Capitulo 2
Negocios
Víktor Vitalov
Siento la nieve bajo mis pies, a veces no me acostumbro a pesar de que vivo aquí desde que nací, creo que es porque me la he pasado mucho tiempo en Estados Unidos. Tenemos negocios clandestinos por allá, es bien sabido que los narcos de allá, no reciben bien a los rusos. Los consideran traicioneros, avariciosos, sanguinarios; la verdad es que si lo somos, pero nos importa muy poco.
Hacemos lo que queremos y cuando se nos venga en gana, por eso tengo gran parte de mis negocios en Utah, Wichita Kansas, New York y Miami. Los primeros lugares, son poco movidos, pero los elegí porque son personas religiosas, reservadas, que sé no me van a investigar si me ven por allá en alguno de mis movimientos, y ya he conocido un par de autoridades influyentes en esos religiosos, y los mantengo bastante comprados, por lo que saben donde mantener su lealtad.
Por ahora dejé a un encargado, Vine a Dikson porque se celebrará el matrimonio de unos de mis familiares, no es que sea muy entregado a la familia, pero por ser el heredero al puesto de líder de la bratva, es como una responsabilidad venir.
Todos esperan que haga un mejor trabajo que mi padre, y eso intento, aunque la mayoría me ha dicho que he estado trabajando bien, sé que debo hacerlo mejor.
—Viktor— escucho un voz femenina que me saca una sonrisa —Viktor
Me volteo y allí está ella; Kira, una de mis mejores amigas de la infancia, aunque a veces cuando estoy pasado de tragos, terminamos en otra cosa, pero solo es algo del momento.
—Hola Kira— saludo con un asentimiento de cabeza, no es permitido Abrazarla cuando hay gente a mi alrededor, aunque la miro bien y sé que ella se muere por un acercamiento
—Te estuve esperando por meses— hace un puchero —por fin estas aquí.
—He venido por el matrimonio de mi tío Iván, pero luego debo volver.
Veo que su expresión es de tristeza, no sé si hice bien hace mucho en acostarme con ella, claro que solo estaba bebido, pero aun así, ella lo ha tomado como algo mas serio. No quiero lastimarla, ha sido una buena persona siempre, y antes de que me eligieran como el sucesor de mi padre, yo salía a divertirme en fiestas con ella por toda Rusia.
Le tengo mucho aprecio, pero no es la mujer que necesito para gobernar, y aun si fuera la que necesitara, no quiero casarme aun, quiero gozar de mi libertad y seguir follando como conejo hasta cansarme, porque sé que después que herede el trono en su totalidad, tendré tantos enemigos, que me la pasaré ocupado trabajando para proteger a la Bratva y para proteger a mi familia de sangre, que sé que serán perseguidos.
—¿Por qué no te quedas un par de días mas?— se acerca un poco y acaricia los músculos de mis brazos —así podemos recordar los viejos tiempos donde nos divertíamos— me da una sonrisa coqueta que sé lo que trata de insinuarme
—Kira, por mas que quiera no puedo, los negocios de América no se pueden descuidar, y menos dejarlo en manos de cualquiera que puede ser un objetivo débil para los Narcos de allá.
—Sabes muy bien que mi padre puede ayudarte en eso si quieres tomar un descanso.
Kira Ivanovish es la hija es de uno de los jefes mas sanguinarios del grupo de la bratva, a simple vista, parece solo un ruso mas, pero es sádico con sus víctimas, es controlador, y organizado. Está a cargo de algunos negocios de Dikson y otros que tenemos en Moscú, hasta ahora ha hecho bien su trabajo.
—No puedo, Kira, lo siento— me doy vuelta para irme a alistar para la despedida de solteros, porque la celebración del matrimonio es para mañana, pero su voz me detiene —¿Hay otra mujer? ¿es eso?
—¿de que hablas?— me detengo sin mirarla, pero ella da la vuelta para quedar frente a mi
—¿que si hay otra mujer y por eso es que ya no me quieres?
La miro ya cansado de esto, no me gusta que me arme escena de celos como si tuviera alguna clase de compromiso o exclusividad, es mi amiga, punto. Debo dejárselo en claro.
—No hay ninguna “otra” porque para que la hubiese, tendría que tener alguna clase de compromiso Kira— su rostro es de completa tristeza —Y si lo que me preguntas, es si tengo una conquista, tengo muchas, recuerda que no soy un hombre de compromisos, creo que me conoces muy bien. Y no volveré a América por eso, sino por trabajo.
Me doy la vuelta dejándola con sollozos, pero es que no me puedo quedar consolándola, lo tomaría como algo que no es, y ya no quiero problemas, y menos con mi padre, sé que si esto fuera mas allá, es capaz de mandar a matar a su padre si llegara a meterse de por medio, no le haría eso, creo que es mejor alejarla un tiempo.
Necesito que se olvide de mi en ese aspecto, que solo me vea como ese amigo que puedo ser, solo eso.
Camino hasta una de las propiedades de mi padre, y lo consigo en su despacho, tiene un vaso de Vodka en las manos junto a la botella
—¿problemas?— pregunto sabiendo que el no es de beber tan temprano, a menos que haya algún inconveniente
—Si, pero ya me encargaré— responde aun sin mirarme —¿Cómo van los negocios allá?
—Hasta los momentos bien, pero la ultima vez, tuve diferencias con uno de tus socios, los Berthran— por fin me mira
—¿y eso? El es uno de los mas apaciguadores, casi ni parece traficante, es uno de esos hombres que son tranquilos.
Si, se a lo que se refiere, es como el mediador de todos, creo que es una forma de llevarse bien con todos sin tener problemas, aunque eso lo hace débil, un hombre en este negocio, debe demostrar siempre, que tan poderoso es.
—al parecer, no quiere seguir en nuestros negocios, porque es socio también de los Berks— mi padre se endereza en la silla
—¿de los Berks? ¿estas seguro?— busca en el primer cajón su cigarrillo que nunca falta cuando se siente estresado
—Así mismo, quiere seguir surtiéndonos, pero no quiere seguir en el negocio de la exportación con nosotros, porque los Berks también están en ello.
Mi padre se masajea la sien, sé que esto implica pérdidas para él, y más lo enoja la familia que acabo de mencionar, el jefe de ellos, fue quien mató a mi hermano mayor, nosotros en venganza, le quitamos a su reina, la esposa de los Berks. Con eso sellamos nuestra venganza
—pues tendremos que tomar medidas, no quería tomar acciones en esto, pero con o sin esa familia, seguiremos adelante. Si ellos deciden enfrentarnos, mal por todos, porque haremos que corra sangre.
—esta bien padre, seguiré de todos modos, solo estaba esperando tu confirmación.
—necesito que vayas con los Ivanovish, me comento el líder que se está presentando alzamientos por parte de algunos miembros, quiero que le enseñes, que les pasa a los que buscan meterse con la bratva.
Asiento y me voy de allí, a cumplir con mi deber, y no es algo que considere un peso, no es así. Me gusta hacerme respetar, y demostrar quien soy y de donde vengo, y para eso, debo sacar mi lado sádico, para matar.
Capitulo 3El líder Viktor VitalovEl sol está en su punto más alto, pero aún así, el frío es terrible. Aquí en Dikson, siempre es así, creo que es una de las ciudades mas frías, y en ocasiones, hay que resguardarse, porque los huracanes de viento, se ponen tan fuertes, que se llevan a todo lo que consigan en el camino.Es irónico pensar en eso, sabiendo que tenemos costa cerca, y se supone que eso es para tomar el sol y disfrutar del calor, pero acá no es así. Sin embargo, es uno de los lugares mas seguros para la Bratva, por el simple hecho de tener todo vigilado, y una de las formas de ingreso, para no decir que la única, es a través de los navíos.Controlamos todo lo que entra y sale de este lugar, antes ese era mi trabajo, cuando mi hermano mayor aun vivía, y era el sucesor heredero, yo soy el tercer hermano, por lo que no tenia muchas opciones, el hermano que le sigue, nunca quiso estar del todo en este negocio, por lo que simplemente se encarga de la parte administrativa de lo
Emily BerksUna de las señora del servicio me despierta muy temprano, me lleva el desayuno a la cama y se retira así como vino, sé que tienen ordenes de no acercarse a mi, de no hablarme del todo, la única que se arriesga es Natha, mi padre sabe cuanto afecto me tiene, porque fue muy amiga de mi madre, aunque haya suplido su espacio en la cama cuando mi padre se la folla. No estoy segura de si ella siempre estuvo de acuerdo con eso, cuando se lo pregunté, solo me hizo un gesto restándole importancia y diciéndome que no me preocupara. Intenté indagar, pero mi padre es tan reservado, que no le salio ni media palabra referente a eso.Miro la bandeja en mi cama y se me antoja todo; los panqueques con miel, la leche achocolatada, los cortes de sandía y melón, estoy segura que mi Natha me mandó esto, ella sabe que me gusta mucho y su forma de cortar la fruta es diferente a la de las demás. Comienzo a desayunar mirando mi móvil, y viendo que tengo mensajes de Cecilia y lily, son mis mejores
ViktorNunca me ha gustado esto de estar infiltrado, no porque no pueda hacerlo, sino porque sé a donde me estoy metiendo, sé con quienes lidiaré, y me es difícil contenerme cuando estoy cerca de Berks, el muy hijo de perra se cree mucho, cuando no le llega ni a la mierda de los perros.Ando con un traje negro como cualquier otro, con una camisa de botones gris, pero tuve que usar unos anteojos que me hicieran ver diferente, a parte de llevar un jodido peluquín de color negro, lo que me hace ver con la piel mas clara de la que la tengo. Me paseo por el lugar detallando quienes están aquí, y puedo ver a un par de aliados, así como enemigos. Mi familia no fue invitada porque no somos tan parte de este territorio como lo es el puto de Berks, a ese cabrón casi le lamen los pies solo por un poco de atención. Ruedo los ojos cuando veo al imbécil que no quiso hacer negocios con nosotros del todo, solo para lamerle las bolas a mi enemigo.Los veo interactuar y me bebo el liquido del vaso de W
EmilyAntes de abrir del todo la puerta, volteo viendo como el hombre misterioso desaparece. Aun siento sus labios sobre mi, antes nadie nunca me había besado así, con esa intensidad, con esa pasión, y lo peor de todo es que me gustó. Fue un imbécil, pero no puedo negar que es un hombre atractivo, aunque misterioso, esos anteojos le dan un aire intelectual que me hace imaginar a él en un escritorio conmigo adelante inclinada. Me río de mi misma, como si supiera como se siente eso. Nadie me ha tocado, ni siquiera para mover mi clítoris. Las veces que he experimentado eso, ha sido por mi misma, y he sido torpe, por mas que busco información en g****e, no tengo idea como hacerlo, pero no puedo buscar a un hombre que me enseñe, o que me haga sentir bien, porque si mi padre se entera de que pierdo la virginidad, no sé ni que es capaz de hacer, eso si me asusta.Termino de abrir la puerta, encontrando del otro lado a los guardias que se suponen deberían estar al pendiente de mi, me les esc
Emily El regreso a casa es silencioso, mi padre ha estado con el ceño fruncido moviendo sus dedos en el móvil desde que se subió. Ni me atrevo a preguntarle que pasó en esa fiesta, pero sea lo que sea, tuvo que ser grave para que ni siquiera me diera una mirada en Todo el vuelo.Lo imito y tomo mi móvil escribiendo a lily;“Ya voy de regreso, espero que el fin nos vayamos de fiesta. Creo que llegaré en la madrugada, pero igual iré a clases y les contaré un chisme bueno” Reenvío el mismo mensaje a Cecilia y no se hacen esperar sus respuestas, las muy chismosas les encanta las noticias nuevas, pero no doy detalles, solo las dejo en visto. Me meto en g****e tratando de encontrar algo o a alguien que se que será imposible, ni siquiera su nombre sé, pero ¿Por qué? ¿Qué hago buscando a ese imbécil? A menos que lo quiera muerto, mi padre no aprobaría que ese hombre se acerque a mi. Apago el móvil y vuelvo a agarrar el libro que estaba leyendo cuando veníamos, es lo único que mantiene mi m
ViktorMi padre celebró en Dikson el hecho de que me deshiciera de otro pedazo de basura. La verdad es que no es difícil encontrar siempre al soplón, al que te quiere traicionar, porque siempre habrá alguien que lo delate. En este negocio hay varios tipos de personas; las que siempre son leales a ti, que no necesitas andar con amenazas para que te den información o te lleven a donde quieres. También encuentras a los que están contigo por el dinero o los beneficios que puedes brindarle, que en cualquier momento pueden tenderte una trampa y debes cuidarte las espaldas. Y las peores son las que te brindan un lado de la cara, haciéndote creer que son leales y buenas contigo, pero en cualquier momento te entregan.Me he encontrado con todas, y he sabido llevarlas a cada una, También he salido herido por eso mismo.Muchas veces, si se falla cazando al que traicionó, se debe ir en busca de la familia, eso es solo debilidad, por eso el tener a alguien para formar un hogar, no es bueno aquí, e
Emily Berks De regreso a casa, después de la universidad, me encuentro con mi padre sentado en la sala, mirando la chimenea con un vaso de Whisky en las manos. Su rostro me hace ver que está muy molesto, posiblemente le tocó hacer uno de sus trabajos sucios apenas me dejó. Intento pasar por un lado sin molestarlo para que no me note ni siquiera, cuando está con ese temperamento no lo aguanta nadie. —¿A dónde vas?— interrumpe mis pasos silenciosos sin ni siquiera mirarme —¿Desde cuando tienes falta de educación, que ni siquiera saludad al llegar? Se supone que vienes de estudiar. —Pensé que no querías hablar con nadie— me acerco a él dudando —Te ves molesto —Y lo estoy— da otro sorbo a su vaso —Pero contigo— frunzo el ceño sin comprender —Pensé que me podías contar todo Mily, porque de igual forma yo me entero de todo lo que pasa contigo— trago saliva intentando pensar a que se refiere. —No se de que hablas, papá— me quedo parada delante de él y levanta la cabeza para hacerme una
Emily BerksSubo las escaleras que llevan a mi habitación, y me ducho tratando de mentalizarme de lo que viene, cuando salgo como esperaba, hay un vestido sobre la cama. Me quieren vestir como una muñequita para que mi futuro “prometido” quede hipnotizado.Es azul marino, corto por los muslos y suelto con pliegues, con una pequeña correa con cristales que se ajusta debajo del busto, mis sandalias las elijo bajas porque de igual forma estaremos en casa.Se abre la puerta y entra Natha como siempre para arreglarme. Me maquilla en silencio, me recoge el cabello por la mitad, haciéndome unos bucles con la maquina.Ella siempre había arreglado a mamá, y ahora le toca conmigo, es algo que le gusta hacer y yo la dejo. Aunque por tenerme así de consentida, no he aprendido a arreglarme sola.Ella no me dice nada, y asumo que es porque sabe que ya no puede hacer otra cosa que resignarse, además que tampoco puede opinar porque la ultima vez que lo hizo, mi padre le prohibió verme, y así duró por