AlfredMuchas preguntas invaden mi mente mientras intento alejar a esos malditos chupa sangre del camino. Se me hace muy extraño verlos dentro de mi territorio sin que ninguno de mis hombres haya percibido su presencia, sé que algo extraño está sucediendo, pero por el momento solo me importa que mi luna este a salvo.Su mirada es esquiva como si sus ojos ocultaran algo, no quiero obligarla a mentirme así que solo me límite a preguntar si estaba bien. Ella asintió sin pronunciar ni una sola palabra, está asustada lo sé.Hice varias llamadas en el camino para que se encarguen de ese asunto, no tengo tiempo para lidiar con ellos estoy preocupada por mi Luna, su aspecto no es el mejor.Llegamos a mi mansión, ella ingresó rápidamente mientras yo doy un par de directivas. Observo el asiento y veo ¿sangre?...Sigo con la mirada a mi Luna, hice a un lado mi teléfono y corrí hacia ella.Ví como intentaba esconder su herida, al parecer no quería que me preocupara por ese asunto, ¡pero que tont
NarradorElizabeth estaba disfrutando de la ducha mientras muchas preguntas invaden su mente. Estaba feliz de estar al lado del hombre que amaba, pero qué tanto podía confiar en él se preguntaba.No podía ignorar la aparición de Amelia, cómo podía hacerle eso y luego llamarlo mi amor como si nada. Además, pensaba en su familia y ese hecho le preocupaba por demás, estarán a salvo se preguntó, luego el sonido de una llamada entrante la hizo volver en sí nuevamente."¿Han capturado al infeliz?- bien iré para allá, yo les enseñaré que nadie debe meterse con mi Luna" escuchó detrás de la puerta.Si Alfred descubría su plan todo resultaría un desastre, quizás se había preciado en involucrar a los vampiros, no confiaba en ellos, pero Alfred se había convertido en alguien impredecible o quizás eso le habían hecho creer.Tal vez solo debía hablarlo con el pensaba, pero no podía permitir que se entere de esa forma. Salió de la ducha con rapidez para impedir su paso.-¡ALFRED!, gritó, él se detu
AlfredA lo largo de mi vida jamás he conocido a alguien que pudiera quitarme hasta el aliento, apenas puedo respirar al verla salir con ese vestido.Tomó de su mano y no puedo evitar besar su cuello su delicioso aroma es embriagador estaba tan distraído que olvidé estar en una llamada con Francisco. Elizabeth tomó el celular corto la llamada, beso mi mejilla luego me dijo que ya estaba lista para partir. Salí detrás de ella como un perro faldero.Subimos a la limosina, luego de eso emprendimos camino. He notado algo extraño en ella, sé que hay algo que no está deciendome, no debería de preocuparse de nada ahora que está a mi lado y pronto se dará cuenta de ello.-Alfred... interrumpe mis pensamientos.-Me gustaría ver a mi familia insiste.-Pronto la veremos... le dije pero mi respuesta no parece convencerla pero no diré más.Permanecimos en silencio el resto del camino, estábamos a punto de llegar... cuánto agrego un comentario que me tomo por sorpresa.-No sé qué es lo que buscas
NarradorLa voz de Elizabeth quedó ahogada en un mar de sentimientos que la embriagaba y a la misma vez aprisionada su corazón con dolor al darse cuenta que había comentado un gran error.Una lágrima viajo por su rostro, mientras trataba con gran esfuerzo no arruinar aquel momento. Tomada del brazo de su amado se acercó a la entrada del gran salón.Se quedó parada en la puerta observando con una gran sonrisa la cantidad de gente que la esperaba para celebrar un día importante. Dos niños corrieron hacia su dirección envolviendola con sus pequeños brazos.-Alex amor, Matt... dijo muy emocionada.-Todo ésto es para tí, el mundo entero le pertenece a mi Luna. No creas que no sabía de tu cumpleaños.-Ya paso... -Si, pero por otros contratiempo no pudimos celebrar ese día, dijo recordando lo que había sucedido con el presidente.-Lo sé, luego de eso corrió para ir tras él encuentro con su prima.-¡¡Abril!!, dijo luego la abrazo con fuerza.-¡Qué difícil es ubicarte prima!, lo bueno a todo
Elizabeth se quedó en silencio observando con atención, pero su prima insistía con la pregunta.-¡Es una locura!, no es posible dijo y comenzó a reírse.Luego fue interrumpida por Alfred quién había extendido su mano, Elizabeth lo miro y rápidamente entendió.La música comenzó a sonar, Alfred la tomó de su cintura y comenzaron a bailar en el medio de la pista.-Este es el primero de muchos preciosa, dijo él besando su mejillas.-Alfred, tenemos que hablar.-Bien, acompáñame.-Abril sospecha sobre ustedes, recién me preguntó si creía en las leyendas urbanas sobre hombres lobos, comentó Elizabeth y luego su mirada se enfoco en su prima quien miraba con atención.-Lo sé, a tu madre le han borrado los recuerdos de esa noche, pero con tu prima fue distinto. Resulta que tiene una conexión con uno de nosotros.¿Sabes algo sobre eso?-No quiero que mi prima sufra, para mí no ha sido nada sencillo acostumbrarme y aceptar ésto, no quiero que pase por lo mismo, respondió Elizabeth.- Eso signifi
AlfredMí teléfono no ha parado de sonar desde que estoy aquí, tengo asuntos muy importantes que atender. -¿Qué sucede?, me pregunta mi beta al ver la expresión en mi rostro.-Debo resolver un asunto con urgencia Zack, regresaré pronto.-Quiere que le avisé a la señorita Elizabeth.-No es necesario, no tardaré.Tomé uno de los coches y luego marché hacia la ubicación de Amelia, por qué algo extraño había sucedido. Aunque la situación se había controlado.Se supone que era un lugar muy seguro, no es posible que los malditos chupa sangre estén merodeando por la zona. Se supone que hemos firmado un nuevo tratado, no quiero verme obligado a a andar con cada uno de ellos.La llamada de Amelia me dejó algo preocupado, quiero saber qué es lo que está sucediendo. Aceleré a todo prisa, no puedo dejar en mano de nadie más estos asunto, no cuando se trata de mi Luna.Baje del coche, ella me esperaba en la puerta junto a uno de mis hombres quien se encargaba de la seguridad del lugar. -Disculp
Regrese a la fiesta aunque no tenía deseos de hacerlo, ya no estoy de humor para soportar tonterías. Incluso esta fiesta me pareció una pérdida de tiempo, hubiese preferido algo más íntimo. Entiendo cuál fue la intención de su prima al recomendarme algo como esto, acepté porque sé que debo adaptarme a las tradiciones de los humanos. Me he dado cuenta que esto no funciona, Elizabeth debe tomar su lugar conmigo y aceptar su rol como la reina de la manada. Debe entender que cada decisión tiene su consecuencia. No quiero pensar en el acuerdo que pudo haber hecho, sea lo que sea fallo en su misión, de lo contrario no hubiese sobrevivido a mis hombres. Los vampiro se marcharon sin hacer notar su presencia.Este hecho me hizo dar cuenta lo equivocado que estaba en intentar protegerla, mi Luna es humana. Pero ser la luna no es simplemente un título, ella debe estar a la altura de poder poner en orden a Castleville. Llegué a la fiesta, la veo bailar en medio de la pista muy alegre, y aunqu
Mi lobo comenzó a inquietarse al recibir un mensaje de Francisco atraves de la conexión que tenemos, mis colmillos empezaron a salirse al igual que mis garras. No puedo creer que se atrevan a ingresar a mi territorio, creyeron que jamás me daría cuenta de sus intenciones, siempre estoy un paso más adelantado que ellos.El reino del Alfa Tarik quedó bajo mi mando, no me interesa quienes sean ellos, no tienen derecho de reclamar nada después de la traición de ese bastardo. Tengo muchísimo asuntos en que ocuparme, creo que esa será la primera tarea que encomendare a mi Luna. Mañana tendremos una charla, luego la presentaré oficialmente como la luna de la manada. Quiero que ella esté a mi lado a cada momento, no permitiré que nadie más se interponga entre nosotros. Trato de calmarme por qué sé que Francisco podrá encargarse del asunto mientras tanto, no es para menos mis hombres son los mejores. Pero... ¡ésto no puede ser cierto!, ¿qué es esto?... al parecer los infelices no están sol