Federico POV
Hace un momento estábamos riendo porque los chicos y yo les contamos a las chicas lo gallina que había salido Romeo quien comenzó a temblar como chihuahua al entrar a la oficina del decano de la facultad, tanto así que cuando el decano le preguntó por qué había participado de la pelea, el muy cobarde, le respondió que había tratado de ayudar a Donato, pero que él había sido el causante de la pelea. No me imagino lo que Donato le tuvo que decir después de salir de la charla, o más bien el gran sermón que el decano nos dio, si no se hizo en los pantalones fue porque del susto de seguro ni siquiera eso pudo hacer.
No recibimos ningún castigo, pero si nos llamaron la atención y levantaron un acta como advertencia para todos.
-Fue mala idea que se metieran en esa pelea con Donato y sus “losers” – Replicó Lizzie observándonos con algo de burla – Mírense cómo quedaron, parecen dálmatas con todas esas manchas.
- ¡Sígueme! Gracias por leerme y por apoyarme. Y cuéntame, qué te parece la historia y cuál de los chicos es tu favorito ;)
Narraciones especiales: Gabriel POV Ya era jueves, un día más y sería fin de semana. Amaba los fines de semana, descansar, ir de fiesta, dormir hasta tarde, no hacer tareas… Va bene, no, las tareas si las hago, no puedo dañar mi buen promedio de notas. Podré ser fiestero, algo perezoso, un guapo chico, un mujeriego que solo tiene ojos para una chica que ni siquiera le hace caso… sí, lo sé, no necesitan decirme que eso es triste, porque yo sé que sí lo es, mi corazón lo sabe y por ello lo único que puede hacer es latir a mil por minuto, si es posible, de la pura emoción cuando mira a la maravillosa signorina que se ha vuelto su dueña. Sí, les permito que sientan lastima por mí. Suspirar y jalarme el cabello es lo único que puedo hacer ante mi frustración. Bueno, es suficiente de este tema por ahora, no sé en qué momento pasé de explicar cuánto amo los fines de semana a declarar el amor que siento po
-Gabriel – Le sonreí de vuelta, feliz de verlo, y no sabía de dónde provenía tal emoción, como que no lo hubiera visto por mucho tiempo y deseara verlo. -Sono contento di vederti ángel – Dijo al abrazarme con ternura, yo le devolví el abrazo al salir de mi pequeño shock, nos separamos casi de inmediato. -Yo también me siento feliz de verte – Él sonrió más al escucharme decir esa frase tan pequeña que significaba tanto. Me sentía emocionada de tenerlo frente a mí, últimamente sentía que era igual cuando veía a cualquiera de los chicos del Team Soccer. Iba a volver a hablarle cuando escuché que alguien carraspeaba y fue cuando sentí que la burbuja en la que estábamos se rompió, como la música se paraba y volvía a la realidad. Mi sonrisa se fue de inmediato y me di la vuelta para ver a Stella y a Pía cruzadas de brazos y viéndonos con recelo, por el rabillo del ojo vi como Fiorella también estaba con molestia en su mirada. Volteé mi mirada a los
-Eso es preziosa, tú no me dejarás en ningún momento y lo que yo quiera, eso haremos, el que manda en nuestra relación soy yo ¿queda claro? – No pude hacer nada más que asentir por miedo a enfurecerlo y que decidiera puñalearme con esa navaja – Perfetto – Dijo para volver a besarme el cuello, no pude hacer nada, ni quejarme o apartarlo de mí, solamente derramé mis lágrimas mientras dejaba que hiciera conmigo lo que quisiera, creí que ese sería el momento perfecto que tendría para abusar de mí. Me senté en mi cama al despertar sobresaltada de tan fatal pesadilla, no era consciente de nada más que de las horribles emociones que estaba sintiendo en el sueño que había tenido, sabía que había gritado en un acto automático de miedo, pero simplemente me sentía ida, me sentía alterada, me sentía vulnerable en ese momento. No sentí absolutamente nada, ni sé cuánto tiempo pasó cuando ya tenía a mamá y a papá en mi habitación junto a mí. -Amore, mía bella, ¿qu
- ¿Mássimo? – Mi rostro era un poema de seguro porque él cambio su sonrisa a una de suficiencia. -El mismo – Habló papá con voz animada como la de mamá. - ¿Tú conoces a mis padres? – Le pregunté sin poner atención a mis progenitores. - ¿Se conocen? – Preguntó mamá antes de que Máss contestara. -Amm…si – Hablé sin voltear a verla – En la universidad, asistimos a la misma facultad y estudiamos la misma carrera, solamente que él está en otra sección y yo en otra – Expliqué viendo a mis padres algo sorprendida – ¿Y qué haces aquí Milán? – Me volví de nuevo a verlo a él. Él sonrió feliz y respondió – Vine porque mi padre me solicitó traerle unos documentos importantes que no podían esperar hasta que se volvieran a ver, ya sabes, negocios, y tus padres me invitaron a desayunar con ellos. -Oh, ¿nuestros padres se conocen? ¿Y cómo es que se conocen y yo no sabía de tal situación? No creo haberles dicho mi apellido Mássimo – Lo acusé c
Celestia salió corriendo de la cocina con una gran sonrisa que la hacía verse maravillosamente hermosa. Ya iba terminando mi desayuno al que los signori Lombardi me habían invitado. Si pensaban que yo estaba aquí por “casualidad” fallaron, el signor Lombardi me llamó ayer por la noche para que hoy acompañara a Celestia a la universidad, él sabía que los chicos y yo no hemos estado teniendo demasiada suerte en mantener contacto con sua figlia a causa de su grupo de “amigos”, le conté cómo iba nuestro progreso en lo que a vigilarla se refería, nos iba bien en la revisión de perímetro y en busca de más evidencia, pues habíamos logrado encontrar desde dónde habían estado enviándole correos amenazantes al signor Lombardi sobre Celestia y mi padre se encargaría de realizar un operativo con otro grupo de élite de la agencia el cual se haría cargo de otras evidencias a partir de ahora para no sobrecargarnos a nosotros y que así pudiéramos seguir r
Narra Leonardo Estamos sentados en las gradas que dan a la entrada principal de nuestra facultad, algunos de los chicos comen, otros viendo su celular, otros hablando entre ellos y yo vigilando el perímetro, aunque mía dolcezza aun no llega. Todo estaba bien hasta ahora y no veía nada extraño, Mássimo nos había enviado un mensaje al grupo que tenemos diciendo sin darnos razón alguna de que se tardaría un poco más en llegar, pues desde que nuestra misión había comenzado hacía unos pocos días llegábamos más temprano para asegurar el área y resguardar la llegada de Celestia. Sin embargo, Max dijo que nos agradaría el porqué de su retraso. A todos nos está costando tener que levantarnos antes y salir de casa a un horario más temprano, pero todo sea por mía dolcezza. Aún no sabemos qué es lo que tiene esa bella ragazza para que nos atraiga tanto a protegerla, cuidarla y apreciarla, hay algo, eso lo sabemos muy b
- ¡Oh! Aquí estás, Tía te he estado buscando, creí que… - la voz de la chica se esfumó cuando nosotros nos volteamos a verla - ¿Otra vez ustedes? – Oh rayos, es la Capaldi, otra vez. Celestia POV -Stella… ciao amica – me paré del sillón viendo a los chicos preocupada. Creí que Stella seguiría insistiendo cuando pregunto qué hacían conmigo los chicos, pero agradecía que me siguiera hablando de que me buscaba a que se pusiera a pelear con los muchachos. -Tía te buscaba por todos lados, Donato te estuvo llamando… hace un momento informaron desde rectoría que no habría clases por la tarde por el baile de mañana, pero al parecer debemos ayudar al comité del baile a elegir a la Reina de Otoño por lo que han solicitado que propongamos a las candidatas que nosotros queramos y que tengan probabilidad de ganar – se emocionó al explicar eso último – ¿Y adivina a quien propusimos? – preguntó con una voz chillona de la emoción.
Celestia POV: El sábado había llegado. El Baile de Otoño era hoy. Estaba parada frente al espejo viendo mi vestido el cual había sido elegido por mí, Stella, Pía y Fiorella, había pasado la prueba del Vo. Bo. Era hermoso en verdad, no lo negaba, no podía hacerlo porque en verdad era precioso a mis ojos y a los ojos de mis amigas. Lo tenía sobrepuesto, aun no era la hora de prepararme, pero admiraba esa belleza de vestuario que tendría que modelar hoy en el baile de la universidad, a través de mi espejo de cuerpo completo. El vestido shampagne es con corte estilo princesa, largo y con detalles brillantes en dorado de época, es hermoso, cuando lo vi me enamoré por completo y decidí que lo compraría. Soy muy poca para comprar ropa (a pesar de que mi armario está repleto de ella) pero a diferencia de mis primas mi armario está semivacío. -En verdad que te verás perfectamente hermosa con ese vestido – alagó Mar con emoción. - ¿Tú c