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Dehy RodríguezLas amigas reunidas. que creen que pase en esa cita?
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75. Comer delante del pobre
75- Jennifer Cuando Joseph llegó a las tres de la tarde vio a Cora sentada estilo indio cantando canciones a todo pulmón solo negó con la cabeza y fue directo a donde estaba con aire divertido. —Hola, muñeca ¿se divierten? —pregunta y me da un beso en la boca a modo de saludo. —Ella si— la señalo con mi pulgar, me entrega una caja de chocolates de leche que amo. Ve mi pie extendido y subido a un par de cojines y leí la pregunta en su rostro, aun así, lo dejé hablar antes de adelantarme a los hechos. —Gracias, amor— le dije dándole otro beso. —¿Adam ya vino? —me pregunta antes de regalarme más besos que me sabían a caramelo. Escuché un carraspeo incomodo se escucha y nos separamos sin muchas ganas de hacerlo, la verdad sea dicha. —¿Puede dejar de comer delante del pobre? —pregunta Cora fingiendo enojo. —No— dijimos al unísono y luego reímos. —Me iré a dar una ducha— dijo Joseph desapareciendo por la escalera. Nos quedamos Cora y yo viendo más programas de música y cantando, y
76. Niña sumisa
76- PauletteEstaba aun en la cama cuando veo a Sam entrar de nuevo a nuestra habitación y gracias a Dios no es la misma que la de Jennifer.—¿Por qué no te has vestido? —pregunta Sam viniendo del gimnasio.—No tengo ganas de salir hoy, me siento mal— le dije acostada en la cama.—¿Quieres ir al médico? —pregunta viendo la hora y haciendo una mueca.—No, le diré a Ysabel que me prepare una sopa y me de algún té o algo que me ayude a sentirme mejor— no necesitaba que estuviera “preocupado” por mí.—Bien, estaré aquí en la tarde. No salgas de la casa— me informa —quería viajar, quiero dejar todo en orden y planear bien todo.—Esta bien. Puedo ayudarte a organizar el viaje —me ofrecí como buena chica.Este papel de niña sumisa me estaba cansando.—Claro, para eso te dije, arregla todo y en dos días nos vamos— dijo contento con mi respuesta y entrando al baño una vez esta desnudo.Bajé poco después y me senté en la mesa de la cocina para empezar a desayunar cuando llegara la policía debía
77. ¡Bienvenidos!
77- JosephSe escapó.Esos inútiles lo dejaron ir, su cara está en todos los noticieros así que espero que lo atrapen pronto.No me siento tranquilo con Sam suelto por allí, al menos Eliza está presa, pero ella también tiene algunas conexiones y quiero ver quiénes son los cabecillas de todo para que caigan todos.—¿Estás bien? —pregunta Jenni cuando sale del baño esa noche y se sienta para aplicarse sus cremas.—Sí, solo cansado— le dije entrando a la cama con ella— ¿Cómo estuvo la terapia hoy?—Bien, me dolió un poco y el doctor Carson siempre me recuerda que es un camino difícil y con paciencia— se encoge de hombros.Toma una de sus cremas que huele a melocotón y la aplica en su cuello y manos con parsimonia.—¿Seguro estas bien? —pregunta de nuevo y le asentí.Sin querer verla, creo que era mejor que no supiera que Sam se escapó, que ayudé a que su investigación se diera a cabo y lo atraparan solo para que fallaran, trataré de no hacer una tormenta, para esto contrate a Asher, Roge
78. Las noticias
78 Jenni No me enteré por Joseph que había una investigación ya en curso de Sam y para colmo Sam se le escapó cuando llegaron para arrestarlo, ni siquiera sabía que había un caso abierto con el apellido Wilson en ello. La única razón para que no actuarán antes era por los Kessler, así de poderosos son la familia Kessler en Denver y yo lo sabía, pero lo ignoraba deliberadamente porque no me importaba, pero sabía que la familia de Joseph podría ser dueño de todo Denver y algunos estados aledaños. —Vi las noticias— le dije suavemente mientras lo veía arreglar su barba frente al espejo del baño esa mañana. La condensación llenaba los espacios del baño que se escapaban por la puerta abierta donde yo estaba de pie con mis muletas. —No quería preocuparte— me dice viéndome por el espejo. —Estoy bien mientras estemos en esto juntos, no me apartes, Joe —le pedí nerviosa. No sabía que era lo que me preocupaba realmente, obviamente es preocupante que Sam este prófugo de la justicia, pero más
79. A los meses
79 Jennifer1er mesSe hizo recurrente visitar al menos una vez a la semana al señor Cinnamon y comer dulces con él mientras él me platicaba de la guerra, su familia y su hija. Siempre tuvo muy presente a su hija, aunque no tengo el gusto aún de conocerla, pero siento que ya la conozco, así de bonito habla Albert de su hija Claire.—¿Hoy vas a ver al señor Albert? —me pregunta Joseph poniéndose la corbata de su traje.Habíamos entrado en una buena rutina que amaba, a veces lo acompañaba al hospital solo para pasar toda la mañana con Albert, luego nos íbamos a comer y él me traía a casa, Asher aún nos seguía a todos lados, de Sam no se sabía nada y mi hermana aseguraba que no sabía en donde estaba, en estos días es el juicio de Eliza y Thairon, su patriarca de los Wilson.A Sam parece que se lo tragó la tierra y eso en vez de relajar a Joseph lo pone más nervioso, aunque logra enmascarar su nerviosismo bastante bien. Lo conozco y a mí no me engaña. Yo creo que se fue lejos de nosotros
80. Viejo amigo
SamEstaba vistiéndome cuando escuché el estruendo de la sala y escuche las palabras que no quería oír nunca.«Policía de Denver»Me terminé de vestir, tenía a lo sumo dos minutos antes de que alguien irrumpiera en la habitación, me metí más es el vestidor y aparte la ropa revelando la pared falsa que mande hacer hace cinco años, sabía que este día llegaría, pero creo que me buscan más por el accidente de Jennifer, que por todo lo ilegal que he ayudado a tapar que hace mi abuelo y mi madre.«No me importa, tengo un colchón bastante cómodo, puedo estar lejos del ojo público mientras tanto, esto puedo solucionarlo» pienso mientras me pongo los zapatos y me voy por el túnel, es cuestión de tiempo para que lo consigan también, no puedo quedarme aquí y perder mi libertad, eso no pasará. Caminé al menos una hora, salí por una alcantarilla en la parte pobre de Denver y tomé un taxi a las afueras de la ciudad.En cuanto llegué me cercioré que nadie me siguiera antes de subir al edificio que
81. No más
81 JosephNo sé cómo sentirme respecto a todos estos meses que van pasando, Jennifer ha estado tranquila y su recuperación es todo un éxito. Si creo que pueda llegar a bailar de nuevo algún día, pero ella no ha querido hablar del tema.Poco a querido hablar del día del accidente, pero siento que me oculta algo y por eso evade mis preguntas.—¿Ya se va, doctor Kessler? —me pregunta Tiana cuando me ve salir.Miro la hora antes de responderle como es debido.—Sí, luego de que termines de archivar eso vete a casa —le dije con una pequeña sonrisa— y dime Joseph—Es usted mi jefe— me recalca como siempre a lo que suelto una risita.—¿Y eso qué? —me encogí de hombros —soy el mejor amigo de tu… el esposo de tu mamá —corregí a tiempo.—Augustus Bianchi es solo eso. El esposo de mi madre, no por eso le voy a faltar el respeto a usted— recalca —de todos modos, le tomaré la palabra de irme temprano, tengo un examen en la universidad sobre teología.—Suerte con eso— le dije caminando hacia el asce
82. Mensajes desconocidos
82 JenniEstaba tan nerviosa cuando entré al local que no sabía que hacer, Asher se veía confundido aún así me siguió a una distancia prudente sin hablar, tomé dos cajas de test de embarazos y unas gomitas, luego me fui a otro pasillo en unos anaqueles donde vendían cosas de comida, me provocaba comer algo picoso así que compre todo lo relacionado al picante, vi una receta de unos youtubers y quería ver qué tan bien sabía.Luego pagué y me fui como si mi culo estuviera en llamas, no quería contarle a nadie que tenía un atraso de dos semanas y que era probable que estuviera embarazada.—¿Te sientes bien? —me pregunta Asher sin dejar de ver el camino a casa.—Sí, solo un poco… ¿extraña? —le dije y la última palabra salió como una pregunta.—Es extraño… sí —me dijo aparcando a un lado de la carretera— pero creo que serás una gran madre.—Yo… gracias —le contesté sin saber en realidad que decir.No planeé esto, y es como un golpe de realidad en el que te tienes que sentar a preguntarte qu