Rodney guardó silencio.

Su silencio significaba una confirmación.

Después de darse cuenta, Patrick todavía no entendía cómo Freya le hizo esta petición a Rodney. “Joven Amo Snow, ¿no le... gusta Sarah?”.

Dado que Rodney quería a Sarah, ¿por qué estaba ayudando a Freya y volviéndose en su contra?

Todo lo que Patrick quería era aclarar el tema, pero no sabía que su pregunta había tocado un nervio en Rodney, lo que le hizo sentir furia y vergüenza.

De hecho, todo el mundo sabía que Rodney quería a Sarah, pero esa mujer le puso los cuernos.

“Quien me gusta no es asunto tuyo”. La expresión de Rodney se puso sombría.

Una oleada de emociones abrumó a Patrick en el fondo. No pudo evitar decir: “Joven Amo Snow, después de todo, era parte de la familia Snow. ¿Por qué siempre está maldiciendo...?”.

“¿Quién dijo que los de familias adineradas no pueden maldecir?”. Rodney lo interrumpió. Sus encantadores ojos estaban llenos de sarcasmo. “No maldices, pero disfrutas jugar con los demás. Buen