~Tamia~

Había una larga fila en la entrada, pero nos hicieron pasar sin tener que esperar.

Noté que algunas personas comenzaron a quejarse, pero al darse cuenta de quiénes éramos, se quedaron en silencio y nos mostraron mucho respeto.

Nos llevaron a la zona más exclusiva. Esta estaba en el pent-house y tenía un bar exclusivo, los sofás eran cómodos, no había mucha gente, teníamos una mesa y una gran vista del resto de la disco en la planta baja. Un DJ estaba en el escenario, la gente saltaba feliz, había tubos de Pole Dance disponibles para que se entretuvieran quienes así lo desearan, las luces eran coloridas y tenues.

Me encantó la música electrónica que estaban tocando en ese momento.

Leo nunca me dejaba divertirme de esa manera. En cambio, asistíamos a funciones serias y fiestas elegantes, nada salvaje ni despreocupado como eso, así que estaba feliz.

Sylvester pidió champán y lo trajeron con bengalas, fue hermoso.

"¿Quieres bailar?" Me preguntó.

"Más tarde, acabamos de llegar." Res