ACACIA LUNA.

Siento como algo a lado se levanta.

Abro los ojos y veo dos figuras borrosas en la puerta mientras escucho sus voces lejanas.

—Ella es mía y era inevitable que tuviéramos sexo —cierro los ojos por algunos segundos— ...No la viole.

Mis ojos se vuelven a cerrar y después los abro.

—¿Ella estuvo de acuerdo por ella misma o por qué la mordiste?

Mis ojos se cierran y ya no vuelvo a abrirlos.

Despierto y abro los ojos.

Lo primero que veo es la pared y después la ventana. Estoy así por algunos segundos hasta que reacciono y recuerdo todo lo que paso ayer.

Nicolás y yo...nos acostamos.

Perdí mi virginidad.

Me violaron.

Me siento en la cama cubriendo mi cuerpo desnudo y me alegro, cuando me doy cuenta de que estoy sola en la habitación. Pero luego vuelvo a recordar todo lo que paso y empiezo a llorar.

Se suponía que yo jamás perdería mi virginidad. Se suponía que, si la llegaba a perder, sería de una forma linda y especial. Se suponía que cuando recordara ese momento, lo recordari