LA MALDAD PUEDE TRIUNFAR SIEMPRE Y CUANDO NO HAYA ALMAS CAPACES DE ENFRENTARSE A LA MISMA MUERTE CON TAL DE HACER JUSTICIA, SANDRO SE VIO PERDIDO, PERO PENSO QUE AUN TENIA UNA SALIDA, QUE HOMBRE PARA MAS EQUIVOCADO, A VECES LA PUÑALADA FINAL VENDRA DE QUIEN EL MENOS PIENSA, DE QUIEN PERMANECIO A LA SOMBRA, ESPERANDO SU MOMENTO, PORQUE ELLA TAMBIEN MERECE SU VENGANZA, PORQUE ELLA TAMBIEN FUE ENGAÑADA, MANIPULADA Y USADA POR QUIENES ELLA CONFIABA, PERO YA NO TENIA NADA QUE PERDER POR LO TANTO ESA JUGADA SERIA SU ULTIMA JUGADA.

—¡Papá, mi mami, papá, no dejes que se llevan a mi mamá! Suelten a mi mamá— El pequeño Alessandro trataba de soltarse del agarre de su padre, intentaba salvar a su madre, no quería que nada le pasara, no quería perderla, su mente iba a ese momento en que los subieron al auto y apuntaron en su cabeza, recordando como ella le decía salta cariño, salta, no quiera que se vuelva a ir, no quería que le pasara nada, su corazón era de ella y el de ella de el.

Doménico,