Cloe:—¿Cómo que los están atacando? ¿Quién?Abraham sonaba preocupado y al mismo tiempo alarmado. No sabía dónde estaba en este momento. Pero me sentía aliviada de que no estuviera presente en el territorio.—Es Owen. Él nos está atacando.— Conteste rápidamente, —Ha venido con varios lobos de su territorio. Te pido, por favor, que no vengas.Finalice la llamada telefónica y me concentre en crear una táctica de defensa. Estaba en la biblioteca en compañía de Matt y de Priscila. Por suerte las puertas estaban cerradas con llave. Pero sabía que no estarían así por mucho tiempo.—El infeliz de Owen de seguro vino para rescatar a Jak.— Dijo Priscila entre dientes, —Yo sabía que teníamos que haberlo matado de una buena vez por todas.—No era el momento de matarlo, Priscila. Él sabe demasiadas cosas que pueden ser necesarias.— Dije.—No podemos quedarnos aquí.— Hablo Matt, —Los lobos de la manada de Owen en algún momento van a entrar y nos pueden matar.Escuchamos golpes y patadas detrás de
Priscila:—Me preocupa demasiado que ahora Cloe este sola.— Dije con preocupación.—Pero ahora no podemos regresar, Priscila.— Dijo Matt.Sabía que él tenía toda la razón, llevábamos varios minutos caminando y no tenía ningún sentido regresar. Ahora solamente teníamos que terminar de llegar y buscar a Dan.—Espero y Cloe pueda salir sana y salva del territorio.— Dije.—Ella estará bien. Cloe es una chica loba súper valiente y estoy segura de que pronto se reunida con nosotros.Seguimos caminando y en cuestión de minutos llegamos al escondite donde estaba Dan. Entramos y él se sorprendió cuando vio que venía con Matt.—No me digas que has venido para meterme en un internado.— Dan miró fijamente a Matt.—No.— Contestó Matt y termino de entrar.Salude al señor Abraham que estaba sentado escribiendo algo sobre un papel. Me acerque y él se inmediato volteo la hoja para que no viera lo que estaba escribiendo.—No quiere que nadie vea lo que está escribiendo.— Dijo Dan, —¿Cuál es el motivo de
Cloe:Salir del territorio sin ser vista era un riesgo muy grande que tenía que enfrentar. Pero Matt y amiga Priscila estaban corriendo un grave peligro. Me había comunicado con ella y no había respondido mi llamada.Tome mi forma de loba y corrí en dirección al bosque, esperando que ningún lobo me estuviera persiguiendo. Me preocupaba la idea de no llegar a tiempo y encontrar a Matt y mis amigos muertos.—Cloe, ¿Quieres que vaya contigo?— Steve se apareció de la nada y parecía estar cansado. Parecía que hubiera estado corriendo.—¿Por qué estabas corriendo?— Le pregunte. —Ví que saliste del territorio y pense que necesitabas ayuda, ¿Necesitas ayuda con algo?Por un momento había pensado en decirle que viniera conmigo. Pero recorde que los lobos del territorio estaban en plena batalla, así que sabía que necesitaban refuerzos.—Regresa al territorio y quiero que ganes esa pelea, Steve.— Le ordene, —Yo tengo otros asuntos que arreglar.—Puedes confiar en que ganaremos esa lucha.— Steve
Matt:—Dan es el lobo traidor y punto. No me estés corrigiendo, ¿Te quedó claro?— Le dije en voz alta y con un nivel de frialdad que la llenaron de temerosidad.—¿Consideras que este es un lugar perfecto para nuestra escena?— Preguntó mi padre.—¿Qué es lo que van a hacer conmigo? ¿Dónde está Dan?Priscila estaba comenzando a darme dolores de cabeza. Por lo tanto, le dí una mirada a mi padre y el entendió la orden que le quería dar.—Ya no podrás hablar.— Sonreí con malicia.Priscila intentó hablar y mi padre le había puesto el pañuelo sobre la boca. Finalmente le ordene que la sentada sobre una roca para esperar que Cloe llegará.—¿Quieres saber por qué matamos a Billy?— Mi padre le preguntó en un tono de voz lento y misterioso, —Sabemos que te mueres de la curiosidad por saber la verdad. Pero con todo el gusto te podemos dar detalles.—¿Te gustaría saberlo?— Le acaricie la mejilla. Ella obviamente giro su cuello para evitar que mi mano tocara su mejilla. Sin embargo, la pude tocar y
—¿Cómo está el señor, Abraham?Fue lo primero que le pregunte a Steve tan pronto contestó mi llamada telefónica. Le había encargado a él que fuera a el escondite para atender al señor Abraham que había sido envenenado y estaba a punto de morir.—Cloe, lo siento.— Comienzo a decir él. M corazón se comenzó a romper como un frasco cayendo contra el suelo, —Pero cuando llegue... Ya él no tenía signos vitales y por mucho que me esforce para reanimarlo... ¡Maldición, Cloe! Lo siento.—Te espero en el territorio.— Le dije con la voz llena de tristeza, —Trae el cadáver del señor Abraham.Finalice la llamada y tan pronto como le hice, caí sobre mis rodillas y comence a llorar de manera desconsolada. Acababa de morir el señor que había considerado en mi corazón como mi segundo padre y había muerto asesinado por mi peor enemigo Owen.—Cloe, me acabo de enterar de lo que pasó.— Dijo Priscila que estaba tratando de parecer fuerte. Pero las lágrimas en sus mejillas demostraban lo contrario, —Es mi
Priscila:En verdad y con toda la sinceridad del mundo tengo que reconocer que la partida física del señor Abraham me afectó demasiado. Era horrible el tener que vivir con la idea de que ya no lo vería más en ningún área del territorio o en la biblioteca, haciendo lo que más le gustaba hacer: Leer. El señor Abraham era amante de los libros y en algunas ocasiones me llegó a contar anécdotas y enseñanzas que obtenía de cada una de sus lecturas.Estaba en mi habitación y sabía que está noche todo estaba a punto de terminar. Matt y Owen habían sido sentenciados a pena de muerte y serian ejecutados delante de toda la manada. Me hubiera gustado estar presente durante la muerte de Jak. Pero me entere que Cloe lo saco del camino antes de tiempo.—Priscila, ¿Podemos hablar?— La voz de Steve se escucho detrás de la puerta. Era una voz apagada y melancólica.—Adelante.— Aprobe, mirando mi habitación para asegurarme de mi tener ningún desorden.—¿Has estado llorando?— Me preguntó. No pude negar s
Cloe:—¡Ya es suficiente!— Exclame con todas mis fuerzas y los lobos comenzaron a salir de la jaula. Owen estaba tirado sobre el suelo todo golpeado y me estaba mirando con ira, —No me mires de esa manera. Tú sabes que eso es muy poco a lo que te mereces.—Ya vas a ver lo que te va a pasar cuando me logre escapar de este lugar.— Amenazó él. Tenía la cara llena de golpes y estaba sangrando por la boca de manera leve, —Vas a pagar por todo lo que has hecho.—¿Cómo crees que debería ser tu pena de muerte?— Le pregunte, cerrando la reja de la jaula, —¿Ahorcado? ¿Quemado? ¿Te cortamos la cabeza?—Haz lo que se te venga en gana.— Dijo y se quedó sentado.—Tengo hasta la noche para pensar en todo eso. Por ahora tendre que hacer unas cosas más importantes.— Le dije.Salí de lo que ese sótano y cerre la puerta. Owen y Matt estaban en plena oscuridad y solamente les quedaba esperar su condenación.—Cloe, ¿Podemos hablar?— Me preguntó Dan. Él estaba con una taza de cerámica en cada una de las man
Una fuerte explosión me había despertado.—¡Cloe!— Mi padre entro rápidamente a mi habitación. Tenía un fuerte olor a humo.—¿Qué fue esa explosión?— Me había sentado en la cama.—Fue una granada.— Contestó mi padre. Estaba comenzando a tomar su forma de lobo y eso tenía un significado.Durante mis casi diecinueve años de vida, he pertenecido a ésta manada de lobos. Mi padre desde hace cinco años era el Alfa de ésta manada y su liderazgo había sido tan efectivo que nunca nos teníamos que preocupar por el ataque de una manada rival y si llegaba a ocurrir un ataque por parte de una manada rival. Mi padre tenía excelentes estrategias y derrotaba a las manadas rivales.Casi nunca se le veía a mi padre estar en forma de lobo y si eso pasaba era porque tenía que ir a luchar para defender su manada.—¿Vas a ir a luchar?— Le pregunte. Mi padre ya se había convertido en lobo por completo.—Sí.— Dijo él, mostrando sus garras.—¿Puedo ir?— Le pregunte y estaba tomando mi forma de loba.—No. Te ti