LEANA Lo observó mal cuando suelta esas palabras que no hacen más que complicarme las cosas. Es demasiado intransigente y lo único que deseo es poder ver al amor de mi vida. No entiendo, porque no puede entenderme, esto no ha sido nada fácil para nadie y lo único que busco es un poco de comprensión. —¿Con quien estas Leana? Pregunta Aleksa a través de la línea. Le doy la espalda al oficial, realmente me molesta verlo en este momento. —Con el detective –le respondo a mi amiga sin dejar de ver a Maximiliano —voy a colgar, te hablo después. Es lo último que le digo para cortar la llamada. Y mirarlo esta vez. —Se que debes estar odiándome pero lo siento mucho Leana, de aquí no puedes salir porque hasta mi puesto está comprometido. —No entiendes lo que está pasando, el aparte de mi hijo se muere y yo estoy aquí sin hacer nada. —Creerás que soy un insensible, pero no es así, te comprendo Leana, pero pones en peligro la operación, tu libertad y la vida de todos si Milkan llega
LEANADoy Vueltas en la cama desesperada, realmente no sé qué sucede conmigo, pero no puedo dormir y mis pensamientos sólo van a una sola parte. De derecha, izquierda, boca arriba o como sea, simplemente no puedo dormir. Es posible por estar en un lugar nuevo, eso me paso cuando me fui a vivir unos días con mamá para no dejarla sola. Ahora que lo pienso debí besar, abrazar y hacer más el amor con Nikolay. Lo extraño tanto. Estaño su compañía, sus besos, el calor de su cuerpo, ese dulce y perverso sabor de los orgasmos robados. Esa manera tan particular que tenía de hacerme mojar las bragas, sus orales, las mordidas en mi cuello, sus gruñidos y mis gemidos. Los exquisitos besitos en el cuello y un dedo en mi entrepierna que lograban humedecer un poco mis ganas. Estraño todos esos locos momentos de pasión, ese arranque de locura que teníamos el uno por el otro en cualquier instante. Sus caricias que me volvían loca, sus besos en mi boca y los susurros calientes que le prendían fueg
LEANA —Según lo que le entendí al doctor va En orden de mayor a menor gravedad, en primer lugar, está el estado de coma, seguido del estado vegetativo y del de mínima consciencia. Pero dentro de estos tres estados hay distintos grados y Nikolay está solo en estado de coma. Como si eso fuera en cierto sentido algo bueno, pero puede ser peor a decir verdad. —Nikolay está en el primer grado entonces. Habló con Evalina, la pobre chica está agotada y su novio va a reemplazarla ya que son muy amigos de Nikolay y no quieren dejarlo solo. —Si eso me explico el doctor, lo bueno es que está respirando con normalidad, no necesita de respiración artificial. Siento que mis rezos por su salud no están siendo escuchados. —Leana porque no estás aquí, en verdad que ahora Nikolay te necesita y de pronto tú, puedes ayudarlo a volver a este plano. —Que más quisiera yo Evalina que estar allí, pero en este momento no puedo. —No sabes lo que pasó, Milkan estuvo aquí y quiso verlo, pero sincer
LEANALa espera desespera, la casa está llena de oficiales expertos en su campo mientras nosotros estamos a la espera de la llamada. Se supone que está desesperado, el oficial encubierto que lo sigue informo que el mafioso lo tiene por la gran cantidad de dinero que le debe y es increíble que en una semana, de haya gastado todo el dinero que yo le di.. Es un descarado, desagradecido y esa enfermedad me recuerda a Camilo, el cómo destruyó todo por no saber controlar su adicción al juego. Me rasco la cabeza, dejo mi mano en la cintura mientras veo trabajar a los oficiales. —Y si lo mataron ya—llevamos desde ayer esperando una llamada —es posible, si no ha pagado a ese sujeto tan peligroso, pudieron matarlo. Mis palabras los deja preocupados porque es una posibilidad y si es así, mis esperanzas mueren porque no hay otro plan de atrapar al mafioso. —Esas serían muy malas noticias–dice el detective —esperemos que no, porque estaremos en serios, no, muy graves problemas. Sentarme no e
LEANA Dicen por ahí que cuando la vida se ensaña contigo y te da palea con fuerza no debes darte por vencido, debes ser más fuerte que la vida misma y seguir adelante, si te tira una vez, levántate dos veces más, gánale tiempo al tiempo, así te harás más fuerte y no habrá nada que te pueda derrotar ya todos tenemos la gran suerte de poder disfrutar de esta vida; sin embargo, no siempre gozamos de los buenos momentos. Si vivimos anclados en el pasado o enganchados a las expectativas, perdemos de vista el presente, que es el único momento que podemos vivir. Sin temor a nada debemos seguir avanzando y a las dificultades, simplemente hay que hacerle frente. Llegó al lugar indicado, el maletín lo llevó conmigo e ingresó teniendo los nervios a flor de piel. Es una bodega como cualquier otra y más al fondo se encuentra Milkan y varios hombres más que me ponen la piel de gallina. Sobre todo, porque están armados y tienen cara de malos. Dios mío ayúdame.. No se si saldré viva de esto, Creo
LEANA No sé si la vida es justa, pero la mala suerte de seguro me persigue y el destino a veces, solo a veces resulta ser muy bueno, dándonos pequeñas pinceladas de felicidad, pero cuando eso no es así, no se le llama destino, se le llama injusticia, traición o simplemente karma aunque en este punto de mi vida, no sé qué es lo que estoy pagando con toda sinceridad. Llega ese punto en la vida en la que el tiempo es lo más valioso que tienes. Sientes ese momento de extrema angustia dónde quieres abrazar a tus seres queridos para decirle un te amo a tu mamá y darle un abrazo a tu papá, como también besar mucho al amor de tu vida. Cuando sientes la muerte respirándote en la nuca no piensas en ti, piensas en los demás y en los momentos que no compartiste con ellos. La policía se toma el lugar sin darme tiempo a salir y me asusto cuando los vidrios superiores son reventados por los oficiales que con cuerdas ingresan a la bodega obligándome a buscar refugio en uno de los container q
LEANA Creo que morí y no quiero abrir mis ojos. Me siento o más bien me obligó enviar mi mente a otro plano porque esta realidad me resulta muy cruel en este momento. Tengo un costado de mi cuerpo mojado y todo el cuerpo me duele debido al fuerte impacto que tuvimos al caer y no se si una de los proyectiles que el detective soltó, uno me impacto a mi también. —Leána abre los ojos —es Maximiliano, sé que es el, pero tengo tanto miedo que me es imposible abrir mis ojos—Leana, tranquila, abre los ojos. Lentamente mis párpados ceden y las lágrimas se me desbordan las cuales se pierden por detrás de mis orejas. —Ya terminó, lo hiciste muy bien mujer –me sonríe —Ven, vámonos de aquí. Tengo ganas de vomitar cuando veo el cuerpo del mafioso en el piso con los ojos cerrados y su ropa llena de sangre debido a los proyectiles que impactaron su cuerpo, hay más hombres también a baleados y muertos. Me levanto, camino angustiada y más adelante veo a Milkan quejándose mientras lo meten a
LEANALa directora del Hospital intenta explicar mientras Kasidy no deja de sollozar. Al llegar aquí puso el grito en el cielo al verme, pero de aquí no me voy hasta saber algo más Kassandra. No me puse a su nivel, ya que comprendo que cuando surgen situaciones imprevistas, nuestras reacciones pueden ser muy diversas y la angustia nos lleva a desquitar nos con la persona menos indicada. No obstante, es normal si reacción así que ni voy a permitir que eso me amínale. —Ella ha estado muy calmada, lo sentimos tanto, de verdad es la primera vez que esto nos sucede. —No me sirven sus disculpas, quiero que encuentren a mi hija de inmediato. —Ya se le dio parte a la policía, en este momento están buscándola. Andreus desesperado camina de un lado para otro y quisiera tener las palabras mágicas para hacerlo sentir bien, pero es su hija la que está desaparecida, no hay palabra que valga en este momento. —¿Pero si estaba tan calmada? ¿que fue lo que pasó?—No lo sabemos señor, Kassandra h