Una vez rota la formación y rescatada Thea, James se sintió completamente tranquilo.

Confiaba mucho en su propia fuerza y creía que tenía posibilidades de salir adelante sin importar cuántas potencias tuviera la Raza de la Destrucción.

James tenía una idea aproximada de la fuerza de la Raza Destrucción. Aunque contaban con muchos Acmeans, su máximo grado de cultivación estaba en la cima del grado Terra Acme. No había ninguna potencia en el grado Caelum Acme, ni siquiera en todos los Reinos Mayores. Tal vez había algunos, pero permanecían ocultos en las sombras, desconocidos para el mundo.

Después de guardar a Thea en su almacén, James apareció y disipó la escena ilusoria que había dejado atrás.

Xezal siguió intentando romper la formación, pero fue incapaz de hacerlo en un día. A pesar de que contaba con el apoyo de la formación del tiempo, la formación de James seguía siendo impenetrable.

En ese momento, la escena que tenían ante ellos desapareció.

La verdadera apariencia de la