-Primero, disculpen por lo ocurrido-
El doctor Cleid estaba realmente conmocionado por lo que paso, pero no estaba para sus disculpas. Nada de lo que haga o diga me devolverá mi niña y otra vez mis lágrimas caían.
-Sé que no arreglare nada con simples palabras. Lo siento joven Carlesik-
No sabía que decirle exactamente. No era su culpa, pero aun así lo culpaba quizá era el dolor no lo sé.
Quizá algún día me perdone y perdone a los que dañaron a mi niña directamente o indirectamente.
-Bueno empecemos el tiempo es oro en estos casos- hablo el doctor Snich.
La verdad no entendía cuál era el apuro si no había nada que hacer. Mi niña ya no estaba.
Me había dejado solo en este mundo.
La quería de vuelta.
Sentía que mi corazón se iba a salir. Dolía mucho, no sab&ia
Lo doctores se acercaban a mí. Venían conversando con las caras serias.-Joven Carlesik- síganos por favor.Desecho y si ganas de vivir los seguí, las preguntas en mi mente eran tantas muchas de ellas solo eran de la necesidad de que exista un milagro.Me hicieron entrar a uno de los consultorios, que supuse era de alguno de los doctores ya que no había estado aquí antes.-La situación con la señorita Jencli, es complicada- no sé, por qué repetían lo que ya sabía.Solo me quede en silencio queriendo escuchar al menos una palabra que me diga un, pero. -Como se le informe hace algunos días, que cuando se le realizaría la cesaría también se operaria el tumor de la señorita- había olvidado eso con todo y el ajetreo que se formó con la llegada de Luan. -La operació
Era tonta y exasperante su proposición, como si traer un bebe al mundo fuera como tomar café por la mañana y luego abandonar donde deseas la tasa cuando el café se ha terminado. Me levanté de mi asiento fui a donde estaba ella. La tome del brazo. No me di mi fuerza ya que ella se quejó. -Puede repetirme lo que me acaba de decir- no había tenido un buen momento y ella me sale con eso. -Repítamelo- le grite. -Dije que me embarace- me contento de mismo modo. -Está usted bien señorita. Anda poniéndole a todo el mundo eso haber quien cae- no esperaba la cachetada que me dio. -No soy una cualquiera que se acuesta con el primero que le quiere abrir las piernas- -Así, no se nota. Lo que veo es una mujer desesperada- me iba a lanzar otra cachetada, pero la detuve. -Por tanta violencia cuando fue usted quien me está proponiendo cosas inadecuadas e insólitas- -Usted me está faltando el respeto- -Enserio, no m
-Serás, solo mía Clarisa- le dije mientras empecé a besarla otra vez.Acariciarla de nuevo era fascinante, tocar su piel tan suave, como lo recordada.La ropa poco a poco iba desapareciendo de nuestros cuerpos. Mis manos se habían vuelto expertos en su cuerpo, la sentía excitar y sorprenderse cada vez más.Su inocencia, para todo me volvía loco y la besaba con más ímpetu. Quería fusionarme en su cuerpo. Ella, dejaba que la guie, con cada caricia que mis manos dejaban en su cuerpo.Verla casi sin ropa, provocó en mí una fuerte excitación que hizo darme cuenta que esta mujer sería mi comienzo y mi final.Antes de terminar de desnudarla, para saciarme de su inocencia me dediqué a observarla, ella era fascinantemente hermosa.No sé cómo sentí que alguien abría la puerta de la oficina. Me levanté
Me independice después de los 18 años, pero de igual manera iba a casa de mis padres, comía con ellos la mayoría de beses cuando era trabajo no adsorbía todo mi tiempo.Después de lo que paso con Tamary, luego con Anghelo, regrese a casa no podía estar necesitábamos estar más juntos que nunca. La familia había quedado marcada y lo que más dolía era que los años no perdonaban nada, pasaban sin detenerse en los corazones que desean un segundo más.De aquellos sucesos ya habían pasado 5 años. Los hijos de Anghelo cada día están más grandes y traviesos. La hija de mi hermano es la misma estampa de Tamary, es como verla crecer otra vez, remarcando la cicatriz que esta presenta y el anhelo de todos de que quizá algún día despierte y puede ver a sus hijos. Como dije antes la vida sigue si no vas con ella te dej
La vida es un poco o injusta con mi familia, primero Anghelo, que sufrió hasta que tuvo más lágrimas en su corazón. Ahora mi clon al parecer tiene que pasar la prueba. La pregunta es algunos de nosotros tenemos la fuerza de voluntad de Anghelo. Como dijo Joseelo nadie podrá soportar como Anghelo el dolor. Quizá tenga razón, no sé qué haría si un día me dicen que mi esposa o hija están que se debaten entre la vida y la muerte. -Se está muriendo y hasta hora bienes. Qué clase de madre eres- el grito de Stevan me saco de mi trance. -No sabía dónde vivías- le contesto de igual manera. Su hija ya empezando a estresarse –Dina- llame a la chica que cuida de mi hija y mis sobrinos, no sé cómo lo hace, pero los mantiene quietecitos yo lo he intentado y no puedo ni con la mía ja ja ja. -Dígame señor- -Puedes cuidar de la niña por favor un momento- -Sí, señor- -No, yo me calmo- dijo Brinia y le quito la niña a mi hermano, quien se
Mi teléfono sonó, era clarisa. Seguro ya había ubicado al doctor.-Señor Carlesik, dígame- escuche decir al doctor.-Buenas tardes doctor Cleid, puede por favor conseguir un especialista en niños con cardiopatía congénita--Alguno de los niños se puso mal--No, es la hija de Steven--Disculpe- dijo el doctor.-Luego le explicó, por favor puede hacer lo que le pedí, lo más pronto posible--Claro que si, en cuanto esté todo listo, le comunico--Gracias doctor- le paso el teléfono a mi amada y ella si estaba más que curiosa.-Cómo es eso que Steven, tiene una bebe--Sorpresas de la vida amor- la escuche reírse, luego se despidió.Fui a la cocina a ver una de las chicas de la casa.-Lucí- le hablé –puedes ir comprar ropa, para la chica y la bebe, unas dos munda
Mamá, los mellizos, Brinia y yo nos dirigimos a la clínica, al llegar nos recibió Clarisa.-Ya están aquí- dijo mi amada al vernos -los están esperando, sígame- ella toma mi mano y juntos con los demás siguiéndonos nos dirigimos al consultorio del doctor Cleid.-Aquí es- dijo Clarisa, para luego tocar la puerta.-Pase- se escuchó una voz de adentro.-Doctor Cleid- hablo abriendo la puerta -ya están aquí.-Qué pasen- hablo el doctor Cleid.-Bueno yo aquí los dejo, me retiro a seguir trabajando--Gracias- le dije, dándole un beso antes de se retire.-Buenas tardes doctor, disculpe por avisarle de momento- hable al entrar.-No se preocupe, Señor Carlesik- sonrió el doctor -ellos son el doctor Carmelo y Davish, tienen experiencia en casos de cardiopatía congénita en niños.
La vida pasa sin perdonar a nadie si te quedas estancado en alguna de sus caminos, no se detendrá a esperarte. Pero abecés pasa que es tu vida la que se detiene y los latidos de tu corazón no encuentran razón para seguir se detienen.Hace 5 años el mundo se detuvo para mi familia. El doctor que atendía a mi hermano Anghelo se acercó a donde estaba mi familia y nos comunicó la peor noticia que podrías recibir como humano.-Lo siento, hicimos lo que pudimos, mil disculpas…el Joven Carlesik acaba de fallecer-La frase que salió de los labios de doctor resonó otra vez como un eco lejano, me negaba a creer que había perdido a mi hermano.Me pregunto qué tan fuerte pudo haber sido su dolor, para no poder sobrellevarlo y dejar que la vida se aleje de sus manos sin pensar que quedan personas que lo necesitan en especial sus hijos.Mi madre al recibir la notici