuarto resulto ser un escandaloso en la noche o mejor dicho su acompañante—dije acostándome en la cama.¿El joven Christiano? — pregunto.Si— respondí.¿Está segura? —en su cara se veía que no me creíaTan segura, que vi cómo le practicaba sexo oral a una pelirroja—dije.¡O por Dios! si era una pelirroja seguro era la señorita victoria, la ex novia del joven Christiano—dijoLa verdad no me importa quien sea, solo no espero que sea repita todas las noches, amo dormir en total silencio, y para ser sincera no me interesa saber de la vida sexual de
Me encerraría en mi habitación, no quería ver a nadie.Al llegar a mi cuarto cerré la puerta con seguro y la de la terraza también.Saque dos vasos de la nevera uno lo llene de agua y el otro lo utilice de cenicero. Últimamente estaba fumando de más, pero al diablo eso, necesitaba descargar mi rabia con algo.Cuando terminaba de fumar sentí como la puerta se abría. Disculpe señorita se encuentra bien?—dijo Micaela cerrando la puerta con seguro nuevamente.Si estoy bien, pero como entraste?—Al ser su encargada soy la única que tiene derecho de tener llave de su habitación a parte de usted claro—dijo. Ante su respuesta solo hice un gesto de que me daba igual, me encontraba en mi faceta de ser acida hasta con Dios si se me atravesaba.Disculpe nuevamente señorita, me entere de lo sucedido en el desayuno por eso le traje algo para que coma—vale la mujer es un pan de Dios yo la ignoro y ella me trae comida.Gracias—fue lo único que dije sin mirarlaNo es nada señorita, y déjeme decirle q
CRISTIANO.10Vamos habré los ojos ya se que estas despierta—Le dije, pero ella insistía en hacerse la dormida.Cuando entre por la terraza a su cuarto solo quería disculparme con ella.Mi tío Paulino me hizo a entender que ella no tiene la culpa de lo sucedido y que ambos estamos en la misma situación que debería tratar de llevar la fiesta en paz con ella y de buscar las maneras para que esto se de bien, me recomendó que la buscara y que tratara de que ella me perdonara.Porque a ella debería de tratarla con respecto, que me gane su amistad. Me dijo que al casarme con ella su familia se salva de la ruina pero que de ella depende de que la nuestra se salve si no me da un heredero.Por eso lo pensé bien se que mi actitud con ella no fue la adecuada desde un inicio y que lo que hice con victoria tampoco, mi tío me hizo pensar y darme cuenta que solo pensé en mi y en todo los planes que se me cayeron por culpa de este matrimonio, unos de ellos era el matrimonio con victoria no es que la a
Abría mi boca para responder cuando la puerta del cuarto fue abierta de nuevo, por Cristiano.E… disculpen olvide que entre fue por la terraza y la puerta de mi cuarto esta cerrada con llave—dijo pasando y esquivando las miradas de ambos—yo… solo voy a pasar y salir por la terraza, permiso—dijo mientas rodeaba la cama y se dirigía a la terraza, saliendo a esta y cerrándola tras de si.Oook… eso si fue incomodo—soltó mi primo.Marcos, no me vayas a agarrar a burla es lo único que te pido—dije mirándolo a los ojos demostrándolo lo tan confundida que estaba.Pero me puedes explicar por que el estaba en tu cuarto y precisamente no hablando de política así que suelta la sopa—Le conté desde como fui despertada hasta lo sucedido hasta que el llego.Vaya—Solo dirás eso—Es que si digo lo que creo primita me vas a matar a golpes ¿ y sabes algo?—¿Qué?—Aprecio mi vida—O vamos Marcos déjate de idioteces y di lo que piensas—Vale pero cero golpes—Cero golpes—Júralo—Júralo por lo que mas qu
Cristiano.****12Mis nervios explotaron de repente, quien iba creer que de un día para otro este hombre cambiaria.Pero en algo el tenia razón debemos hacer una tregua no podemos pasar 5 años de nuestra vida en una perenne pelea.Corrí a mi cartera y tome mi celular, eran las 11:55 pm solo tengo 5 minutos para calmarme, pensar que le diré y cruzar la puerta de la terraza.Aunque pensándolo bien no tengo por que ser puntual podía dejarlo esperar uno 10 minutos así que me dirigí al baño, me lave la cara y me refresque un poco.Cuando Salí al cuarto ya eran las 12:00. Así que decidí cambiarme de zapatos y colocarme unos bajitos. Bebí un poco de agua y busque mis cigarrillos en mi cartera. Cuando me dirigí a la puerta eran las 12:15pm.Salí y despaldas a mi caminando hacia su cuarto estaba cristiano, vestido con unos jeans y una camisa negra de algodón, que le resaltaba los músculos de la espalda y los amplios hombre. En ese momento me di cuenta que era afortunada de que por lo menos me