Mundo ficciónIniciar sesión
Capítulos relacionados
Capítulo 245
Cuando Dafne regresó al hotel, arregló un poco las cosas que había traído de vuelta. En la caja de cartón solo había algunas cosas importantes: sus documentos de identidad, su diario... y la foto de su mamá. Fabio había sido una persona egoísta y solía dar más importancia a los hombres que a las mujeres, pero su madre siempre había sido buena con ella… Acarició suavemente la foto de Elba y buscó un paño suave para quitarle el polvo.Mientras miraba la imagen, murmuró para sí misma:— Mamá, ¿si me culparías si no responsabilizo a Rocío?En realidad, No responsabilizarla era lo máximo que podía hacer, también era su mayor acto de tolerancia…En ese momento, sonó su teléfono y vio que era Celia quien llamaba. Celia preguntó:—¿Has obtenido tus cosas?—Sí, pero no esperaba que el actual dueño del apartamento fuera Hans. —¿Qué…? ¿Ya te encontraste con él? —exclamó Celia.—Sí.Celia se preocupó mucho:—No te hizo nada malo, ¿verdad? ¿Estás segura ahora?—Dylan me acompañó. Hans no quiso dej
Capítulo 246
Las personas que sufren de TEPT pueden perder el interés en las cosas que antes disfrutaban y evitar situaciones o personas relacionadas con el evento traumático. Aunque parezcan indiferentes y sin emociones por fuera, en realidad están en estado de alerta constante.La muerte de Elba fue tan trágica que Dafne no podía olvidarla. Por eso, cuando vio a Hans, su cuerpo reaccionó de manera incontrolable. Sudaba profusamente y casi se desmayó.Celia le preguntó:—¿Desde cuándo empezaste a experimentar estos síntomas?—Parece que es la primera vez. Antes no había vuelto a la capital porque evitaba deliberadamente esas cosas. Sin embargo, al regresar a esa ciudad y encontrarme con Hans, ya no puedo evitarlo más. Muchas cosas volvieron a mi mente y no puedo controlarlo.—Cuando tengas tiempo, te llevaré a un psicólogo muy profesional que conozco.Dafne se sorprendió un poco y preguntó:—¿Por qué conoces a un psicólogo?—Ah… Lo conocí por casualidad. Pasé por mucho estrés en el trabajo durante
Capítulo 247
Aunque solo estaban hablando por teléfono, la voz fría de Hans hizo que el corazón de Dafne se acelerara de repente. Se apretó las manos y dijo nerviosa:—Puedo devolverte el dinero a plazos, pero es una cantidad enorme y tal vez no pueda pagarla de en un corzo plazo de tiempo. Si…—¿Diez veces? ¿Estás segura?Dafne no reaccionó sobre lo que dijo y preguntó confundida:—¿Recuerdas cada vez que tuvimos la intimidad sexual?Dafne se quedó sin palabras. En el otro lado de la línea, la voz del hombre era fría, pero era también profunda y atractivo. Además, el contenido de sus palabras era ambiguo, por lo que el ambiente de repente se volvió sugestivo. Pero, eso no era el clave del problema, ¿no? Ella solo estaba hablando objetivamente con él acerca de la cantidad que realmente necesitaba pagar…—Puedo devolverte quinientos mil ahora mismo. Por favor, deja que Rodrigo me envíe el número de tu cuenta bancaria…Antes de que pudiera terminar sus palabras, el hombre la interrumpió otra vez:—T
Capítulo 248
De repente, el móvil de Dafne recibió un mensaje:Y: [67789**] (Número de cuenta bancaria)Dafne se asustó un poco y respondió de inmediato:Dafne: [Recibido. Iré al banco mañana para hacer la transferencia.]Después de enviar el mensaje, Dafne llamó a Carmen Hamilton de Flying Fish Entertainment. Anteriormente, había intentado contactarla varias veces para contratar sus servicios, pero Dafne no había tomado una decisión. Sin embargo, con todas esas deudas, Dafne ya no podía resolver el problema solo con su popularidad en línea.Un rato después, Carmen respondió la llamada con un tono un poco emocionado:—¿Luz Solar? ¿Has decidido a firmar el contrato conmigo?—Carmen, ¿todavía están vigentes las condiciones que mencionaste antes?—¡Por supuesto! ¿No conoces mi reputación en la industria? Si tienes dudas, puedes preguntar a cualquier amigo en este negocio para ver si he maltratado a mis artistas.—Carmen, no me refería a eso. Te llamé porque quiero firmar un contrato contigo.—No te en
Capítulo 249
Al día siguiente, Dafne fue al banco temprano y realizó la transferencia. Envió ciento veinte mil dólares a la cuenta de Hans, adjuntando el mensaje "Para pagar la deuda".Cuando Hans recibió el dinero, frunció ligeramente el ceño. En ese momento, acababa de terminar una reunión. Rodrigo se dio cuenta de que él miraba fijamente el móvil y le preguntó:—Jefe, ¿qué sucede?—Con el volumen de la cuenta de Luz Solar, ¿cuánto dinero puede ganar al año? —preguntó Hans.—Su cuenta tiene cinco millones de seguidores y que probablemente gane entre unos quinientos o seiscientos mil de dólares.Hans se quedó pensativo. Después de reflexionar un poco, Rodrigo continuó:—Bajo estas circunstancias, tal vez la señorita Dafne no pueda pagar la deuda en toda su vida... Jefe, ¿realmente quieres que ella te pague la deuda o...?«¿O simplemente quieres volver a estar junto a ella…?», pensó Rodrigo, sin atreverse a terminar sus palabras…Sabía muy bien que, con el carácter terco y orgulloso de Hans, siempr
Capítulo 250
—Jefe, puede sentarse aquí —dijo el empleado.—No, gracias.Hans se quedó parado en un rincón, observando a Dafne cantar en el estudio. Ella estaba tan concentrada en su actuación que no lo había visto llegar.El director del equipo de producción siguió la mirada de Hans. Se le acercó y intentó buscar un tema de conversación diciendo:—Esta chica, Dafne, canta muy bien y es muy guapa.Hans frunció el ceño y preguntó con voz fría y seria:—¿Estás interesado?Esa pregunta, con tono frío, llenó el aire cerca de opresión.—No... ¡No tengo ningún interés en ella! —respondió rápidamente el director.¡Había hablado sin pensar! El jefe realmente tenía una presencia opresiva y dominante... Decidió cerrar la boca y no volver a hablar más. Mientras tanto, después de que Dafne terminara la segunda grabación, el ingeniero de sonido sugirió:—Esta vez fue mejor que la anterior, pero aún podemos mejorarla. ¿Qué tal si la ajustamos de nuevo?—De acuerdo —respondió Dafne, sin atreverse a ser no profes
Capítulo 251
Al otro lado del teléfono, la voz de Dylan se puso seria:—¿Señor Rivera?—¿En qué puedo ayudarlo, señor Mendoza? —respondió Hans, con un tono frío en su voz.Aunque estaban hablando por teléfono, se podía percibir la tensión en el aire.—Pásame a Felicia, por favor.¿Felicia? Aquí no hay ninguna Felicia Mendoza, solo estaba Dafne Veras. El hombre respondió con frialdad:—Lamento decirte que ella no está disponible para hablar en este momento.Dicho esto, Hans colgó el teléfono directamente. Dylan volvió a llamar, pero Hans lo ignoró y eliminó el registro de llamadas.***Cuando Dafne terminó su trabajo, ya era mediodía, hora de almorzar. Se quitó la chaqueta de traje que llevaba sobre los hombros y se la entregó a Hans, diciendo:—Gracias.Terminado su trabajo, Dafne quería irse. Pero justo cuando se dio la vuelta, escuchó la voz profunda de Hans preguntar:—¿Estás segura de que quieres irte así?Dafne no entendió a qué se refería, por lo que preguntó:—¿Qué más quieres hacer?El homb
Capítulo 252
Los doscientos millones solo se quedarían en su cuenta por unas pocas horas... ¡Qué sensación más dolorosa!Subieron al ascensor exclusivo para los altos ejecutivos. Hans ocupaba la parte izquierda y Dafne estaba a la derecha. Parecía haber un océano de distancia entre ellos... Las puertas del ascensor se cerraron lentamente, reflejando sus sombras en la puerta.El ascensor llegó al sexto piso y se detuvo. El líder del departamento de marketing entró. Hans asintió ligeramente para saludarlo. El hombre se paró entre los dos, sintiéndose incómodo. Antes, el ascensor le parecía bastante espacioso, pero ¿por qué ahora parecía tan abarrotado? Sentía como si tuviera hormigas recorriéndole el cuerpo. Era una persona muy abierta, por lo que rara vez experimentaba esa sensación. Miró a Dafne, que estaba parada a su derecha, y trató de encontrar un tema de conversación para pasar rápidamente esos largos segundos:—Jefe, ¿quién es esta señorita?—Mi exnovia —dijo Hans serio sin apartar la mirada.