Emily Berks De regreso a casa, después de la universidad, me encuentro con mi padre sentado en la sala, mirando la chimenea con un vaso de Whisky en las manos. Su rostro me hace ver que está muy molesto, posiblemente le tocó hacer uno de sus trabajos sucios apenas me dejó. Intento pasar por un lado sin molestarlo para que no me note ni siquiera, cuando está con ese temperamento no lo aguanta nadie. —¿A dónde vas?— interrumpe mis pasos silenciosos sin ni siquiera mirarme —¿Desde cuando tienes falta de educación, que ni siquiera saludad al llegar? Se supone que vienes de estudiar. —Pensé que no querías hablar con nadie— me acerco a él dudando —Te ves molesto —Y lo estoy— da otro sorbo a su vaso —Pero contigo— frunzo el ceño sin comprender —Pensé que me podías contar todo Mily, porque de igual forma yo me entero de todo lo que pasa contigo— trago saliva intentando pensar a que se refiere. —No se de que hablas, papá— me quedo parada delante de él y levanta la cabeza para hacerme una
Emily BerksSubo las escaleras que llevan a mi habitación, y me ducho tratando de mentalizarme de lo que viene, cuando salgo como esperaba, hay un vestido sobre la cama. Me quieren vestir como una muñequita para que mi futuro “prometido” quede hipnotizado.Es azul marino, corto por los muslos y suelto con pliegues, con una pequeña correa con cristales que se ajusta debajo del busto, mis sandalias las elijo bajas porque de igual forma estaremos en casa.Se abre la puerta y entra Natha como siempre para arreglarme. Me maquilla en silencio, me recoge el cabello por la mitad, haciéndome unos bucles con la maquina.Ella siempre había arreglado a mamá, y ahora le toca conmigo, es algo que le gusta hacer y yo la dejo. Aunque por tenerme así de consentida, no he aprendido a arreglarme sola.Ella no me dice nada, y asumo que es porque sabe que ya no puede hacer otra cosa que resignarse, además que tampoco puede opinar porque la ultima vez que lo hizo, mi padre le prohibió verme, y así duró por
Emily BerksNo aguanté toda la cena, pedí permiso y ahora estoy en el jardín caminando por el lugar donde mi madre alguna vez sembró muchas rosas, le encantaba. Me las dejó y ahora lo que me queda de ella es eso, siento que cuando vengo a regarlas y observarlas, ella está conmigo, una parte de ella al menos. No me atrevo a cortar ninguna, las dejo que florezcan y marchiten solas, pero también que vuelvan a nacer. Las riego con dedicación y solo pienso que las dejaré aquí, no quiero hacerlo, es como si tratara de olvidar a mi madre ¿y si las dejan de regar? ¿Y si las mandan a quitar? No quiero eso, solo quiero que mi pequeño recuerdo permanezca así.Siento una presencia atrás y al voltear veo al hijo de los Scott observándome.—No sabia que te gustaba el trabajo de jardinería— se mofa y ya me parece una patada en el trasero—No te importa— respondo dándole la espalda para seguir en mis tareas, pero me toma fuerte del brazo y me voltea para que le vuelva a dar la cara, haciendo que se m
ViktorMis negocios siempre han ido en aumento, si quisiera separarme de los de mi padre, podría seguir expandiéndome, sin embargo, en la bratva nos enseña que la familia es lo primero. Por eso todos nuestros negocios están unificados, por eso tenemos en todas partes del mundo, así como los contactos.Tenemos socios en el gobierno, en la naviera, en los aeropuertos privados y en infinidades de lugares, es así como logramos movernos sin problemas, porque tenemos comprados a muchos, pero nuestros enemigos también.Busco entre mis contactos, los que lograron incluirme en esa fiesta donde dejé un regalo para los dueños, me río imaginando la cara de todos al ver al muerto. Se lo merecía, en estos negocios no se perdona la traición, nadie en este mundo da segundas oportunidades.Necesito saber donde se encuentra ahora mismo la chiquilla de la fiesta, saboreo su nombre ‹‹Emily Berks›› no puedo negar que tiene su belleza, que puede hipnotizar a cualquier idiota, pero para mi, solo puede ser l
Emily BerksA veces es necesario hacer ciertos sacrificios para poder disfrutar, para ser libres, y eso es lo que hago justo ahora. A mi padre le molesta que me escape, pero siempre lo he hecho, el sabe que es porque me tiene prácticamente encerrada día y noche, o vigilada. No soporto que me digan lo que debo hacer todo el tiempo, puedo acceder en algunas cosas, pero no que todas sea impuestas.Se que las consecuencias estarán allí apenas llegue, no se aun cuales serán, pero quería demostrar a los Scott, que puedo hacer lo que quiera, que aunque me tengan vigilada siempre, buscaré salirme con la mía.No soy un animal al que tengan que enjaular, desde que tengo 16 lo he hecho, si principio me terminaban descubriendo siempre, no sabia como hacia mi padre para encontrarme, pero lo lograba, aunque después descubrí, que tiene contactos hasta en la perrera municipal. Odio eso, que tenga que saber hasta cuando me cambio de pantis.El móvil de Lily suena y las dos me miran nerviosas, pero con
Emily BerksEs frustrante cuando haces algo solo porque otros así lo quieren y no porque tu lo deseas, pero la hija de un mafioso ¿Deberia poder elegir? Creo que la mentalidad de ellos, es que no quieren que sus hijos se equivoquen tomando una mala decisión, pero ¿A que costo?He vivido encerrada siempre. Si, no negaré que me soltaron la cuerda en ocasiones, dejándome salir con amigas, disfrutando de un día de playa, cine o lo que se nos ocurriera de momento, pero cuando jalaban la cuerda de regreso había mas responsabilidades que no quería cumplir. Por ejemplo; acompañamientos a papá en fiestas que me inquietaban. También está aquella vez que me quiso casar dos veces. Creo que en el fondo siempre fui una molestia para él, aunque Henry Berks lo disfrazara de amor y cariño.Al principio me trataba muy bien, como su niña mimada, pero con el tiempo eso cambió. No entiendo nada, solo se que extraño a mamá quien era la que controlaba cualquier situación. Si mi padre enfurecía, allí estaba
Emily BerksCamino por la grava que me Lleva a la que se supone será mi hogar ahora, tomo mi maleta aunque Dylan intenta quitármela de las manos, pero no lo dejo, no quiero que toque nada de mi, ni si quiera mi jodido equipaje. Miro todo a mi alrededor que ahora es mas claro sin el montón de personas de aquel día y sin los nervios que me abarcaban porque no sabia lo que me esperaba.Lo primero que noto son las cámaras de seguridad que no vi aquella vez, están por las esquinas de cada parte de la casa, hay una pequeña fuente en la entrada y todo me parece tan ostentoso que me parece que si se destruye algo, pondrán el grito en el cielo. Sonrío imaginando la cantidad de travesuras que haré en este lugar.—Emily, bonita— la voz de la mama de Dylan llama por mi nombre, y volteo viendo que se dirige hacia mi —Espero que te sientas cómoda en casa, Dylan te dará el recorrido por la mansión de los Scott— ahora que la tengo de frente puedo detallarla mejor, y ver lo falsa que se ve. Tiene voto
ViktorMis botas se mueven por la arena de una de mis propiedades en Utah donde mi negocio mas próspero está establecido. Es una iglesia enorme, que ante la vista de todos, es muy religioso, pero por las noches, los días donde no hay servicio religioso, y los domingos después de que todos se vayan, funciona como contador de drogas y es donde se traslada todo el dinero que se recibe y luego a mis manos.Fue una estrategia bastante buena que se me ocurrió hace unos tres años cuando no tenia mucho de haber llegado, después de la muerte de mi hermano mayor. Vi que todos los capos de acá, se manejan prácticamente igual que todos; Donde tienen almacenes o galpones que a simple vista te hace ver que es un negocio ilícito. Son bastante estúpidos como para dejar que sus enemigos, sepan donde tienen su mercancía y aun peor, la que vale mas.Mi padre y mi hermano iban por el mismo camino, hasta que tomé las riendas yo, y no es por alardear, pero me ha ido bastante bien. Por eso mi padre me quier