"Perfecto, amorcito, entonces, ¿qué hacemos mientras esperamos a que el consejo te llamé?" Le pregunté con una sonrisa que me devolvió.

"Hace mucho que no nos relajamos y hoy quiero estar contigo. Salir a cazar en forma de lobo, hacer un picnic y hacer el amor bajo la luz de las estrellas." Dijo.

Al instante, me sentí como una niña chiquita cuando le dices que va de paseo, una amplia sonrisa se dibujó en mi cara. La idea era tan irresistible que un suspiro escapó de mis labios, eso era exactamente lo que necesitaba.

"Creo que te gusta la idea." Agregó, riéndose de mi cara de niña ilusionada, yo solo asentí.

"Primero voy a ir al salón para ponerme al día con todos, luego comenzaremos nuestro día juntos." Me indicó mientras me acercaba a él.

Buscó algo en mis ojos, luego sonrió.

"Muy pronto todo este asunto acabara y viviremos en paz." Dijo, tocando mi pancita que ya se veía un poco abultada y besando mi cuello.

No podía esperar a que hundiera sus dientes y completara el vínculo. No nece