“Presidente Lynch, lo siento. Tenemos mucho inventario en la fábrica últimamente y no tenemos espacio por ahora. Es por eso…”.

“¿No te preocupa que haya una confusión cuando muevan el inventario?”. Forrest dijo con frialdad: “¿Qué te había dicho? Las fábricas de vidrio tienen riesgos de seguridad. Como gerente, no solo tienes que garantizar una buena producción, sino también garantizar la seguridad de todos. Aunque los empleados de la fábrica son responsables por negligencia, tú también tienes la culpa. Ya que no puedes garantizar la seguridad de la empresa, dudo de tu capacidad”.

El rostro del Gerente Woodward palideció.

“Cuando regreses, entregale tu trabajo a otra persona. Serás transferido al departamento de producción por el momento”. Forrest dio la orden sombríamente. “¿Alguna objeción?”.

“N-No”.

El Gerente Woodward no sería tan tonto como para responderle a Forrest porque estaría en problemas si perdiera su trabajo.

Es más, no se atrevía a imaginar cuáles serían las consec