En ese momento realmente sentía que dios le odiaba… mientras se preguntaba ¿cómo había acabado en esa situación? Y tristemente ni el mismo lo recordaba, solo sabía que debía actuar rápidamente y con la cabeza fría, mientras recordaba todos los acontecimientos que habían pasado en el transcurso de ese día.

Había empezado como una mañana muy prometedora, ya que al despertar noto que Kyomi estaba abrazada de él… por un momento pensó que estaba soñando, pero se alegró al descubrir que no era un sueño, por lo que se permitió acariciar los suaves y sedosos cabellos negros de su compañera mientras esta seguía durmiendo. Después de un rato y con sumo cuidado, se levantó de la cama sin despertarla y se dirigió al baño para arreglarse, al salir lo hizo de forma sigilosa para no molestarla ya que ella aun dormía y ahora que lo pensaba últimamente dormía más de lo habitual, pero supuso que a lo mejor se debía a que por lo general se la pasaba entrenando o peleando con Lucia.

Como era rutina y cos