¿Les gusto el capítulo? Recuerden que los tendrán cada miércoles alrededor de las 6:00 a 10:00pm horario (gmt-5) Además quería aprovechar para informarles que apenas termine este segundo libro de la saga Pumas defectuosos estaré publicando el tercero de forma inmediata aquí mismo, los protagonistas serán Marcus y su compañera. Tambien publique un nuevo libro hace poco que se llama Zinerva: Legado de Amor, aunque pertenece a otra saga totalmente diferente al de este libro se trata de Licántropos y mates (Compañeros de vida) le agradecería que le dieran una oportunidad.
— No deberían tener relaciones aun — se me adelanta la doctora y para colmo achina sus ojos de forma juzgona. — ¿Cómo sabe que él iba a preguntar eso? — no sé si mi morena esta avergonzada, confundida o intrigada, las notas de olor que emana son confusas. — Cuando era estudiante fue la pregunta más común, en nuestra raza es normal necesitar demasiado a nuestros compañeros en todos los aspectos. — ¿Entonces no? — iba a decirlo para mí, pero lo digo a través del enlace mental, las dos me escucharon. — Siendo honesta nadie cumple el reposo al pie de la letra y no quiero que me vean como su enemiga, si llegaran a hacerlo deben llamarme cuando terminen para estar segura de que todo está bien internamente ya que a veces por la adrenalina y la pasión del momento las hembras no sienten el dolor de inmediato— yo asiento más confundido que antes. ¿Qué le cuesta responder con un sí o no? — en teoría no deberían, pero en la práctica hay muchos que lo hacen incluso un par de días después del
— ¿Por qué no le puedo colocar su trajecito? — lo miro directo a los ojos y este desvía la mirada. — Es una tradición. — ¡Se ve como un cavernícola, no como el futuro Alfa de una enorme manada! — ¿Cuál enorme manada? — La que tendremos ya para él cuando le toque suplirnos y no te atrevas a cambiar el tema, Kurt. —Él no debe tener tantas telas que lo cubran, cuando cumpla su primer año ira a cazar, proveer comida para la manada y luego con la piel del animal que cace se le hara una ropa, hasta entonces debería estar desnudo porque un macho que no provea a su manada en reuniones importantes no tiene derecho a una vestimenta. — Es un bebe, eso es absurdo. —Para los humanos puede parecer así, incluso la tradición se ha modificado mucho, como notaste nunca que me impuse a que lo vistieras hasta ahora, solo llevara un pañal de tela por una hora mientras lo presentamos ante la manada. —Pero somos los líderes, podemos modificarla un poco más y... —Yo respeto tus costumbres, no te atre
| Neylan |Gruño, intento golpear otra vez, pero termino partiendo el huevo, hecho el contenido en el tazón separando la cascara del resto. —Ya podemos tomar un descanso. —¡Tú no haces nada y estas cansado! —Es que ya te pregunté y parece que nunca te cansas. —Ahí tienes tu respuesta, no necesito un descanso. Agarro otro huevo y vuelvo a golpear el saco, este suelta un estruendo, abro mi mano lentamente y miro incrédula. —¡Lo hice, lo hice, lo hice! — él se levanta del suelo donde estaba acostado para abrazarme. —Sabía que lo lograrías. —Solo me costó 183 intentos— murmuro y veo como sonríe. —Te sobre exiges demasiado. —Soy la Líder de esta manada, debo dar el ejemplo aun cuando nadie me ve, debo ser la mejor. —Solo por ser tú eres lo mejor que hay. —Eres mi compañero, Kurt, siempre pensaras eso. Lo beso y él me corresponde, sus manos aprietan mis muslos antes de alzarme para que enrolle mis piernas en su abdomen, ambos gruñimos mientras intentamos tomar el control del b
— ¡Kurt, ven rápido! — junto todas mis fuerzas para enviar ese mensaje mental. Miro incrédula como mi bebe despega su cadera de su camita y ahora intenta impulsarse con sus manos. Volteo mi rostro al sentir una pequeña brisa a mi lado y casi grito del susto al tener a Kurt a mi lado, yo lo llame, pero no esperaba que apareciera mágicamente a mi lado cuando estaba en el patio. — ¿Lo que hace es normal? — pregunto a través de nuestro enlace mental. —Si, las crías Cambia Formas comienzan a caminar entre los primeros cuatro meses de vida. —Pero ni siquiera tiene un mes. —Falta pocos días para que los cumpla, es bueno que ya intente gatear, no te preocupes, gatita. Él me abraza y yo aprovecho para agarrar su celular el cual está en el bolsillo de su pantalón, últimamente lo lleva para todos lados, sobre todo si no está en la casa, ahora más que nunca le envío mensajes, sus favoritos son las fotos que le envío de nuestro bebe a cada rato. Comienzo a grabar, nuestro bebe hace vari
Peter me abre la puerta de una cabaña en la que nunca había estado, pero solo entro yo, él cierra la puerta detrás de mí, se quedó con la pequeña mochila con las cosas que traía para él bebe, en frente de nosotros hay una sala, con un estilo muy diferente, no es rustico, para el interior de un edificio algo lijoso, una de las puertas laterales se abre y es Marcus quien sale, se mira serio y aun cuando termina su reverencia hacia ambos no le hace caras a mi bebe como siempre lo hace. —Líder, el Alfa la espera para comenzar una reunión. —A mí no se me notifico nada. —Fue de imprevisto, nadie en esta sala fue notificado previamente, por favor, acompáñeme. Lo sigo sin protestar, entramos por la misma puerta por la que él salió, me sorprende encontrar a los representantes de cada rango y a Kurt sentados en una mesa ovalada, hay un espacio vacío al lado de Kurt así que me acerco ahí, mi bebe suelta un balbuceo al ver a su padre, para mi sorpresa le gruñe a ellos apenas pasamos a su lado,
Ladeo mi cabeza, le falta algo, cambio sus medias blancas por unas con estampados de un gatito negro, él me sonríe, creo que también le gusto. — Tu piel esta más blanca, seguro es ese jabón, aunque tus ojos también. ¿Acaso alguien me cambio a mi hijo? — él se carcajea y yo me rio — no te preocupes, tienes familia blanca y aburrida por ambos lados, lástima que ya no tendrás este sazón que heredo tu mami de tu abuela, pero me conformo con tus diminutos rulitos — beso su nariz y él atrapa mi rostro. Intento alejarme, pero sus pequeñas manos se aferran a mis mejillas, por un segundo quise entrar en pánico, pero me relajo, debo recordar que este hermoso gordito no es humano y ya tiene más fuerza que yo. —No puedes agarrar a mami de esta forma— sostengo sus pequeñas manitos— mami no es como tú y papi, soy más frágil... — ni siquiera termino de hablar cuando él me suelta, incluso me mira serio — mami no te está regañando, solo tenlo en cuenta — parezco demente hablándole a mi recién nacido
La puerta se abre y Kurt entra, ni siquiera las mira, sin aviso me abraza y me alza haciendo que quede más alta que él, sonrío, no pensé que vendría tan pronto, pero esto me es de ayuda para finalizar mi decision, hasta ahora las últimas cuatro no han mostrado nada malo. Él besa mi cuello, cerca de mí marca y tengo que hacer un gran esfuerzo para no jadear o incluso gemir frente a las mujeres, por alguna razon miro hacia la izquierda sin voltear la cabeza y juro que empiezo a ver rojo, una de las mujeres está mirando a Kurt y no de forma curiosa, ni siquiera intenta disimular, lo mira con deseo. « ¡¿Cómo se atreve a mirar a un hombre casado y con hijo así?! »Trato de calmar mi ira para lograr mirar a las otras tres, pero ellas si siguen en lo suyo, no se lo están comiendo con la mirada. Creo que Kurt siente mi cambio de ánimo porque deja de besarme y acerca mi rostro al suyo, puedo ver en sus ojos el reflejo dorado de los míos. — ¡Lárgate sin vergüenza! — gruño hacia la mujer y est
Camino lento, Kurt es quien carga a mi gordito, él va al frente, yo solo me dedico a ver el paisaje hasta que mis ojos enfocan su espalda, se quitó la camisa apenas entramos al bosque, también dejo a mi bebe medio desnudo, solo con el pañal, algo que no me gustó mucho, pero no me queje ya que vi la ilusión que le hace este pequeño viaje. Salto una raíz gruesa de un arbol, Kurt de inmediato me mira de reojo, él me quería cargar todo el camino, pero yo me negué, por eso esta algo molesto, aunque intenta disimilarlo, la verdad es que disfruto el viaje, si me carga llegaríamos más rápido al destino que no conozco, pero me perdería de todo esto, supongo que me gusta el esfuerzo físico, creo que se precia más el destino. —Kurt, creo que debemos colocarle repelente de insectos a Alanhard— se me olvido por completo hacerlo antes de salir, espero que él lo haya traído.Él se detiene y revisa en el bolso que sostenía con una sola mano. Eso es a lo que me refiero, tiene al bebe y un bolso para