El día del juicio había llegado, yo había estado cerca de dos semanas en la casa de Ancok, si lo sabía él no me permitiría por nada del mundo que me fuese a un hotel, aunque fui tratada como en la mejor suite presidencial de todo estados unidos, pues mi amado y sexi novio, me había cuidado con tal devoción, que yo no dudaba en darle mucho cariño extra como propinas, Senga iba a aquel apartamento para cuidarme, ya que según Ancok había quedado muy débil con aquel acto de Ancok, puesto que me hicieron hacer una denuncia forma, en la que Senga fue quien me asistió de primera mano, por lo que ante la fiscalía era la pobre chica que ayudo a la policía a poner un deficiente peligroso tras las rejas y necesitaban tener pruebas por ellos, por esa razón ahora mismo mis fotos y el video donde estoy siendo agradecida por Gavin está siendo expuesto.

La verdad sentía una satisfacción inexplicable, es una lástima que mi amado novio no pueda estar aquí, pues se supone que él, al ser el investigador