POV HEELALMis ojos no pueden creer lo que están viendo en este momento, se me forma un nudo en la garganta a medida que avanza ese beso y luego cierran su cortina. Lía se ha puesto roja de coraje, arto del tonto juego de ella, si tanto ama a Daniel porqué es tan orgullosa y no se lo dice. Tiene un mes de embarazo y ni siquiera se a atrevido a decirle nada.— ¿Puedes fingir que tenemos sexo? – me susurra y estoy más que de acuerdo. Eileen comienza a gemir. Hago puño mis manos y Lía me jala negando con la cabeza. — Eso te encanta nena. – me saca la camiseta y me hace seña que desabroche mi pantalón.— Sabes que me encanta. – ella responde jadeando. Pero ellos siguen en acción y los gemidos de Eileen me están haciendo molestar más. No me da tiempo de sostener a Lía justo cuando abre la cortina y jala a Eileen del cabello tirándola al suelo y agarrándola a bofetadas, lo cual es un grave error. Mis ojos se abren de par en par cuando Eileen cambia de lugar y la noquea con un solo golpe, mi
POV EILEENMiro a Heelal con rabia, porque al analizarlo en el viaje al momento del ataque él en realidad no tenía camisa, y el pantalón lo tenía desabrochado. Daniel en cambio se la pasó cuidando a Lía quien todavía no reaccionaba.Aterrizamos y doy gracias al cielo que estoy pisando tierra en este momento, todos apresuraron sus pasos. Nix se quedó a mi lado contemplándome y una sonrisa burlona se pinta en su rostro, su silencio hace que la mire de reojo. Al llegar al hotel Daniel nos entrega la llave de la habitación que es una suite doble, Nix me arrastra al ascensor sin dejar que me despida de los demás.Al entrar a la suite, se despliega una sensación de elegancia y confort. Los tonos suaves y relajantes de los muebles y las paredes crean una atmósfera acogedora. El salón principal está bellamente decorado con muebles de diseño. La suite cuenta con dormitorios exquisitamente amueblados, cada uno con su propia personalidad y estilo. El primero está adornado con tonos suaves de azu
Las cosas en mi vida aun tratan de ponerse en orden después de lo sucedido, después de lo que hice conmigo.Por más que he tratado de encontrarle explicación a mi colapso a todo ese dejo de vida que fluía en ese momento por mi mente. Por alguna razón aún sigo aquí y estoy poniendo todas las ganas para tener mi vida en orden, unos rizos largos de mi cabello color castaño rojizo me caen a lado de mis mejillas mientras me siento sobre el colchón de mi habitación y enciendo la tv para reproducir Spotify al instante suena As it was - Harry Styles, enciendo el ordenador y puedo ver que son las 04:36 pm , comienzo a hacer círculos con los pulgares sobre mis cienes, he dormido tan bien que puedo admitir que la ansiedad a dejado en paz mi mente y el ardor de ruido en mis oídos.Tocan a la puerta. -Eileen, cariño ¿todo bien? - Mamá abre ligeramente la puerta y asoma su rostro con una enorme sonrisa.- Sí. - le contesto. - Permíteme un momento y bajo a almorzar con ustedes. - mi Mamá cierra la p
El automóvil lo aparqué cerca de una línea de autos que no ayudaban en nada con el fluido de gente en la zona, varias personas se nos quedaban viendo, pero sobre todo no dejaban de mirar el auto, Eros vira los ojos por debajo de sus gafas de sol y una sonrisa maliciosa se va formando por sus labios. —¡Ya ves! Te dije que lo trajeras. Él habla de mi coche, es un Porsche 911 carrera color rojo, mamá me lo compró después de lo sucedido, para tratar de compensar su ausencia antes de todo, obviamente ahora es una madre siempre pendiente de sus hijos cuidándolos a sol y sombra, aunque le dije que no era necesario gastar demasiado dinero, pero no hizo caso y cuando vi ya estaba estacionado en la entrada de la casa.Le doy una ligera sonrisa, en cuanto nos acercamos más a la zona de carreras, es la única pista ahí, entre la multitud de gente busco a Aker con la mirada, pero Eros me jala del brazo llevándome hacia donde están los competidores.—Vaya, vaya quien diría que te encontraría aquí. –
¡Rayos! ya voy atrasada sino hubiese estado ocupada tratando de bajarle a Nix el alcohol para que no falte al trabajo.—Me siento fatal ¡ah! – emite Nix una queja, la chica de cabello lacio color negro y ojos marrón de figura delgada.—Eso no pasara sino bebieras demás Nix, sabías que tenemos que ir trabajar y aun así te embriagaste. – le digo mientras le abrocho su cinturón y luego el mío, con mucho cuidado empiezo a manejar.—¡Ay ya MAMÁ! Lo siento. – emite un quejido. —Bueno al menos te hice manejar después de mucho tiempo ¿no? – me sonríe.—Sí, también como prestarte mi ropa, dejar que casi vivas en la casa. – le doy una sonrisa.—¡Oye! – me da un golpe en el hombro. —Tu familia me ama y la mía a ti. – es muy cierto nos conocemos desde pequeñas y las dos nunca nos hemos separado a lo mejor estudiamos diferente carrera, pero en la misma universidad y trabajamos juntas ahora en el corporativo Roux, pero como es de saber que son varios accionistas y tienen el dinero en diferentes emp
POV HEELAL— Me agrada la vida que tengo Lisa, y no necesito enamorarme de alguien, casarme, procrear y todo eso. – Le digo mientras cenamos algo y ella quiso darme una lectura de cartas, le había dicho que no pero insistió.— Pues - Lisa hace una mueca. — Ya encontraste tu destino desde hace un año atrás y ha estado cerca de ti pero no te has dado cuenta, bueno creo que sí pero no logras identificarlo o verlo porque. – me da un golpe en medio de la frente con su dedo de en medio. — eres un ogro y no crees en el amor, pero créeme ella si que te ha movido el tapete, las cartas lo dicen.¡Oh carajo! Entonces la voy a ignorar y voy a correr. – la cara enfadada de Lisa me sacó una carcajada. — Bien, hay que llegar al trabajo ya es tarde.—Eres un pesado Heelal. – Ella recoge sus cartas y las deja aun lado.— Sabes que cuando decidí ser tu tutora y quién cuidaría de ti no esperaba que de adulto fueses tan amargado.— Acaso de haber sabido, me hubieses dejado con esas escorias – me llevo la
POV EILEENDespués de comentarle a Heelal lo sucedido, nos dirigimos a ver la máquina a reparar.Por ir tan a prisa ya que tenemos la producción del libro encima no pude ver un charco de tinta que salía de esta, y he aquí de nuevo, resbalo y Heelal me atrapa en sus brazos, a lo cual me pone de pie rápidamente y con una voz muy seca me dice: — Puedes procurar en tener más cuidado, pareciera que quieres morir todo el tiempo.Mi cara de desconcierto, y a la vez de vergüenza hizo que me girara y me pusiera en marcha hacia la oficina.En realidad ¿así parecía? Yo salí de ese lugar oscuro hace ya un tiempo y juré no volverme a hacer daño.Una lagrima cae sobre mi mejilla. Una silueta pasa enfrente de mi oficina la cual claramente pude distinguir y es la de Heelal, pudo ver que se dirige a su oficina, en cambio Ares toca y le digo que pase.— ¿Estás bien? Eileen. - en sus ojos hay algo de preocupación, pero también hay una sonrisa juguetona en sus labios.— Le sonrío y asiento, mientras abro
— Buenas tardes princesita. - la voz de Nix inunda mis oídos, mientras que mis parpados dan una seria pelea para poder abrirse y mi boca solo emite un quejido. — Anda vamos, hoy invitaré el almuerzo. - al mismo tiempo me lanza una almohada y entonces se da cuenta que fue un grave error, una mirada de odio cruza por mi rostro lo cual nota y sale corriendo hacia el closet, pero yo en cambio al tratar de levantarme enredé mis piernas en la cobija y caí al suelo.— ¡Auch! - sale de mi boca mientras trato de apartarme las cobijas, Nix asoma su cabeza por la puerta del closet y comienza a reír a lo que sale y se acerca a mí para levantarme, es el momento perfecto dijo mi mente, entonces lo hice, le apliqué a Nix una llave enredando mis piernas a su torso y mis brazos alrededor de su cabeza, con su mano hizo seña de rendición.— ¡Diablos, siempre caigo! - una sonrisa se dibuja en mis labios, y ella empieza a tomar bocanadas de aire. Las dos a los 16 años nos habíamos inscrito a Artes Marcial