LXXVIII. La presencia del mal

Ha transcurrido ya una semana desde aquel día en el que le di el sí a Dominieck, y aunque parece poco tiempo la verdad es que han cambiado muchas, muchas cosas aquí incluyendo yo misma, que me eh visto sin dudas en la obligación de madurar en poco tiempo.

Crecer me ha hecho tomar una perspectiva diferente de lo significa la vida como loba y aunque me queda mucho por aprender eh sabido aprovechar el tiempo que tanto Lyall como Dominieck me ofrecen cada día.

Todo ha sido a la largo un subidón de emociones uno que no tiene precedentes y que lamentablemente solo iría en aumento.

… … …

Son más o menos las siete y diez de la noche y a diferencia de todos los días hoy me encuentro dentro de la cocina, sí... en pleno territorio enemigo lugar en el que se me permitió ingresar luego de que Dominieck hablara con la señora Zoe pues realmente algo que quería hacer era ayudarle precisamente a ella pues quería sentirme útil en la residencia y menos sola.

Hace ya un buen rato que las tres nos
Leia este capítulo gratuitamente no aplicativo >

Capítulos relacionados

Último capítulo