—Lo siento Camila.— Se disculpa pero yo no escucho nada, pestañeo intentado contener las lágrimas y pronuncio por impulso la frase que acabada con todo mi tormento. —Renuncio.— El no quiso aceptar el dinero intente devolverle, tendré que cargar con eso toda mi vida, voy a pedir traslado a otro lug
Camila Smith Reflexiono mucho sobre las palabras que me dijo el doctor Andrew y tiene razón, no puedo irme solo porque su hijo este molestándome, lo más seguro es que se vuelva a ir a Europa en cualquier momento, es dueño de una clínica allá. Según escuche parlotear a unas enfermeras, yo nunca opi
—El solo me odia, sin ningún motivo. — Le respondo haciendo una mueca en mi cara. —No me parece, pero si tu lo dices tu sabrás. — Me responde. Es por acá. — Indico las calles que debe seguir, el pone cara de asombro cuando se detiene frente a mi casa. — ¿Eres la hija de los Smith?— Cuestiona el v
Camila Smith —Buenos días.— Saludo apenas entro al consultorio, el doctor Alec tiene enormes ojeras, pero como no es mi problema ni siquiera le pregunto nada. —¿Qué tienen de buenos?— Ladra y yo ruedo los ojos, ni siquiera debi saludarlo, hoy carga un humor de perros y se le nota a leguas. —¿Te p
Camila Smith —Esta es la comida favorita de mi nieta.— Cuenta mi abuela, sirviéndole una generosa porción a Alec ¡y a mí me sirvió solo un poco!, veo los platos sin disimulo y boqueo de la indignación. —Agradecida con Dios de haberlo conocido, ¿quiere bendecir los alimentos?— CUestionsa mi abuela.
Escucho como baja su pantalón, mientras yo no dejo de besarlo, sus manos están haciendo ¡todo!. Aparta mi ropa interior a un lado y me invade lentamente con su enorme masculinidad. Boqueo adaptándome a su tamaña, ¡es tan grande que me está expandiendo al máximo!, muerdo su hombro para no terminar g
Camila Smith Me Muerdo los labios al escuchar la regadera y saber que el descarado del doctor Cole esta allí bañándose con la puerta abierto, esperando que yo me decida a acompañarlo. —Si lo hago no puedo culpar al alcohol, doy un par de pasos hacia allá…De forma automática, solo quiero ver un poc
—¿A qué te ayudo?.— Cuestiona el, enrollándose los puños de la camisa. —¿También cocinas?.— Cuestiono con la boca abierta. —Claro ¿Qué te sorprende?, te falta muchas cosas que descubrir de mi.— me dice él. —¿Qué es lo que quiere usted conmigo?.— Cuestiono seria. —Quisiera que fuésemos exclusivos