Las puertas del ascensor se abrieron en nuestra planta, dejándome salir primero como buen caballero, me fui directamente a mi mesa saludando a Sara antes, mientras que Kevin entraba en su despacho, habían pasado diez minutos desde que llegué a la empresa, cuando me levanté de mi silla acercándome a la mesa donde estaba Sara.
— Me voy al bar para tomarme un café, mi padre tenía mucha prisa esta mañana — le dije
— Yo no podría empezar si no me tomo uno antes, es mi droga para espabilarme — contestó
Me bajé al bar cogiendo el ascensor, espere en la cola a que me tocara el turno mirándome Bryan mientras sonreía, cuando ya pude pedir mi café, vi a Kevin a mi lado.
— Hola señor Taylor, enseguida le preparó su café — le dijo Bryan
Una vez que nos sirvió el café, Bryan puso las manos encima de la barra mirándome
— Te espero a la salida, te invito a tomar algo por ahi — me dijo
— La señorita va a salir tarde, hoy tiene mucho trabajo — contestó Kevin dejando a mi amigo muy serio
Con los vasos de café en la mano, fuimos a coger el ascensor para subir a la planta
— No hacía falta que fueras tan grosero con él — le dije
— No me gusta que mi mujer vaya por ahí ligando con los empleados — contestó
— No soy tu mujer y puedo ligar con quien yo quiera — respondí saliendo del ascensor cuando llego a la planta
— Señorita Anderson a mi despacho — me dijo
— Enseguida voy cuando me tomé mi café señor Taylor — contesté mirándonos Sara
— ¿Te ha pasado algo con el jefe? — me escribió un correo Sara
— Es muy mandón, y yo no estoy de buen humor si no me tomo mi café por la mañana — le respondí en otro correo
Despues de tomarme el café, cogi algunos documentos que estaban por revisar, pero no había pasado ni media hora cuando el jefe me llamo, cogi mi libreta y el lápiz, toque a la puerta con los nudillos y cuando me dejo pasar entre viendo que estaba de pie delante de su mesa apoyado con las manos, entre y cuando iba a sentarme en el sillón, escuche como cerro con el pestillo la puerta, me gire encarando a él
— No te acerques a mi o grito — le dije
Se acercó a mi pegando su cuerpo a mi cuerpo, cogio mi nuca con su mano apretando sus boca con la mia, solte la libreta y el lapiz, enredando mis manos con su pelo, me tumbo boca arriba en su mesa, puso mis piernas encima de la mesa abiertas, me quito el tanga guardandoselo en el bolsillo de su pantalón poniendo despues su boca en mi sexo, lamiendo y mordiendo mi clitoris, mientras yo tapaba mi boca con mi mano para que no me escuchara Sara cuando tuve mi primer orgasmo.
— Me encanta beberme tu orgasmo Alice, me tienes loco — me dijo mientras se desabrochaba la cremallera de su pantalón
De una estocada profunda me hizo suya, cogiendo mis caderas para impulsarse, sintiendo como me recorría una corriente eléctrica por el cuerpo estallando en otro orgasmo, mientras él sacaba y metía su miembro una y otra vez cada vez más deprisa, hasta que puso su cara en mi vientre notando como palpitaba dentro de mi. Minutos después se separó un poco de mí, ayudándome a ponerme de pie, rodeando mi cuerpo con sus cálidos brazos.
— Esa puerta que ves hay, es un baño por si necesitas refrescarte o lavarte — me susurro en el oído
— Kevin no podemos seguir así — le dije, tapandome él la boca con su boca, en un apasionado beso
Entre en el baño para lavarme, ya que me estaba cayendo por las piernas nuestro fluido, cogi la toalla que había secandome bien y cuando salí del baño vi que la puerta estaba abierta y él estaba fuera de su despacho hablando con Sara, me quede mirandolo, preguntandome si nos había escuchado y sobre todo si Kevin me iba a devolver mi tanga. Salí del despacho sentándome en mi mesa mirándolos de vez en cuando de reojo, hasta que llegó un hombre que yo conocía muy bien, era el abogado de la empresa, kevin y él se saludaron entrando los dos en el despacho.
Dos horas después se abrió la puerta del despacho, saliendo el abogado y quedando Kevin en la puerta de pie mientras se pasaba la mano por su pelo mirándome muy serio.
— Señorita Anderson, por favor ¿puede venir a mi despacho? — preguntó como si estuviera enfadado
— Voy enseguida señor Taylor — contesté
Me levanté de la silla, miré a Sara que parecía divertirse al vernos a los dos, entré en el despacho viendo a mi jefe sentado en la silla detrás de su mesa.
— Como habrás visto ha venido el abogado de la empresa porque lo he llamado yo, Alice quiero que nos divorciemos, pero tenemos que estar los dos de acuerdo — me dijo
— Esto ya es de risa, me follas encima de tu mesa, no me dejas hablar con hombres, me prohibes salir porque según tú soy tu mujer y ahora me dices “””PERO ESTÁS LOCO”” — grité entrando Sara asustada al despacho
— No pasa nada Sara, todo está bien — le dijo Kevin marchándose ella del despacho
— Esta bien dime que quieres y te lo daré, pero por favor firmemos el divorcio — me dijo
— No quiero nada tuyo, simplemente que me dejes vivir mi vida y te firmare encantada el divorcio, hasta entonces Kevin, que te jodan — le dije saliendo muy orgullosa de su despacho.
Desde entonces Kevin trato de no entrometerse en mi vida, aunque algunas veces me hacía entrar en su despacho para hacerme el amor o me daba más trabajo cuando sabía que tenía alguna cita con Bryan, incluso algún día del fin de semana, mi amiga y yo nos teníamos que quedar en casa porque venía Dory y Kevin a pasar el día en mi casa. Los días iban pasando y cada vez me encontraba más cansada y con menos ganas de comer, a pesar de ser tan joven y que mi trabajo en la empresa de mi padre no era para estar con mucho estrés.
Un día estando en la oficina trabajando, vi la hora que era en mi reloj dándome cuenta que era la hora de mi descanso, me levanté de mi silla y cuando me iba al bar, me dio una especie de maro perdiendo por unos minutos el conocimiento cayendo al suelo, cuando me recupere un poco me di cuenta que estaba en el sofá del despacho de Kevin, con el médico de la empresa, mi padre y Kevin a mi lado, poco a poco me fui sentando viendo el rostro desencajado de mi padre y de Kevin.— Te vas a tomar unos días de descanso Alice, o mejor te vas a ir de vacaciones, pero no te iras sola te acompañarán Cati y Kevin, necesitas recuperarte hija — me dijo mi padre— Estoy bien papá, no necesito vacaciones tranquilo — contesté— Kevin prepara tu equipaje, acompañaras a mi hija y a Cati a la casa que tenemos en Miami, os marchareis mañana por la mañana en el avión de la empresa — le dijo mi padreCuando ya me encontraba bien mi padre me acompaño abrazandome hasta la salida del edificio donde estaba aparc
En Miami nos esperaba el chofer con uno de los coches que tenía mi padre, dejó nuestro equipaje en el maletero y subiendo al vehículo, nos dirigimos hasta la casa que teníamos al lado de la playa. Al bajar del coche se dirigió hacia nosotros con los brazos abiertos Marta, mi nona y más que amiga. Marta era la que cuidaba la casa de Miami mientras mis padres y yo estábamos en Kansas, cuidandola para que cuando fuéramos en vacaciones todo estuviera limpio y dispuesto— Alice cariño ¿como estais? mis niñas Cati por favor no crezcas más, ya eres muy mayor — le dijo mi nona— Yo también me alegro de verte nona, tú sin embargo estas cada año más joven — contestó mi amiga haciendonos reir— El que esta guapisimo y si fuera mi novio no lo dejaría solo con estas dos, es mi Kevin, muchacho eres todo un playboy — le dijoEntramos todos en la casa, dejando el chofer nuestro equipaje en los dormitorios que mi nona le dijo, Cati enseguida se fue a su dormitorio, saliendo minutos después de él con e
Preparadas las dos nos despedimos de la nona, marchandonos a la playa para asistir a la fiesta, andamos unos cuantos metros cuando empezamos a ver la fogata que habían hecho cerca del mar, al acercarnos los dos chicos que nos invitaron enseguida se acercaron a nosotras con sendas cervezas en sus manos, las cogimos sentandonos con ellos alrededor de la fogata, presentándonos a varios chicos y chicas que allí se encontraban.Llevábamos casi una hora cuando Cati y uno de los chicos se levantaron para bailar, acercándose a mi otro de los chicos, cogio mi mano levantándome de la arena donde estaba sentada y otra cerveza, puso su mano en mi cintura bailando los dos, cuando senti como me cogian del brazo apartandome del lugar dándome cuenta de quién era el que me estiraba del brazo — Kevin ¿se puede saber qué haces aquí? — le grité — Tira la cerveza y explicame porque no me dijistes que voy a ser padre — me gritó — Yo no estoy embarazada o eso creo y además no tengo porque darte explicaci
Una vez que ya estaba vestida, cogi mi bolso y salí de mi dormitorio para irme a la entrada de la casa donde ya me esperaban Kevin que venía con nosotras y mi nona, subimos los tres al vehículo, marchandonos a la clínica donde tenía Marta su médico. Llegamos a la clínica, bajamos los tres del coche y entramos en la clínica acercándose mi nona a la recepcionista para dar los datos, esperando sentados Kevin y yo. Cuando la enfermera pronunció mi nombre, nos levantamos de las sillas los tres haciendo que la acompañaramos a la consulta del médico, entramos en ella saludando mi nona y el doctor— Bueno Alice, según me ha dicho Marta por teléfono, tienes constantes vómitos y no quieres comer por tus náuseas ¿puedes estar embarazada? — me preguntó— No, tengo las náuseas a causa del estrés de mi trabajo — contesté— Bien, si no te importa pasa a la otra sala, mi enfermera te sacara un poco de sangre y te dara un tarro, necesito que vayas al baño y me traigas un poco de pipi, para descartar e
Después de comer, ayudamos a recoger la mesa, nos fuimos Cati y yo a nuestros dormitorios para ponernos el bikini, una vez que ya lo teníamos puestos y cogiendo las toallas, nos marchamos de casa hacia la playa donde ya la esperaba los dos chicos que conocimos el primer día que fuimos a bañarnos — Hola Tom ¿hace mucho que nos esperáis? — preguntó mi amiga— A ti una eternidad preciosa – contestó él abrazando a mi amiga, besándose los dos en los labios— Que pegajosos, hola me llamo Aron,--- me dijo el otro chico — Yo me llamo Alice y si tienes razon son unos pegajosos — dije pegando mi amiga en el hombro con su manoPusimos los cuatro las toallas en la arena, metiéndonos enseguida en el mar jugando con el agua, pero sin esperarmelo Aron, me cogió por las rodillas colgandome en su hombro como si fuera un saco tirándome al agua, estuvimos jugando en el agua bastante tiempo, hasta que una vez cansados salimos tumbandonos en las toallas.— Hola me llamo Kevin, soy un amigo de las chicas
Puso su mano en mi nuca, apretando sus labios con los míos tumbandonos en la cama, me subió el jersey y el sujetador dejando mis pechos desnudos, me mordió dejando la marca de sus dientes mientras una de sus manos me tapaba la boca para que no gritara, lamió y mordió mis pezones, hasta que una descarga me hizo tener un orgasmo, levantándose Kevin de la cama mirándome. — Cada vez que te veas desnuda en el espejo, recuerda quien te hizo esas marcas, tu marido quieras o no, y sabes muy bien que yo soy tu dueño — me dijo — Las marcas que me haces se van, como te vas a ir tu de mi vida— contesté aún tumbada — Eso lo puedo arreglar, te voy a marcar a fuego como mía — contestó poniendo sus brazos a cada lado de mi cuerpo acercando su boca a mi boca Kevin se marchó del dormitorio sin decirme nada más, me arregle la ropa y termine de hacer el equipaje, cuando fui a la entrada de la casa, ya estaban esperándome en la puerta Kevin, Cati y mi nona. Nos abrazamos mi nona y yo mientras el chofe
Aunque no me puse el despertador porque no pensaba volver a la empresa de mi padre a trabajar, me empezó a llamar mi madre consiguiendo que me despertara, me levanté de la cama acercándome a la cocina para buscar a mi padre y hablar con él, pero antes de que pudiera decir nada, le vi el semblante muy serio y pensé que sería mejor ir con él y ya en su oficina decírselo. Entre en el cuarto de baño, me quite la ropa metiendome en la ducha, sali y ccogi mi alabornoz que colgaba en la puerta — Alice date prisa, que hoy tengo mucho trabajo y no quiero llegar tarde — me dijo mi padre Entre en mi dormitorio para vestirme, sali diez minutos después y sin poder tomarme un café, cogi mi bolso saliendo de mi casa junto a mi padre. El chofer ya nos esperaba con la puerta abierta de la limusina, la cerro poniendose en el asiento del conductor marchandonos de casa.Paro en la misma puerta del edificio donde tenían Kevin y mi padre la empresa, bajamos del vehículo cuando el chofer nos abrió la puerta
Kevin me ayudó a ponerme de pie en el suelo,y después de arreglarme la ropa sin poder recuperar mi tanga ya que Kevin se negó en rotundo a devolvermela, abri la puerta y me marche del despacho directa al cuarto de baño, ya que me caía por mi entrepierna los fluidos de los dos y no deseaba que nadie se diera cuenta, sobre todo mi compañera Sara. Entre en el cuarto de baño y con el papel mojado en agua pude limpiarme y refrescar mi sexo un poco, ya que Kevin con sus fuertes embestidas me dejo bastante irritada. Salí del cuarto de baño dirigiéndome a mi mesa, me senté en mi silla mirándome Sara con cierta extrañeza. Cerca de la hora del almuerzo, vi a Dory salir del ascensor y acercarse a mi muy sonriente.— Gracias por el favor tan grande que nos has hecho a Kevin y a mi Alice, me alegra de que hayas sido tú la que ha accedido a la inseminación y que lleve a mi hijo en tu vientre, aunque me gustaría que te vinieras a vivir con nosotros y así poder seguir tu embarazo, escuchar los latid