La cena ya me estaba siendo algo incómoda, por pensar que después tendría que acompañar a Mark en su coche hasta su casa,y tener que dormir en un dormitorio que no era mío en una casa que aunque cuando nos casaramos seria tambien mia, por ahora solamente era de Mark Harris y sobre todo, tener que ponerme la misma ropa al dia siguiente, ya que con los nervios no me acordé de coger mi ropa de la casa de mis padres, pero Harris se quedó mirándome con una media sonrisa en sus rojos y carnosos labios, como si estuviera adivinando lo que yo estaba pensando en ese mismo momento.— Sofía mañana, tendremos que tutearnos delante de mi hija, te tendré que abrazar y besar, espero que no vaya a ser ningún inconveniente para ti ya que como sabes en dos dias seras mi esposa y eso es lo natural en un matrimonio — me dijo— Esta bien Mark, veo que no quieres sorpresas pero si incomodarme a mi — respondíMark soltó una fuerte carcajada mientras ponía un poco más de vino en nuestras copas— No quiero in
Ver así de vestido a Mark Harris, me dio la impresión de que ya estaba atada a un hombre que no conocía absolutamente nada pero tenía muy claro lo que quería, aunque que simplemente estábamos ya unidos por un contrato matrimonial, pero intente no pensar en eso, lo único que ahora estaba deseando era estar con mi hija, jugar con ella, que me conociera y conocerla yo, ya que cuando nació no me dejaron ni verla, llevandosela enseguida la matrona que me asistió en el parto, por orden de mis padres. Cuando entramos en el salon donde estaba mi hija, pude darme cuenta de cómo Mark tenía una media sonrisa en sus bonitos labios mirando a su hija, fijandome seguidamente en los peluches que había encima de la alfombra donde estaba mi pequeña, sin poder quitar mi mirada, notando como unas pequeñas lagrimas caían por mis mejillas— Cintia cariño, ¿te acuerdas de Sofía? — le pregunto Mark a su hijaPero la pequeña estaba entretenida con sus peluches— ¿No vas a decirle nada? ella está aquí para jug
Por la tarde y después de comer, estábamos Mark Harris, mi hija y yo sentados los tres en el sofá viendo la tele, cuando de pronto escuchamos como alguien tocaba el timbre de la casa, viendo entrar poco después en la sala donde estábamos los tres, al abogado de Harris con ciertos papeles en sus manos.— Buenas tardes — dijo el abogado cuando entro, acercándose a Harris, cuando este se levantó del sofá para recibirlo— ¿Traes los documentos? — preguntó Harris a su abogado— Si señor, mañana por la mañana tienen usted y la señorita Lopez los exámenes de salud que usted solicitó en la clínica de su confianza, a parte de la prueba de ADN que tiene señorita Lopez, la vera un ginecólogo para asegurarse el señor Harris, de que podrá concebir un hijo cuando lo decida su futuro esposo — me dijo el abogado— No lo entiendo, señor Harris ¿cómo vamos a ir a la clínica y casarnos a la vez? — pregunte escuchando cómo se reía mi futuro esposo a carcajadas— Sofía, nuestra boda se celebrará por la ta
Después de los exámenes que nos hicieron a cada uno los médicos de aquella clínica, nos marchamos de aquel lugar, subimos al coche regresando a la casa de Harris. Entramos dirigiéndonos los dos al salon, me sente en el sofá mientras Harris se ponía en un vaso un poco de Whisky que tenía en el mueble bar del salón, sentándose él luego a mi lado.— Si nos casamos esta tarde, supongo que querrá que la pequeña Cintia asista a nuestra boda — le dije— Por supuesto que si, ya ha dejado en la guardería mi nana la ropa de mi hija, para que la preparen — respondió— ¿Tiene nana señor Harris? — pregunte sonriendo—¿Usted no ha tenido nunca, Sofía? — me contestó— Si, pero usted no me deja verla ni invitarla a la boda, supongo que nuestra boda será, en fin, muy seria y sin pétalos de rosas cuando nos feliciten ¿verdad? — pregunté, viendo como Harris se movía en el asiento un poco molesto por mis palabras.— Sofia, creo que cuando firmó el contrato entendió todas las disposiciones que va a tener
Cuando llegué hasta donde estaba mi futuro esposo, seguía mirándome con deseo pero el semblante de su cara era muy serio. —- ¿Estás lista para marcharnos? — me pregunto — ¿Vamos a ir a por Cintia a la guardería? — le pregunté — No, mi hermano se encargará de llevarla al juzgado — me dijo sin mirarme Nos marchamos de la casa viendo que el chofer ya tenía la puerta del coche abierta esperando a que entraramos dentro,, entre yo la primera sentándome lo más alejada que pude de donde se iba a sentar Mark. Cuando llegamos a la puerta del juzgado, el chofer nos abrió la puerta saliendo Harris y ofreciéndome su mano para que yo saliera, viendo a mi pequeña como corría hacia nosotros con un precioso ramo de novia en sus pequeñas manitas. Cuando Celia llegó hasta donde estábamos su padre y yo, se abrazó a la pierna de Harris mirándome mientras sonreía. —- Tofia, tas muy guapa — me dijo mi pequeña, dándome el precioso ramo que llevaba en sus manitas Me agache un poco cogiéndola en brazos
Me recosté en la cama boca abajo apartando Mark con sus manos mi pelo sintiendo sus labios en mi nuca, cerré los ojos entregándome a aquellos delicados besos en mi piel haciendo que me estremeciera. Mark rozaba mi piel con sus labios por cada botón que me desabrochaba, cuando ya me quito todos los botones, deslizó su mano por dentro de mi vestido empujando despacio la tela para descubrirme los dos hombros.— Gracias por ayudarme — le dije intentando levantarme de la camaPero no me dejo levantarme, se puso Mark de pie, me quito el vestido dejándome solo con la fina lencería que yo llevaba, se empezó a bajar la cremallera de su pantalón sin dejar de mirarnos los dos a los ojos, dándome cuenta en unos segundo de su desnudo cuerpo escultural fijandome en que su gran miembro que lo tenía duro y preparado para atacar. Me cogió las piernas poniéndolas encima de sus hombros cuando se arrodillo entre mis piernas, me arrancó las braguitas que llevaba, besando desde mi vientre hasta mi pubis, h
Al día siguiente, cuando me desperté, escuché las risas y los gritos que daba la pequeña Cintia, dandome cuenta de que el hermano de mi esposo ya la había traído a casa a primera hora de la mañana. Enseguida me levante de la cama y entre en el baño para ducharme, cuando termine volvi al dormitorio, me vesti con un vestido de color ocre por encima de las rodillas, escote terminado en V, zapatos de poco tacon, dejando mi pelo suelto, una vez que ya estaba vestida, me marche del dormitorio, baje las escaleras acercandome seguidamente hacia la cocina, ya que las risas de mi pequeña se escuchaban alli.— Hola buenos días — dije cuando entre, acercandome a donde estaba sentada mi hija, dandole un beso en su preciosa mejilla— Tofia, nos vamos a quedar a mimir esta noche en casa de la tía Alice — me dijo la pequeña, haciendo que yo mirara a mi reciente esposo un poco extrañada, ya que el no me había hablado de que tuviera ninguna hermana— ¡¡ Que bien, no ¡¡ supongo!, — le dije a mi hija, mi
Después de tener los equipajes preparados en la entrada de la casa, el chofer lo introdujo en el maletero del coche, abriendo la puerta del mismo para que Mark, mi pequeña y yo entraramos dentro marchandonos de la casa. El camino hacia donde vivía Alice eran largo, pero cuando llegamos y el chofer abrió la puerta del vehículo, Mark salió del vehículo primero y dando un pequeño salto mi hija salió también del vehículo entrando corriendo a la casa viendo que Alice ya la estaba esperando con los brazos abiertos, dándole Cintia un cálido abrazo a su tia, dandole ella dos sonoros besos en la preciosa carita de mi pequeña— Mira tía Alice ha venido Tofia con nosotros, es la novia de mi papa y es muy guapa, a me gusta mucho ¿sabes por qué tía Alice? porque va a ser mi mama — le dijo la pequeña Cintia volviendo su cabeza para mirarme, haciendo que me emocionara como siempre me pasaba con ella.Mark me esperaba en el coche, después me puso la mano en el hueco de mi espalda guiándome hasta el p