SARA.Adam entrelazó mi mano con la de él ofreciéndome una sonrisa, y luego me besó las mejillas mientras cerré los ojos.Estaba muerta de pánico, primero porque íbamos a llegar en modo sorpresa a esa casa, la cual nunca había pisado, y segundo, tenía un suspenso en el alma por la forma en que me mirarían los padres de Adam.Era obvio que yo no era la que había huido, pero si había ocultado a su nieto.Habíamos decidido enfrentar el mundo dos días después de aquella mañana en la playa, y aunque estaba emocionada por este nuevo cambio en mi vida, también estaba temerosa por las cosas nuevas.Junto con Adam le había escrito a Oliver, pero él no había respondido a ninguno de mis mensajes, incluso lo llamé, pero tampoco hubo una respuesta.Tomé un suspiro al saber que debía cancelar todo lo de la boda, y sobre todo hablar con él para responsabilizarme de este hecho.Pero en el momento en que el auto se detuvo, mientras el chofer bajó el vidrio en el portón principal de la mansión, sentí c
ADAM.—Papá… creo que Sara está cansada del viaje… y queremos ir a nuestro lugar a descansar… hay mucho que hacer.Papá se giró con el ceño fruncido, mientras Liam le pasaba un lego gigante, que él mismo había mandado a traer unas horas después de que llegamos a casa.La sala estaba llena de legos y carros de colección, y muchos regalos que ni siquiera Liam había mirado.—Es muy temprano, y Liam quiere jugar… —Torcí los ojos ante su terquedad, y la verdad no sé cómo iba a poder lidiar con un hombre como él, ahora que Liam estaba en medio.No quería que un futuro mi hijo prefiera a su abuelo, y ambos sean cómplices en sus travesuras.—Papá… vendremos en otro momento —traté de lidiar, pero él me ignoró y se levantó para dirigirse a Sara.—¿Por qué no lo dejan con nosotros? —ella abrió los ojos y me miró.—Papa… —tuve que hablar más fuerte—. Dale tiempo a Liam… apenas los conoce.—¿Desconfías de mí? —restregué mis ojos y vi cómo Sara se levantó.—No, señor… claro que no, solo que, estamo
SARA.—Lo siento mucho… —alcé la vista hacia Oliver mientras él asintió con una sonrisa triste.—Siempre pensé que ese hombre era un tonto por haberte abandonado, Sara… pero también me creí que podías llegar a rehacer tu vida conmigo… me dijiste cosas muy diferentes a las de hoy, y yo… pensé… pensé que la realidad podría ser otra…Agaché mi cabeza sintiendo mucha culpa.Y si me había mentido a mí misma todo este tiempo, era obvio que también había mentido a los demás.—Adam no fue el único tonto de este cuento, Oliver, hay muchas personas detrás de la situación que formaron parte a nuestra desgracia, y queremos una oportunidad.Él afirmó haciendo un gesto.—Claro…—Sé que suena egoísta… —Oliver se rio.—Sí, de cierta forma lo es… porque solo estás mirando tu parte, además, dejaste pasar mucho tiempo. Pero no hay mucho que hacer, Sara, es imposible formar una vida sobre una mentira, y que bueno que te diste cuenta y no dejaste que cometiéramos una locura.Tomé su mano de inmediato, y l
PREPARATIVOS… Sara estaba oliendo las flores naturales y divisando los colores, mientras Sofie llevaba a Liam en sus brazos haciéndole juegos. —Creo que estas son hermosas… —comentó Sara mientras Sofie se giró y fue con ella. —La verdad, sí… son increíbles… ¿Te gustan, bebé? —Sofie movió a Liam y le señaló las flores de colores. —Sí, tía… —Sara y ella sonrieron ante la respuesta del pequeño, y luego caminaron por toda la floristería admirando los arreglos. —¿Has hablado con tu padre de la mudanza? —Sara preguntó, y ambas aprovecharon a tomarse un café en la sala de espera. —Si… es obvio que no está muy cómodo, aunque, ha aceptado a Alex mejor de lo que esperé… sin embargo, solo estoy nerviosa por esta noche. Ya sabes, el que nuestros padres se encuentren frente a nosotros, incluso me hace temblar… Sara alzó los hombros y frunció los labios. —No quiero emocionarme, Sofie… pero ¿no crees que sería maravilloso que ellos fueran amigos de nuevo?, quiero decir, ambos han pasado por m
BODA…Sara se miró en el espejo cuando terminaron su maquillaje, y puso las manos cuidadosamente en su boca. Una parte del personal estaba con ella, y otra con Sofie, pero ambas habían decidido a solo verse, cuando estuvieran para salir a fuera de la iglesia, y caminar junto a sus padres hacia el altar.La semana había pasado demasiado rápido. Literalmente Noah y Anthony había competido por ser los anfitriones perfectos y regalarles a sus hijos los regalos más caros, uno tras de otro.Sofie estaba lista con su vestido de princesa, mientras Sara eligió uno de sirena y de cola larga.Adam y Alex estaba en la misma habitación golpeándose las mejillas el uno al otro, mientras Emma y Camila, se sentaron en las sillas principales, mientras comentaban sobre las flores y todo tipo de decoración.Y… finalmente, Liam estaba en brazos de su abuelo Noah, mientras su otro abuelo, Anthony, le arreglaba la flor, en el bolsillo de su chaqueta.—Dime Liam… ¿Quién es tu preferido? —Preguntó Anthony mie
FESTEJO.—Papá… baila conmigo… —Noah se levantó a regañadientes cuando Sofie lo haló hacia la pista, y una balada comenzó a llevar sus pasos.—Tu sonrisa… —él comentó acariciando su rostro—. Es muy amplia…Y Sofie asintió.—Estoy muy feliz… ¿Puedes notarlo? —Noah se rio echando la cabeza hacia atrás.—Sí, es muy evidente… y aunque me pareció muy cursi de tu hermano y tu marido hacer esas cosas contaminando el ambiente, se han destacado en esta boda. Me alegra que te hayan consentido tanto.—¿Papá? Quiero preguntar… —Sofie llamó su atención.—¿Qué pasa?—No soy celosa, amo a Liam con mi vida, es como si fuera mi hijo, pero… ¿Amarás a mis hijos de la misma forma?Noah frunció el ceño y se detuvo en el baile para tomar el rostro de Sofie.—Tus hijos y los de Adam, serán míos cariño. No tendré diferencia con ellos… así que no te preocupes por eso.Sofie negó haciendo que bailaran de nuevo.—No es que me preocupe, solo amo tanto la forma que vez a Liam… desearía que vieras a mis hijos de e
ALI NACIENDO.—¡Oh Dios mío…! —Noah se agitó cuando vio que estaban pasando de una camilla a otra a Sofie, mientras Alex iba detrás de ella tratando de tranquilizarla.—Señor solo uno… —alguien lo detuvo, y él tuvo que morderse la boca, pero se puso tenso cuando su hija gritó de nuevo. —Creo que le duele… —comentó Adam y Noah le envió una mirada fría.—Quisiera estar con ella… —pero Emma negó frotando su espalda.—Sabes que es el derecho, él es su esposo, y el padre de nuestra querida Ali.Nadie habló durante la siguiente hora. Y Sara se pegó a Adam mientras pensaba en lo nervioso que podía estar su hermano.—¿Ya nació? —Anthony entró apresurado, y detrás de él, estaba Camila.—No han salido… no se sabe, Sofie tenía mucho dolor, pero ya saben cómo es esto, puede tardar horas… —esta vez fue Emma quien informó.—Familia… —todos se giraron cuando un médico los llamó—. Ali Mars ha nacido saludable… ya han pasado a la señora Mars a su habitación, y en una media hora ustedes podrán ingresa
ANTHONY Y CAMILA. —Se supone que debía asistir a esa invitación en Londres…—No lo planeé, ¿de acuerdo…? Solo me siento muy mal… —Anthony se tiró en la cama como su estómago revuelto, mientras Stefany golpeaba el suelo con sus tacones.—¿Y qué se supone que haga ahora? Esto es importante para mí… siempre estás arruinando todo, Anthony, siempre lo haces… —Anthony se agarró la cabeza porque sentía que le iba a estallar, y luego tomó el celular.—Envíen un auto y que lleven a Stefany al jet… si… bien —Él finalizó la llamada y luego arrojó el teléfono al lado de su cama—. Puedes irte a Londres…—¿De verdad? Yo…—Vete… ya está todo listo.Stefany casi aplaudió de la emoción, pero luego se detuvo y se giró.—¿Y el dinero?—Te depositaré en tu tarjeta…—¡Oh Dios…! Que emoción, no te preocupes, tú quédate en casa, y me avisas cualquier cosa.Ella hizo su maleta con rapidez, y luego de una hora vio cómo Anthony vomitaba en el baño.—Debe ser una mala digestión, ¿Por qué no llamas al médico y