Capítulo 27

Rebeca

Fui al baño y él estaba esperando mi comida.

Tomé una buena ducha, me lavé el cabello y ahora estoy genial y me muero por agarrar este bombón.

Llegó la comida y comí como loca. Sé que no debería estar pensando en secuestrar a un hombre comprometido a punto de casarse, pero he estado deseando a este hombre durante meses de mi vida y a su prometida. Lo siento, pero no puedo controlarme frente a esto. hombre.

- ¡Humm delicias!

Se rió de nuevo y que hermosa sonrisa.

¡Jesús, dame fuerzas!

Tan pronto como terminé de comer, Rahmi llevó los platos y los cubiertos a un mostrador en la sala de estar. En el camino de regreso vino a besarme y aparté la cara.

— Tengo la barriga muy llena, comí mucho. No quieres tener sexo ahora, ¿verdad?

“Oh, pero lo hago. Llevo meses imaginando tu delicioso coño.

"Oh, ¿así que solo echabas de menos mi vagina, pervertido?"

— ¡Extrañé todo el set con locura!

La suite era enorme, tenía grandes ventanales y una televisión gigante.

"Descansemos un poco y veamos
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