’¡M*erda!’. Darryl estaba atónito y no sabía que Jackie era una mujer vestida de hombre.

Darryl no pudo evitar refunfuñar: ‘Este Jackie debe estar loco para pedirme que me venda los ojos durante el baño. Este hombre debe tener problemas mentales o algo así, quizás un trastorno obsesivo compulsivo’.

Darryl asintió con la cabeza y dijo: “¡Está bien, no hay problema!”.

‘Incluso si tuviera un trastorno obsesivo compulsivo, una vez que esté en la tina de madera, encontraré la oportunidad de irme’.

Al ver que Darryl había aceptado, Jackie se sintió aliviada. Levantó la mano para ordenar a la discípula a su lado que preparara la tina de madera y el agua caliente en la habitación.

A continuación, Jackie se puso de pie y caminó hacia la habitación mientras Darryl la seguía.

Jazmín estaba preocupada por la herida de Jackie, así que los siguió, llevando consigo a Snowy.

Poco después, la tina de madera y el agua caliente estaban listos. Darryl le ordenó a algunas discípulas que agregaran la