VICTORIA Sigo su línea de visión y las veo mirar hacia donde están los del alto mando. Parece que Axiel resultó ser el compañero de alguna de ellas. —Muy bien, ya tengo sus informes, tomaremos una decisión y se las haré saber, por favor preparen a sus guerreros y estén alerta. Una guerra se aproxima y debemos estar preparados. Todos se levantaron y comenzaron a salir, las gemelas también lo hicieron, pero se fueron hablando entre ellas. —Creo que tu beta ya tiene pareja. —Por fin, es desesperante tenerlo soltero. Solté la carcajada mientras me ponía de pie para salir. —Lucien. Volteé a ver a Jazmín que solo miraba a Lucien, mientras él solo le mostraba una cara de desprecio y un gruñido bajo salía de su pecho. —No quiero molestarte, solo quiero saber si me darías permiso de llevar a Ben a la manada. —¿Por qué haría eso? —Por favor Lucien, deja de tratarme así, eso duele. Un gruñido salió ahora de mí al ver como le hablaba. —Bien, puedes hacerl
LUCIEN Pasé mis manos varias veces por el cabello para tratar de calmar mi ansiedad. Errick está tan enojado que quiere ir por su cabeza y talvez debería dejarlo. —Por esa misma razón fue que Joshua comenzó a traicionarte, no era fácil para él ver como tomabas a su compañera, como su vientre crecía cada día y no por él. —Así que, se alió con Dementu para tenderte una trampa en aquella manada, si mal no recuerdo, fue él quien te envío allí. ¿Puso en peligro a mi hijo solo por una estúpida venganza? —Aquí es donde entramos en la parte de porque tu vínculo con ella sigue vivo. Me miró por unos segundos antes de continuar. —Joshua hizo un trato con Dementu a cambio de información, utilizar magia prohibida para romper el vínculo. La Luna de esa manada estaba aliada con los rebeldes así que fue el momento perfecto. —Ahora entiendo. —Un puñal con un corte limpio, quitándole la vida mientras la magia entraba en ella y la traía de regreso. El problema está ahí, an
VICTORIA Iba camino a la cocina para buscar algo de comer cuando escucho a Santi llamarme antes de llegar a mí. —Parece que tu noche fue interesante— me dice en lo que ve las marcas de mi cuello. Mendigo lobo salvaje, cuál era la necesidad de dejarme tantas marcas, ni para que hablar de Errick, Lucien fue peor al dejarme marcas hasta en las nalgas. —Tú que hablas si ya te veo bien mordido. Miro su cuello, tiene una marca de cada lado del hombro. Miro como hace un puchero antes de llevar la mano a su cuello. —Al menos a ti te dejaron marcas suaves, a mí me mordieron cuatro veces, dijeron que eran sus lobas. Eso dolió bastante. Solté una carcajada mientras me sostenía de él. —Prometo que la segunda vez no dolerá tanto, lo sentirás más… —Placentero. Solo asentí y le sonreí, ambos llegamos a la cocina y Santi me hizo señas para que solo me sentara y no hiciera nada. —Oh, no, no, no, usted diga que es lo que quiere y nosotros lo hacemos, es mi responsabilid
NARRADOR Victoria salió corriendo a la casa de la manada, quería encontrar a Ben, todo su ser le gritaba que lo buscara. Llegó a las afueras cubriéndose un poco con el brazo al sentir el fuerte calor que emana del lugar. Se conectó con Inara para que pudieran encontrarlo y fue cuando lo sintió, alejándose por atrás. Victoria corrió como pudo y miró a un grupo de personas, en medio de ellos estaba Santi con Ben a su lado. Los escoltas de Ben permanecían alerta en su forma lupina observando todo. —Ben, cariño. —Mami. El pequeño corrió hasta ella para abrazarla, algo que no pasó desapercibido para unos ojos grises que miraban con resentimiento aquella escena. —¿Estás bien? —Si mamá, ¿dónde está papá? Victoria volteó hacia donde sentía la presencia de su compañero, sabía que estaba protegiendo a los suyos y dando órdenes. Volteó a ver a los guardias de Ben que se quedaron atentos, esperando su orden. —Vayan con Lucien, él los necesita, díganle que yo es
NARRADOR Victoria miraba atentamente aquellos ojos que la regresaron al pasado, aquella noche en dónde ambas se enfrentaron. Inara se mantenía alerta al igual que Victoria, podían utilizar su autoridad sobre ella, pero no lo harían. Harían lo mismo que Lucien, dejar que cada quien escoja su lealtad. La loba de Séfira dio un paso al frente, quedando libre del cuerpo sin vida del lobo. Sus ojos dorados se cerraron y se inclinó delante de su Reina. La estaba reconociendo y aunque sabía que no sería fácil que confiaran en ella lo iba a volver a intentar y esta vez quería hacerlo bien. —¿Sabes que no será tan fácil?, no confío en ti. —“Lo sé, cometí un error grave y estoy dispuesta a enmendarlo Victoria, no importa cuando me lleve” Victoria no quería verse caminando con una loba a su espalda, así que se hizo de lado y dejó que ella guiara el camino. —Diosa, no sé si me oyes, pero por favor, cuida mucho a Lucien. Susurro bajito mientras caminaba por aquel estrecho túnel os
VICTORIA Llegamos a lo que fue una manada en el pasado. Todo estaba desolado, lleno de tierra, pero las casas se mantenían en buen estado. Parece que después de todo, si le prestaban algo de atención. Me pregunto… mis ojos subieron a ver las torres del castillo a lo lejos. Estaba separado de las casas aquí abajo, no estaba segura, pero algo me decía que ese castillo era el mismo que me había mostrado Cristal. Estaba agotada, cansada, tenía tanto sueño. —Mi Reina, las doncellas y yo iremos a limpiar un poco el castillo, cuando esté listo podrá descansar. —Está bien Derta, también iré, así ayudo. Santi también vino conmigo cargando a Ben que estaba completamente dormido. Séfira se quedó ayudando a quien podía aunque era obvio la hostilidad con la que la trataban. Debo estar pendiente de ella, aún no me fío del todo. Cuando las puertas enormes de madera se abrieron ante nosotros. Lo primero que vi fue el hermoso candelabro a mitad del recibidor. Derta comenzó a coloca
VICTORIA Me acerco sigilosamente a la habitación de Santi, espero que de verdad no los agarre en nada raro o muero de vergüenza. Toco y espero a que abran y no tarda mucho antes de que la puerta sea abierta. Una de las gemelas es quien me abre y al ver que soy yo, se inclina ligeramente. —¿Mi Reina, puedo hacer algo por usted? Entro y paso adelante, la otra gemela está en la cama mientras Santi le masajea los pies. —Necesito un favor de ustedes, pero necesito que sean silenciosas y de ser posible consigan algo que cubra nuestro olor. Todos se miran sorprendidos y ahora Santi me ve con cara de que estoy a punto de cometer una estupidez. —Tienen media hora. Salí y corrí a mi habitación. Me bañé y me coloqué ropa cómoda. No pasó ni media hora y ya estaban las gemelas y Santi en la parte trasera del castillo. —Aquí está lo que nos pediste para cubrir el olor, pero… —¿Cuáles son sus nombres? —Garden y Garrett. Les di un asentamiento antes de comenzar nuestro via
VICTORIA —Por eso nuestro vínculo es diferente. —Es más fuerte, no diferente. Aunque el bruto ese haya roto el vínculo seguía atado a ti, parece que la Diosa los quería bien unidos. —¡Seguro!, tanto que el vínculo con ella lo tiene a punto de caer en sus garras. Bufé molesta y una amargura me cubrió el pecho. Duele ver cómo el hombre que amas se suaviza por otra mujer que no es nada menos que su ex. —Bueno, ahora hablemos de eso, por eso estoy aquí, necesito respuesta, trato de hacerme la fuerte, pero la verdad es que… —Te entiendo, entiendo lo que sientes… De pronto ella me miró con una sonrisa pícara antes de comenzar a reír a todo pulmón. Fruncí el ceño ante eso y me quedé a esperar con paciencia a que terminara. Ella seguía riéndose bajito mientras me lanzaba miradas furtivas. —Estás en problemas Victoria—, sonrió como si nada y yo no entendía lo que decía hasta que el estruendo afuera llamó mi atención. Me levanté dando grandes pasos a la puerta y cuando la