Aunque María se resistía a desprenderse del dinero, también sabía que saben que necesitaban que alguien los ayudara, por lo que trajo algo de dinero y llevó a Selena a la Plaza de Esclavos en el Distrito Oeste, donde había un lugar especializado en la venta de ganado vacuno, caballos y ganado. Más tarde vinieron algunas personas que compraban y vendían esclavos y poco a poco se formó un pequeño mercado.

Después de pedir direcciones, María llevó a Selena a un patio en ruinas. Había bastante gente dentro. No mucho después, un hombre se acercó a él y le dijo: "¿Ustedes quieren comprar a criados? Puedes elegir cualquiera de ellos, hombres, mujeres, jóvenes o mayores, altos, bajos, gordos o delgados. El precio no es caro. Llamo a unos para ver si quieren..."

La familia de María había sido rica cuando ella era joven y había sido atendida por sirvientes, por lo que ella sabía como elegir criados.

"Sólo búscame unos mujeres con cuerpos fuertes y déjame ver. Necesito que tienen ningún def