Capítulo 2256
“Espera fuera, Quincey”, volvió a insistirle James.

Quincey explicó: “Padre, este es el discípulo del Señor Yoan. Dijo que podía salvarte, así que lo traje aquí para ver qué puede hacer”.

Farley le mostró a Quincey una expresión vulnerable al escuchar la noticia.

Comprendía cómo se sentía Quincey y no quería decepcionarla. Le dijo: “Puedes quedarte fuera por el momento, Quincey. Tendré unas palabras con él”.

“De acuerdo”. Quincey asintió y se dio la vuelta para marcharse.

Cuando se marchó, Farley dirigió su mirada a James. Con una leve sonrisa, preguntó: “Joven, te envió la Secta de la Divinidad, ¿verdad? El Santo Emperador Divino no pretendía traer a sus discípulos a nuestro territorio solo para ganarse un puesto en la Pagoda de las Llamas, ¿verdad? Está intentando averiguar si sigo vivo”.

Farley pensó que James era un espía enviado por el Santo Emperador Divino de la Secta de la Divinidad.

James frunció el ceño y replicó: “¿De qué estás hablando? Soy discípulo de la Academia W
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