Jen SaldañaMiamiAl día siguiente después de lo que pasó con Jacob, no podía ver ni a la cara a mis padres. De seguro mi mamá se daría cuenta ya que era una muy buena observadora y claro no me lo podía decir enfrente de mi papá. Esperé en mi recámara hasta que los escuché salir de la casa y después me arreglé rápido para irme a la clínica, allá tendría que pedir de desayunar.Tomé la bicicleta y me fui rumbo a la clínica. Llegando allá, me encontré con que Dulce ya había abierto y ya estaba incluso recibiendo al primer perrito para baño de ese día. Pero era aún temprano, me sorprendía mi prima, era la que llegaba siempre tarde, a no ser que le llamaron para que atendiera al perrito o pasara por él.–Hola Jen, tus ojos destilan sexo – Me saludó mi prima – Dime ¿Lo hiciste con el cuero de Jacob?Me preguntó en cuanto entré a la clínica, no tenía idea de cómo me veía.–Buenos días prima ¿Cómo estás?–Yo bien, pero tú, estás radiante. Quiero detalles, estamos solas. Emiliano me llamó dic
Jen SaldañaMiami–Está bien Jen pero si el viernes se van a comprometer, yo les organizaré algo en mi casa, ya sabes que mi papá no se negará, con poca gente antes de que empieces a enojarte. Serán mis padres, los tuyos y mi primo Ethan y Luz Mary, también Emiliano si quiere ir.La organizadora experta de mi prima siempre salía a flote, le encantaba hacer de todo una fiesta, pero estaba bien que fuéramos solos nosotros y no decirle a todos los chismosos de nuestros demás familiares, porque de seguro solo vendrían a criticar. Y a suponer todo lo que pasaba por sus cabezas, ya saben el clásico, se tiene que casar porque lo más seguro es ya esté embarazada. Y por eso nos apurábamos.–Claro que iré, llevo rato escuchándolas. Viejas chismosas – Nos dijo Emiliano – Ya te puedes ir Jen, afuera está tu galán.Nos sorprende Emiliano y lo que dice está fuera de toda proporción, Jacob me iba a llamar o a mandar un mensaje. Cosa que no habia hecho. Miré mi celular y no tenía nada de ninguna de l
Jen SaldañaMiamiCaminamos a otro mostrador y allí nos enseñó, miles de anillos de compromiso, siendo uno el que me había encantado era un diamante cuadrado hermoso y rosa mi color favorito y al parecer Jacob pensaba lo mismo.– ¿Nos podría prestar ese del centro?, por favor. El rosa – Pidió Jacob.–Claro que sí. – Le respondió la señorita.La chica nos lo entregó y después de haberme probado muchos anillos, pareciera que ese anillo hermoso estaba esperando por mí. Jacob me lo puso y me quedó a la medida de mi dedo y me emocioné demasiado, algo que no debía de pasar sabiendo que nada de eso era real. Pero mis sentimientos sí.–Se le ve hermoso señorita – Me dijo Mildred hipócritamente – Espero que se lo lleven, es un diseño único y también uno de los más caros de la colección.–Jen mi amor, si no te gusta siempre podemos ir a otro lugar. Quiero que estés feliz con el anillo que tú escojas.–Gracias Jacob, pero me ha encantado. Es el anillo perfecto para mí.–Ya está, nos lo llevamos
Jacob García MiamiDespués de que Jen entrara a la clínica, esperaba que Dulce saliera lo antes posible, debía entregarle el dinero para que organizara por todo lo alto la fiesta del compromiso entre Jen y yo. Vi que salió Dulce de la clínica caminando muy a su manera, se me quedó viendo muy divertida. Sí esto estaba resultando hacia otra dirección.–Hola dulce, buenas tardes, ¿Cómo estás? – Saludé.Nos saludamos con un beso en la mejilla, Dulce miraba muy atenta el auto, sé que llamaba mucho la atención, pero eran de los más comunes en Miami, esos y las motos de lujo.–Hola, Jacob, bien ¿y tú qué tal? – Dijo Dulce.–Muy bien también, me dijo Jen que vas a organizar una fiesta a nuestro nombre.Si fuera por mi nos íbamos solo los dos a celebrarlo después de que habláramos con sus padres, pero como ya lo habia dicho, cada quien tiene sus costumbres, seguiríamos lo que dictaban sus leyes, no me opondría a nada que me dijeran, ya estaba metido en esto y no me quería echar para atrás.–S
Jen SaldañaMiamiEl viernes llegó con una velocidad impresionante. No podía creer que estaba a punto de hacer esto. Yo estaba temerosa de ese día por todo lo que implicaba, la mayor actuación de mi vida en cuanto a la farsa de lo de Jacob hoy cobraría un nuevo significado ante mis familiares más importantes.Ese día estaríamos en la clínica sólo medio día y sólo Emiliano y yo, ya que Dulce como organizadora oficial de la fiesta andaba ocupada con los preparativos, me habia dicho desde el día que fuimos Jacob y yo a comprar el anillo de compromiso, pues el permiso lo tomaría desde el jueves en la tarde, para ir a comprar la decoración para la noche ideal de Jacob y mía.–Jen, ¿En serio estás segura de querer seguir con esto? – Me preguntaba Emiliano – Yo no te veo muy decidida.Él me conocía a la perfección, por lo tanto sabia en que situación me encontraba y hasta podía jurar que conocía mis pensamientos al pie de la letra. Hasta sabía que estaba esperando que desistiera de intento d
Jen SaldañaMiamiTal cual lo habia dicho, ellos se parecían mucho, a los otros dos hombres de nuestra familia, esperaba que sus hijos siguieran el mismo camino y nunca tuvieran ningún tipo de problema entre ellos, mis sobrinos también eran tremendos.–Somos sus hijos, ¿Qué esperabas? – Dijo Ethan sonriendo – Te dejo para que te cambies Jen, te esperamos abajo.–Gracias Ethan.Me cambié y me puse un maquillaje muy discreto casi al natural y después Luz Mary y mi mamá, subieron para peinarme, afortunadamente no me quedé sola con mi cuñada o me iba a atormentar con preguntas y ya estaba demasiado nerviosa.–Has quedado hermosa Jen, Jacob cuando te vea se morirá – Exclamó mi mamá – Me acuerdo cuando Pancho fue a pedir mi mano.–Sí mamá, ya me has contado esa historia que toda tu familia se moría de risa pues aquí en Estados Unidos eso no se usa.–Sí así fue, pero hoy es tu día hija. Pensé que te ibas a quedar aquí con nosotros para siempre.Claro ya salió el motivo de tanta felicidad, mi
Jacob GarcíaMiamiJen no salía de su asombro y la comprendía, pues en ningún momento le dije que llevaría a mis padres, y de seguro que no se lo creía. Me miraba con cara de enojo, pero tenía que disimular delante de todos. Sonrió y miró a Kristen y luego a mi supuesto padre. Que vendría siendo mi tío ya que era el esposo de Kristen. Si sucedía cualquier cosa más adelante, les diría que venían en representación de los verdaderos y que a ellos los consideraba también como mis padres.–Tomen asiento por favor – La mamá de Jen, le pide a mis padres.–Gracias Melanie – Dice Kristen.Se quedan en la mesa de ellos y nosotros caminamos hasta donde se encuentra Emiliano, espera a que lleguemos a la mesa, está que se muere de la curiosidad, no sé si el intuye que no son mis padres o no.A Kristen y a su marido, les tuve que prometer varias cosas para que accedieran, pues Kristen sabía que desde un principio me habia prestado para lo del novio falso y me dijo que ella tenía parte de culpa, per
Jen SaldañaMiamiDespués de las felicitaciones por parte de todos mis familiares y asistentes a nuestra fiesta del compromiso y por supuesto de Dulce y de Emiliano seguimos un buen rato en la celebración, dónde había de todo a Dulce no se le había escapado nada y mis sobrinos los hijos de Luz Mary y Ethan mi hermano andaban en un inflable que llevaron dándose vuelo jugando.Mi madre junto con Kristen y mi tía Consuelo, la mamá de Dulce, estaban preparando margaritas en la cocina y mi padre, el “papá de Jacob” y mi tío Porfirio se estaban dando vuelo poniéndose la borrachera del siglo. Emiliano, Dulce, Jacob y yo estábamos en la mesa platicando y tomando refresco pues ni a Dulce ni a mí, nos dejaban tomar mucho alcohol nuestros padres.–Muchas gracias por la noche de hoy Dulce, todo ha salido hermoso, no sabía que tenías esas dotes de decoradora profesional – Le dijo Jacob – Creo que deberías de considerar el trabajar como organizadora de eventos.–Muchas gracias Jacob, que bueno que