CAPITULO 11Diana se acerca a él, por un momento Antonio cede a la seducción de aquella loba sensual.— No... Diana — intenta alejarla, no desea acabar con la amistad y el cariño que por año los ha unido como hermanos.Ella se cuelga de su cuello y lo besa, con sus ojos llenos de deseo, quiere cambiar la opinión que tiene Antonio de su lazo.Se arrodilla delante de él, y mete la masculinidad de Antonio en su boca, esto hace que el Lobo suelte un gruñido y coloque su espalda en la pared mientras las gotas de agua aún caen en el cuerpo de los dos.Diana había averiguado con las lobas sobre esta manera de seducir a un lobo y mantenerlo en su control.Usaba su boca y con una sonrisa observaba como Antonio lo disfrutaba, gruñó en ese momento.Agarro el cabello de Diana y con los ojos cerrados pensaba solo en una imagen, que era Luciana quien estaba ahí.Imaginar que era la aterciopelada boca de Luciana la que lo domaba, ella era la única dueña de sus deseos y pensamientos.Diana subió con
CAPITULO 12Mateo se ha recuperado, y a pesar que su movilidad es escasa, este decide que debe regresar, piensa en su manada, piensa en Luciana, necesita protegerlos como el Alfa que es.El pescador no quiere dejarle ir, no hasta que su hija cumpla con la parte del trato que se ha pactado entre los dos.— Mañana partire, tengo que intentar regresar con mi gente — Mateo siente que sus piernas tiemblan pero aún pueden soportar el largo viaje.Omaira decide llevarlo al río para que se lave un poco en el agua fría de aquel lugar, Mateo toma los rayos del sol.La loba presionada por su padre, ingresa al agua y se acerca a él, para masajear su espalda con un poco de jabón.Mateo gira y la ve a los ojos, Omaira lo besa y se desnuda insinuando que lo desea.Mateo abre los ojos, manda saliva que pasa por su garganta, ver a aquella loba en ese sensual cuerpo que se intenta insinuar a el, es lo único que quiere.Ella suspira mientras Mateo la toma con fuerza de la cintura y la empotra en contra
CAPITULO 13Luciana despierta en la mañana, baja al comedor enojada, frustrada por lo que no pasó, y quería que pasara.Intento tocarse, llegar sola, pero odia a admitir que la rabia por el rechazó de Antonio la hizo sentir furiosa y sin ánimos de nada.—¿Quieres un poco de fruta?— pregunta Antonio que tiene una sonrisa en su rostro, no puede negar que lo sucedido le dió un poco de poder, el mismo que perdió cuando se enamoro de ella.— No gracias — responde Luciana en un tono de voz seco y con el mentón tensionado, quiere gritarle que es un idiota, que no debió dejarla en la cama después de interrumpir su momento sola, pero prefiere seguir en silencio.Diana se da cuenta de la situación, le molesta que Antonio este feliz con ella— Está noche tengo una sorpresa para mi Dueño — lanza un comentario incómodo e inapropiado en la mesa, que es reprendido de inmediato por Zaira.— No está Pilar, además Diana es muy buena con las sorpresas, para mí no es incómodo que lo diga — Antonio lo hac
CAPITULO 14Luciana se encontraba de nuevo en el centro de la manada Luna Esmeralda, los recuerdos de ese lugar eran un reto para ella, pues su historia de amor con Mateo sucedió allí.Decidir si lo había olvidado, pasaría en este lugar, Antonio estaba temblando, no se sentía aún el Alfa, ese ser que debía inspirar respeto y obediencia.Mientras estaban en el carruaje que los llevo hasta el lugar más rico de toda la manada, las manos de Antonio estaban temblando, tenía miedo de no hacer las cosas bien, había escapado por un par de semanas pero seguía siendo el Alfa.Luciana lo tomó de las manos, parecía que sus almas se estaban conectando, sentía en su pecho el nerviosismo que sentía— Yo estaré contigo — esas palabras fueron un bálsamo para el lobo que sonrió al ver la cordialidad de su esposa.Zaira también estaba nerviosa, ahora sería respetada como la madre del Alfa, pero en ese lugar muchas de las lobas de clase social alta, la desprecian, siempre mantuvo la cabeza abajo.Antonio
CAPITULO 15Luciana decide tomar un baño en el río de su manantial especial, como reina debe cuidar cada detalle de la organización de la fiesta.Sabe que tendrá una fuerte discusión con Adriana, su tía, pues ella siempre había sido la encargada de organizar el festival desde hace mucho tiempo, esto pasaba porque no existía una reina, y siempre es ella quien debe tener el poder.Luciana parece una ninfa, su cabello largo y rubio flota en el agua, su desnudez es tan cálida como el manantial en el que flota, su belleza es tan perfecta que se camufla con la misma naturaleza, es imposible no verla y pensar que es una diosa.Mateo y Omaira caminan por el bosque, el está muy cerca de llegar a la manada, y pasa por el manantial.Su corazón se llena de alegría al ver a la bella Luciana en el agua— Es ella... Es mi amor — le Susurra a Omaira.La loba no se siente celosa, ella no tiene ningún sentimiento por Mateo, más que el de cumplir los caprichos de su padre de ocupar un lugar en las altas
Capitulo 16— ¡La reina!— exclama Ezequiel que ayuda a Antonio a sentar a Luciana en una silla.— Mí amor, por favor mi amor — Antonio acaricia la mejilla de Luciana que ha perdido el conocimiento después de tener que ver al lobo que amaba y que se hizo la idea de perder.—¿Amor?— Mateo se siente confundido, intenta acercarse para pelear, para pedir una explicación por parte de Lucíana, necesita saber que ocurrió en su ausencia.Francisco se acerca, lo toma del brazo y susurra en su oído— Mi hija se casó con el nuevo Alfa, no cometas una locura o ella pagará las consecuencias.Mateo siente que aquella noticia llegó como un baldado de agua fría a su cabeza, su amada no podia estar casada con otro, Luciana no podía olvidar lo que los dos tuvieron, ella fue suya, le pertenece.Lucíana abre los ojos, está en shock, ve a Mateo y siente que todo su mundo de nuevo se mueve, Antonio le pide a un grupo de lobas incluida Adriana que se lleven a su esposa a descansar.No lo ve como algo raros v
CAPITULO 17Luciana pierde el conocimiento, los lobos Delta se aprovechan de la distracción para llevársela por la ventana de su habitación, nadie se percata que en la habitación no está la reina de la manada.Mateo quiere pelear, siente que esto es suyo y que se lo han arrebatado de las manos, que Antonio debe seguir siendo un bastardo.Odia saber que él le quitó todo, le quitó a su padre, su manada y el amor de su vida, la idea de ver a Luciana en los brazos de otro le vuelven loco.Mientras toman una pausa, Mateo sale al pasillo, jala del brazo a Francisco y de inmediato le interroga.— Los dos teníamos un trato ya pactado, mi padre le iba a dar un gran dote por Luciana, pensé que era un lobo de palabra — gruñe furioso pues siente que fue engañado por el padre de Luciana.— Estabas muerto, necesitaba que mi hija se casara, además Antonio la acepto aún sin virtud, pues ya se que tú la tomaste — Francisco le reclama por haber cruzado ese paso tan delgado.—¿Por qué Antonio no lo sabe
CAPITULO 18Luciana se siente anonadada en aquella celda pequeña, oscura y fria, pero se promete tener entereza y no dejar que Ernesto domine su alma, es un ser que solo demuestra su falta de corazón.Cuando ve por una ventana los rayos del sol, exige que le lleven algo de comer, y no es para menos, lleva varias horas sin probar bocado.Uno de los lobos la toma del brazo y la saca de ese lugar, la lleva hasta el comedor dónde Ernesto ordenó la preparación de platillos mucho más exquisitos a los de la noche anterior, en un intento desesperado de gustarle al fino paladar de su comensal invitada.Luciana accede a comer, no sabe cuánto tiempo estará aquí y cree que debe mantenerse fuerte, es lo único que le importa, confía de una manera extraordinaria en que Antonio vendra por ella, toda la noche ha pensando en el, a pesar del encuentro escabroso con Mateo Antonio es el dueño de sus pensamientos.— Espero que te guste, prepare un menú adecuado para una señorita de sociedad como tú — Ernes