Capítulo 42

Mi sexy y pervertido jefe

Eliana

No cabe la menor duda de que este día he pasado la vergüenza más grande de toda mi vida. No hay algo que pueda decir que les haga pensar otra cosa.

Hablarle de esa manera tan inapropiada a Fabio frente a todos, sin duda fue un verdadero error, pero debo admitir que la cara de sorpresa de él fue muy divertida.

Aunque su sonrisa le duró poco, ya que al ver a sus socios mirarme de manera lasciva rápidamente su cara divertida cambió a una muy malhumorada.

—Señora Brown, Buenos días, que gusto saludarla, no sabía que se incorporaría en la empresa esta misma mañana —comenta Javier, tratando de sacarme de este problema frente a todos los presentes—. La oficina de Amaranta; su amiga, está al lado, me parece que se confundió de lugar, si gusta la llevo ahora mismo y así puede continuar con sus juegos. Vamos, la acompañaré.

Me dice tomándome por sorpresa y yo tan solo asentí, mientras que Javier colocó su mano en mi espalda tratando de sacarme casi