Empapado en sudor, James jadeaba. Aun así, sentía una sensación de alegría y regocijo.

Desde que había llegado a Endlos, a menudo se veía obligado a enfrentarse a oponentes o cultivadores mucho más fuertes que él. Siempre buscaba la forma de evitar enfrentarse a ellos, pues no deseaba desafiarlos tontamente.

En todo este tiempo, James nunca había tenido la oportunidad de entablar un combate adecuado. Finalmente, tuvo que enfrentarse a Wynona, que era igual a él en muchos aspectos.

"Aprovecharé esta oportunidad para evaluar los resultados de mi entrenamiento y cultivación". Pensó James.

Aunque la mayoría de la gente asumió que James había sido claramente derrotado en ese momento, empezaron a notar que las heridas de su cuerpo curiosamente se estaban curando de nuevo, incluyendo el enorme agujero ensangrentado de su abdomen.

"Realmente eres un digno oponente. Entonces yo también debería ponerme serio", murmuró.

Cuando los nuevos músculos del abdomen de James terminaron de form