Rosalie estacionó frente al lujoso edificio de Margot Bressan, entregó las llaves al valet, y entró en el vestíbulo.

Era enorme, con columnas de color crema, una enorme araña con cristales lujosos, muebles de colores cálidos. Una alfombra roja de la más alta costura. Y había docenas de otras personas entrando, todas con ropa lujosa, había mucho oro brillando en el vestíbulo.

Ella siguió hacia las grandes puertas abiertas que llevaban al salón, había dos guardias uno a cada lado, y su nombre fue confirmado en la lista.

Rosalie respiró profundamente y entró al salón.

Las luces eran de un azul marino deslumbrante, con una araña cubierta de lo que parecía diamantes...

Había espacios reservados con sillones lujosos, negros. Estaban complementados con mesas de acero con cuero, había algunos adornos caros encima de ellas. Una especie de estatuas minúsculas de Margot Bressan.

Era su fiesta de cumpleaños después de todo. Su padre era un gran CEO de la industria de Hollywood. Rosalie pronto s