Sentí que el frío metal de la pistola Beretta me picaba en el muslo. Arlet estaba siendo justificadamente sobreprotector en este momento y me entregó una pistolera y una pistola.
-Estoy aquí, Sasha. No dejaré que nada te suceda- Besó la parte superior de mi cabeza, sosteniendo mi mano en la suya, mientras pasaba su pulgar por mi anillo de bodas.
Asentí con la cabeza, tragando el miedo que se deslizó en mi garganta.
Me dio un último apretón antes de abrir las puertas del comedor.Debajo de cada mujer fuerte, yace una niña rota, que siempre estaba demasiado asustada para volver a levantarse y defenderse. Esa chica solía ser yo. Recuerdo estar demasiado asustada para defenderme. Recuerdo dejar que la gente me pisoteara y recibir cada golpe que me lanzaban. He terminado. Y lo hice desde hace tiempo. Nunca sabrás en que puedes convertirte si no superas tus mierdas. He pasado por mucho más que la mayoría. He superado esos horrores que solían hacerme sentir tan rota. He sido un bote de b****a para la m****a de todos, pero ya terminé.
Probablemente no fue un movimiento inteligente.Este hombre era al menos el triple de mi tamaño.Elevándose sobre mí con una altura inmensa, con bíceps más grandes que mi cabeza. Abrió la boca para responder, cuando un coche chilló frente a nosotros. Arlet se sentó en el asiento delantero, "Sube". Ordenó, sus manos golpeando el volante con impaciencia Era un auto pequeño, lucía deportivo y caro. La ventana del asiento del conductor estaba rota y parecía que Arlet lo habia hecho.
Para alguien tan rico como Arlet, seguro que eligió el motel más horrible del país. -Si hay un vagabundo en el baño, voy a meter la cara en el microondas- Murmuré, arrojando mis maletas sobre la cama llena de bultos a medio hacer. Era un motel cerca de la autopista. Para un lugar tan de m****a como este, pensarías que habría vacantes. Pero no, solo quedaban 2 habitaciones en todo el motel. -Quiero que te vayas por la mañana, ¿entendido?- Arlet le dijo a Koda, que parecía demasiado feliz. Kodaasintió, sus ojos de acero parpadearon hacia mí antes de sentarse en el borde de la cama crujiente. -Literalmente voy a gritar, este lugar parece el interior de una vagina- Rachel gimió, entrando en la habitación contigua.
Punto de vista de Arlet Arranqué la cortina de la ducha en el baño, solo para encontrar una almohada y nada más.El pánico corría por mis venas, mis manos temblaban con furia mientras evaluaba la situación. Sasha no estaba, Koda se había ido. Joder se la llevó en medio de la noche.Solo había salido de la habitación del hotel por un minuto, para contestar una llamada de Gabriel. No quería despertar a Sasha, ni siquiera los escuché. Sabía que si ella estaba consciente, estaría gritando. Ese cabrón debe haberla drogado. La minivan patinó hasta detenerse frente a la casa de mi infancia. Sentí mi corazón latir a través de mi pecho cuando vi el auto deportivo que conducía Koda, estacionado afuera. La casa estaba muerta y silenciosa, podría haber sido una imagen.No había luz, ni sonidos, ni señales de que hubiera alguien dentro.El auto que le había robado a mi padre antes estaba estacionado afuera, las puertas aún abiertas con las luces interiores encendidas. Blake estaba cargando sus pistolas, sus ojos estaban oscurosNo hay libertad
Punto de vista de Arlet -Blake nació en el mismo hospital que yo, el mismo día. Yo nací 6 minutos antes que él. Era un buen hombre, un amigo leal y un hermano feroz. Como muchos de nosotros, nunca tuvo una familia. Creo que por eso amaba a la mafia, porque somos una verdadera familia, quizás no la familia más adecuada, pero familia a pesar de todo... Como estoy seguro de que todos ustedes saben, a Blake le encantaban las drogas. Siempre bromeaba conmigo y decía que las drogas pueden lastimarte, pero nunca te romperán el corazón. Pero algo dentro de él, siempre había estado lastimado, quería más en la vida. Quería hacer más con su vida. Tenía este vacío constante en su vida que llenaba de drogas y armas. Puede que a algunos de ustedes les haya parecido una máquina de matar sin emociones, pero confíen en mi cu
Cuando pierdes a alguien, intentas recordar la última vez que lo viste.Y la mayoría de las veces, es un recuerdo borroso, porque en ese momento, no tenías idea de que sería el último. Me senté en la cama de la casa de Blake, viendo como Rachel hacía una maleta. No había estado comiendo ni durmiendo durante la última semana, ni siquiera me había hablado hasta hoy cuando me invitó. Volaba a Carolina del Norte para quedarse con sus padres por un tiempo, dijo que necesitaba algo de tiempo para reajustarse a todo. -¿Cuánto tiempo crees que estarás fuera?- Pregunté en voz baja, jugando con las sábanas de la cama. Olió, metiendo r
2 semanas después -Relaja el brazo, Sasha. Deja de estar tan rígida- Sebastian murmuró, viendo como disparaba 6 rondas a un objetivo. Nos habíamos estado infiltrando en el recinto todos los días durante las últimas 2 semanas para practicar y entrenar. Había estado trabajando al menos 6 horas al día, practicando tiro, lucha y defensa personal. El resto de mi tiempo lo pasé en casa, utilizando el gimnasio para ponerme en forma.De hecho,usé el gimnasio, fue una gran sorpresa.Último capítulo