—Pero Blake está muerto, ¿cómo se supone…? —No, ella dice que lo vio, es el lobo solitario que está azotando nuestra manada. Al parecer perdió la memoria, Ryan logró recordarla cuando Alba lo llamó, pero Blake es otra cosa. Tenemos que buscar la manera de atraerlo, de que venga con ella y la ayude.
Lejos del territorio Lightmoon, Demian llega a su propio territorio molesto pasando por entre sus subordinados, quienes lo miran sólo unos segundos. Este no mira a nadie, sólo quiere respuestas y encontrando a Astrid, su consejera, las conseguirá. —¡¿Dónde está Astrid?! —grita al abrir la puerta de
La estrategia del Alfa Demian es dividir y vencer, por lo cual distribuye su manada en tres grupos, de los cuales dos irán a causar estragos en distintos lugares a las afueras de la ciudad principal, todo esto con la finalidad de llamar la atención del Alfa Xavier y su hija mientras que él buscará l
“¡Es ella, Demian, la dueña del aroma y nuestra Luna!” —No puede ser… —dice él completamente confundido y siente como si estar en aquel lugar le trajera recuerdos de los que no es consciente. De pronto, Jasmine abre los ojos y se queda mirando al hombre frente a ella, sus ojos se llenan de lágrima
Cuando Blake consigue salir de la cabaña y llega al exterior, deja salir a Ryan y corre hacia el grupo de su gente, que está atacando una de las bodegas. Al acercarse se da cuenta que allí es donde mantienen raciones de comida y cosas importantes que podrían sostener a una manada por meses, por lo q
Astrid se queda encandilada bajo la mirada de Xavier, siente que sus piernas le van a fallar en cualquier momento, sobre todo cuando tras Xavier distingue aquel rostro que dejó de ver hace tantos años atrás. Un fuerte mareo la ataca y siente que en cualquier momento su cuerpo va a colapsar ante aque
En la mansión, Astrid permanece en silencio, aun alterada y mirando a todos lados, sin entender lo que está sucediendo. Hace más de veinte años, cuando fue secuestrada mientras iba de regreso a casa después de unas vacaciones, tuvo que enfrentarse a una cruel realidad en aquel momento. Le dijeron q
Patrick le ofrece algo de comer y beber, pero ella niega con suavidad y sólo le pide que le muestre en dónde dormirá. —Llévala al cuarto de invitados que queda disponible —dice Xavier sin ninguna emoción y sale de allí dejándolos solos. Astrid lo mira con pena, pero sabe que no puede forzar nada,