Cuando trajeron a mi hijo me cayó el peso de la realidad, no podía creer que yo estuviera entre la vida y la muerte cuando mi hijo está tan pequeño. Joder, sentí mi mundo entero, desmoronarse ante mis ojos y no pude evitar derramar algunas lágrimas, porque no puedo con la idea de dejarlos solos en cualquier momento, ¿quién lo cuidará y le enseñará todo lo que se supone que debo hacer yo?

—mi esposo se deprimió cuando vio a nuestro hijo, así que la familia decidió retirarse para darnos un tiempo a solas, pero fue peor porque paso de las lágrimas al llanto total y no sabía qué hacer, porque tenía a nuestro hijo en brazos y no quería dármelo. Así que yo también me puse a llorar ante semejante escena, esto parecía más una despedida que otra cosa, y supe que así serían mis días hasta que mi esposo se recuperara. Mi amor no te pongas así, te prometo que lucharemos para vencer esta maldita enfermedad y los tres viviremos juntos un montón de años más.

—levante mi vista para ver a mi esposa ta