La fuerte música inunda mis oídos. Maicol está aquí, junto a una chica y dos chicos más. Ya he bebido como 5 copas de una bebida muy fuerte pero deliciosa.
Suena la música intensa de Desire - Hucci Remix y no puedo evitar bailarla pegada a todos los demás. Siento que todo a mí alrededor da vueltas. Elevo mis brazos y dejo que la música saque mis mejores movimientos hasta que unas manos me acarician los muslos mientras meneo las caderas.
Me doy la vuelta y veo que es Maicol.
Observa mi boca con deseo, pero afablemente trato de apartarme de él.
— ¿Alguien te ha dicho lo hermosa que te ves en este momento? — me susurra. No escucho gran cosa. Solo las palabras "hermosa te ves" y sonrío como tonta.
— ¡Sí, de hecho, sí me lo han dicho! ¡Mi novio! ¡El hombre que me hace suya todas las noches! —grito, sin estar en mis cinco sentidos. Lo que sí sé, es que estoy disfrutando este momento como ningún otro.
—Yo podría hacerte mía también e
Hoy es mi primer día de entrenamiento. Me siento muy emocionada y nerviosa a la vez. La relación con Jack va cada vez mejor, lo que me hace sentir tranquila. Las veces que se queda a dormir conmigo, suelo despertar en medio de la noche y no estaba en la cama, sino en la cocina o en el baño, según él. Se me hace muy extraño, ya que lo hace constantemente pero quizás solo estoy poniendo cosas donde no las hay. Total, no le daré importancia. Al llegar a la morgue, la secretaria me entrega el uniforme, los guantes, la mascarilla y todo lo necesario para empezar este nuevo día. James me da la bienvenida y comenzamos a trabajar de inmediato, ya que hay un cuerpo que examinar. —Nuestro trabajo incluye examinar el aspecto externo del cuerpo, buscando lesiones, heridas, contusiones, inspeccionar los órganos, tomar muestras de sangre, ADN, realizar análisis de elementos tóxicos para llegar a una conclusión de la causa de muerte y entr
Estoy apartado de todos, esperando a que Jack decida prestarme atención. Ha estado toda la noche hablando con ese señor y un buen rato, Laura se les unió. Si no viene en 5 minutos más, me voy de este lugar. Demasiadas tensiones he tenido en este día para también ser ignorada por el que dice ser mi pareja. Pasan los cinco minutos y aún no viene, por lo que cumplo mi palabra y salgo de aquí. En cuestión de segundos, corre detrás de mí hasta alcanzarme. — ¡Melanie! — ¿Para qué me trajiste aquí? ¿Para hacerme quedar en ridículo? —discuto. — ¿De qué hablas? Estaba hablando algo de trabajo con ellos. — ¿Trabajo? ¿En una m**
Abro los ojos lentamente. La luz del sol me molesta mucho. Me siento muy mareada. Tengo las manos atadas y estoy recostada sobre un mueble. Cuando mi vista se aclara, me doy cuenta de que hay un señor sentado frente a mí. Me asusto y trato de quitarme las cuerdas. —Tranquila, no te haré daño. —dice mientras pone el tabaco que fumaba en el cenicero. — ¿Quién eres y qué quieres? —pregunto. Estoy muy nerviosa. Quiero irme de aquí. —Soy Richard. —se presenta—Te lo mostraré. — uno de sus guardias me corta las cuerdas de las manos y me escolta mientras lo seguimos. Debería aprovechar para salir corriendo, pero el lugar está lleno de hombres armados, sobre todo el que
Después de un intenso día de trabajo, hoy sí pude aceptar la invitación de James a comer y aquí estamos, en un restaurante sencillo y muy acogedor. Ya hemos pedido lo que queremos de comer y en cuestión de minutos, nos los traen. —Me gustaría saber más de ti. No me cabe duda de que seguirás trabajando como mi asistente hasta que decidas retirarte tú, por ende, me gustaría conocernos mejor. —dice mientras comemos. —Me parece bien. ¿Qué quiere saber sobre mí? —Háblame de tus padres, de tu vida social, tus hábitos favoritos y ese tipo de cosas. —Mi familia es un desastre, es todo lo que puedo decirte y en este momento, no están presentes para mí. Mi vida social es lamentable, apenas tengo como 3 amigos en total, unos más que otros y
El nuevo día ha comenzado. Jack se ha ido muy temprano a trabajar. Me desayuno, me reúno con mi compañero de tesis y luego de varias horas revisando que todo esté correcto, tomamos un café y nos vamos. Ha sido muy agradable conocerlo. Dentro de una semana, será nuestra última exposición. Así que tendremos que preparar muchas cosas para poder pasar la tesis con buena calificación. Quiero impresionar a los jurados y que vean nuestro potencial. Recibo un mensaje de Lisa que dice que vaya a burdel para llevarme a su casa un momento. Así que tomo un taxi y voy encamino. Al llegar, la saludo con un abrazo y me alegro mucha de verla otra vez. —Quería que vinieras aquí porque hay alguien que tiene algo que decirte. —mira a Maicol detrás de ella. Se ve muy nervioso. No recuerdo much
Estamos en el hospital esperando noticias de Eric. Más tarde, el doctor sale diciéndonos que afortunadamente, la bala no dañó ningún órgano y la pudieron sacar sin dificultad.El alivio que siento es inmenso. Es muy buen amigo. Jack también se siente aliviado, puedo verlo en su cara. Gracias a Dios, podrá recuperarse pronto. Nos sentamos en la sala de espera. — ¿Quién les ha hecho esto? —tengo curiosidad. —No tengo idea, pero sea quien sea, lo voy a encontrar. —veo la rabia en su rostro. — ¿Qué fue lo que pasó? —Alguien colocó un explosivo en la última planta y dejó muchos daños. Cuando intentamos salir,
Para celebrar, por idea de Lisa, estamos en una discoteca festejando mi graduación. No sé cómo le hizo para convencer a Jack de venir, pero me agrada que estemos todos juntos. Trataré de dejar atrás todos los problemas, al menos esta noche. Me lo merezco. Suena una música sensual y me llevo a Jack a la pista de baile. —Ven, bailemos. —halo a Jack de la mano. —No creo que eso pase. —se niega. —¡Vamos! Bailar te libera del estrés y es justo lo que ambos necesitamos. Además... —miro a Lisa y Eric, quienes están en su propia burbuja hablando y riéndose. Veo que a pesar de que la herida de Eric sigue fresca, sabe recuperarse pronto cuando le conviene. Jack también los ve. —A
7am del día siguiente. Ya hemos arreglado nuestras maletas para irnos. Un chofer llega por nosotros y nos lleva hasta el aeropuerto donde nos están esperando en un avión privado. Sabía que Jack tenía dinero, pero no tanto como para tener su propio avión privado. No le hago preguntas al respecto para no agobiarlo. Nos subimos y es más hermoso por dentro aún. Seguimos el protocolo de seguridad y en cuestión de minutos el avión despega. — ¿Ahora sí puedes decirme a dónde vamos exactamente? —tengo mucha curiosidad. —A Filadelfia. —contesta como si para él esto fuera de lo más normal. ¡Vamos a Filadelfia! Siempre he querido visitar ese lugar (muchos en realidad) pero este es parte de la lista. Me emoc