Narra Ángela.
Estaba en mi habitación pensando en mil cosas, hasta que alguien me saca de mis pensamientos.
—Tierra llamando a Ángela —Dice mi compañera de cuarto y amiga.
—Que —Digo expresando un todo molesto.
—Ya llevas unos días así ida, debes concentrarte tienes prácticas hoy.
—Lo sé.
—¿Qué te pasa?, ¿Peleaste con Christopher?.
—No es eso, solo que — Pero alguien nos interrumpe.
—Es verdad lo que me enteré —Se lanza a la cama.
Sonrió al verlo, era uno de mis compañeros, no solo la fiesta si no de vida o es lo que quiero cree, es el típico Badboy por las que muchas sueñan.
—¿Qué haces acá Bartolomé?
—Rie— No me pongas ese apodo no soy tu cachorro.
—Está bien Bruno.
—Escuche que el chico nuevo de tu clase te gritó.
—¿El mismo que te salvó de la piscina? —Pregunta mi amiga.
—Sabes que siempre exageran, nunca me dejaría gritar.
—Me preocupa has estado muy idea— Dice Bruno.
—Se preocupan de nada, tengo que ir a entrenar.
—Te acompañó.
—No me perderé Bruno.
—Quiero ver a las chicas entrenar.
—Que idiota.
Sonrió al escuchar las locuras de mi amigo, no quería pensar en nada más así que me voy al entrenamiento, debería enfocarme en mi beca, puede que ya no sea más esa Ángela animada que iba a entrenar, que animaba a los equipos con una gran sonrisa, pero ella murió hace mucho, no quiero que mi padre pague mi carrera así que está beca es muy importante para mí.
El transcurrir la semana mi vida volvió a la normalidad, ignorado a mi compañero de clase, no puedo soportar a las personas que se entrometen en mi vida.
Ya había llegado el domingo por la noche, salir no me había mal, así que me ducho y me arreglo para salir, me pongo un short de cuero, con mis botas de plataforma y una camisa larga, todos se pregunta el porqué nunca me han visto con una camisa corta, nunca han conocido mis brazos, gracias a dios mi uniforme me ayuda.
Es que no quiero que conozca mi parte débil, observo mis brazos por un instante y allí están las cicatrices de tanto dolor y “salidas” del que conseguía.
Me terminó de vestir y salgo de mi habitación, hoy Christopher estaría en un partido, así que camino por el campus y me encuentro al frente otra vez a este chico, paso como si nada, pero me detengo al escucharlo.
—Espero que terminaras el trabajo.
M****a lo había olvidado por completo, creo que las fiestas no ayudaron.
Narra Mateo
—Espero que ya esté terminado el trabajo —Le expreso a la chica vestida de negro que se encuentra camino al campus sé que debo demasiado intenso, pero con ella ya no me interesa causar buenas impresiones.—Eh…no…no he tenido tiempo— Balbucea avergonzada.¡No lo puedo creer!—Si no lo sabías también dependo de ese trabajo —Le expreso toda mi molestia, ella solo mira a los costados avergonzada.Si ella se puede enojar e ignorarme yo también lo puedo hacer perfectamente. La observó algo incómoda por mi comentario, pero eso me importa cinco pepinos, ya sobrepasó mi límite.—De verdad no sé cuál es tu problema conmigo, pero por favor no involucres lo personal con lo laboral y deja de ser tan inmadura que eso no te ayuda en nada— Me doy media vuelta y por encima del hombro veo que se ha quedado perpleja a mis palabras, pero empiezo mi camino sin dejarla hablar.Pero qué carácter chico, me aplaudo y felicito mentalmente.Creo que lo mejor será ir a mi habitación y hacer mi parte del trabajo, si esa chica tan malhumorada no lo ha entregado pues no es mi problema, si lo hago entonces que me den la nota a mí solo.A quien engaño el trabajo es de los dos, sin su parte no puedo recibir mi nota completa, ¿Por qué no me toco un compañero normal o responsable? Me paso la mano por la cara exasperada.Lo mejor es primero darme un baño y luego empiezo con el proyecto, llego a mi habitación, me quito la ropa y entro al baño. Me doy un baño refrescante y salgo listo.Me estoy terminando de vestir cuando escucho que tocan mi puerta. Esa debe ser Selena, ahora es que le da por aparecer, voy a aprovechar que ella me ayude.Sonrío maliciosamente mientras abro la puerta— Pero mira a quien nos ha traído el viento.—El viento no sé, pero si mis piernas me han ayudado a llegar aquí— Mi sorpresa es tan grande que me quedo de piedra.—¿Q... que haces a-aquí?— Me maldigo, ¿Por qué tengo que tartamudear ahora?—Vengó hacer el proyecto, ¿Qué más? — me muestra los libros dándole más énfasis a su respuesta— ¿Puedo pasar?—Pregunta, pero ya está adentro de la habitación. Esta chica es bipolar, creo que mi sermón la ayudo a recapacitar.—Si claro pasa estas en tu casa— Le digo irónicamente por qué al parecer es muy curiosa y está observando con detalles mi habitación. Ella rueda los ojos ante mi respuesta.—Vale, empezamos de cero si, Me llamo Ángela— Estira su mano hacia mí.—Mateo— Estrecho su mano y ella sonríe— ¿Empezamos?— Le señalo mi escrito, pero ella ya está en el suelo.—Traje algunos periódicos que nos pueden servir y también busqué información…Continúa enseñándome recortes y frases que nos pueden ser útil, así pasamos una hora y concluimos el trabajo exitosamente. Sé que nos llevaremos una buena nota Y así de la nada empecé a contarle cosas de mi vida, bueno las que recordaba después del accidente.—¿En serio un pollito te calló atrás y tú saliste corriendo como un bebé?— Me pregunta entre risas y asombro después de contarle mi más vergonzosa aventura en el campo de los abuelos de Selena.Asiento y ella empieza a carcajearse, me quejo, pero al final termino riéndome con ella.—Woo ya es muy tarde— Dice de pronto mirando la hora en su reloj— Ha bueno Mateo me tengo que ir, mañana entregamos el proyecto.Asiento y con un asentimiento ella se dirige a la puerta, Antes de abrirla, se detiene y se voltea hacia mí.—Em… —La veo retorciéndose los dedos y un leve ¿sonrojo?— Siento mucho lo que ha pasado, de verdad y muchas gracias por todo lo que has hecho por mí hasta ahora.Me sorprendo, pero a la misma vez sonrío levemente.—Está bien no te preocupes, ¿amigos? —Me devuelve la sonrisa y asiente y finalmente se retira.Y yo esa noche la finalicé con un proyecto terminado, una amiga nueva y una sonrisa.Narra Ángela.¿Amigos?, Eso creo que fue lo que dije, ¿Cómo se me puede pasar eso por la mente?, El parecido que tienen es…Tan solo debo olvídalo, no puedo dejar fluir mis sentimientos, así que veo mi celular aún era la 1 AM, tenía llamadas perdidas de Rochi y Bruno aunque pararon después de las 12 me imagino que deben estar haciendo sus cochinadas, de verdad es que son partes importantes de mi vida, tienen aunque tengan un año y medio en mi vida.Es increíble todo lo que ha pasado en este corto tiempo, rochi por fin pudo hacerse el cambio de sexo y Bruno la apoya y la adora por lo que es.Al principio no fue fácil para ella, las burlas y el dolor que eso causaba aún recuerdo ese día que nos conocimos.Flash Black.—Papá no quiero irme a un Internado, no quiero.—Ángela no te estoy preguntando es una orden, sabes bien lo que has hecho, tienes 6 meses así.—No me importa, no soy tú que eres una porquería
Narra Mateo.Amanecí con unas ojeras terribles, nuevamente, anoche tuve una pesadilla, pero por alguna razón de la cual aún no estoy seguro, mis sueños siempre implicaban a la chica de cabello morado, puede ser que he pasado mucho tiempo con ella ultimame, cada vez que pienso en ella siento una presión horrible en el pecho, no lo sé es como si estuviera obviando algo que debía saber.Camino a la cafetería cuando siento un cuchicheo de dos chicas en los pasillos, mi paso son más lento, creo que es porque me es vuelto un poco chismoso, me detengo abruptamente al escuchar el nombre de la chica de cabello morado.—Ángela ¿intento suicidarse?!-exclama una chica y la otra asiente.-Si, escuché que se tiró por las escaleras, ya sabes que ella tiene antecedentes a querer matarse, además sé cómo ella mírala es una loca, siempre anda tan seria, estirada creyéndose superior a los demás, esa ropa, más escuché que tiene tatua
Narra Ángela.—Ángela— Volteo a escuchar esa voz, él se acerca a mi algo cansado— Perdón por llegar tarde a nuestra cita.—Se te está haciendo costumbre esto.—Nunca me podré acostumbrar a tu belleza— Se acerca hasta pasar sus manos por mi cintura y tenerme más cerca de él y darme un beso.—Eres un idiota.—Soy tu favorito, ven vamos tú decides a qué juego subir.—Cuando te dije que nunca había estado en un parque de diversiones, no tenías que verte obligado a traerme.—Nunca lo haría, vamos—Me suelta la cintura y caminos tomados de las manos— ¿Terminaste con tu novio?—No es fácil.—Me siento el otro.—No lo tomes así, mañana lo hago, es que acaba de llegar del entrenamiento no puedo dejarlo así como así.—Confió en ti, porque no quiero compartir.Subimos a los carritos chocones, después trato de ganar un par de juegos para darme algún regalo de allí.Es
Narra Ángela.No puedo creer lo que hice, no se porque lo dije, aún no proceso la información que está en mi mente, camino a mi habitación, al abrir la puerta observó a Rochi sentada sobres las piernas de Bruno.—No quiero molestar— Sonrió.—Tonta pasa— Dice rochi y le hago caso, me acuesto en la cama y ella me mira raro— ¿Ángela?—¿Si?—Ya te drogas te ¿No?—¿Por que lo dices?—Estas muy feliz, también se te ve una mirada un poco distraída.—Solo un poquito.—Angela.—No, no comiences con lo mismo de siempre.—Antes que discultan mejor me llevo a Rocío, nos vemos en la tarde, duerme bien ¿Si?—Nos vemos luego.Los chicos se levanta para dirigirse a la puerta si antes mirarme, se van si decir nada aún sentíia adrenalina, pero no es lo suficiente para mí,
Narra Ángela.1...2...3, de nuevo, 1...2...3, otra vez.Es lo que escucho una y otra vez desde hace una semana, mi vida ha vuelto al gimnasio, la rutina para la presentación debe estar perfecta y nuestra entrenadora últimamente está muy pendiente con eso, después de clase entrenamos de 5 horas al día.—Angela de nuevo la pirueta, no tienes el balance de siempre.Sin discutir hago lo que dice, siento el sudor por todo mi cuerpo, el cansancio llega a mi, tal vez era lo que necesitaba esto me ha hecho dormir, de lo agotada que estoy, me aleja de mis preocupaciones.—¿Alguna de ustedes sabe dónde está Selena?—Escuche que no había entregado un trabajo y tenía castigo.—Yo escuché que estaba enferma.—Yo que tenía una cita.Escucho a las chicas hablar, pero trato de concentrarme en lo mío, una cita, no es nada
Narra Ángela.Me encantaba sentada un un columpio, traía puesto un vestidor corto color crema, una chaqueta masculina, que me había dado mi novio, azul con negro, el estaba sentado en el columpio a mi lado, para observar me y después de suspirar háblar.—¿No tienes duda?—¿De que?—De tu amor.—¿Por ti?—Rie— Nunca lo he dudado, pero ahora tan sólo soy un recuerdo, un recuerdo de tu amor, por el cual ahora te sientes culpable de sentir y vivir.—¿Entonces?—Mateo, Cristopher.—Oh ya vines con Cris porque es mi ex.—Te encerrarte que no lo amabas porque me traicionabas al amar a alguien, pero te he visto feliz a su lado, veo como te sientes, tu problema es que al principio decías que era por las apariencias, nunca lo reconociste, pero tu amor por mi su, porque sentías que era algo que no esperaban de ti, te sentías más libra ahora...—Ahora no puedo amar.—Si lo haces y tú corazón se debate entre ellos dos
Mateo—¿Tienes algo con ella?-me pregunta seriamente mi mejor amiga sentada a mi lado con un café en sus manos y yo con mis apuntes sobre mis piernas.—¿De qué hablas?-Le pregunto tratando de parecer confundido, aunque sé perfectamente de lo que habla.—Ángela-me dice, y yo recorro todo mi alrededor con la mirada, evitando hacer contacto visual.—No— le respondo finalmente - No tenemos nada salvo una amistad.Observo su mirada dolida y me preocupo.-Sel -le tomo la mano y le acaricio los nudillos - ¿Te sucede algo? Sabes que puedes confiar en mí.Ella asiente con la mirada clavada en nuestras manos juntas —Solo.. Solo no quiero que te lastimen Mat- me dice débilmente - No quiero que lo hagan, no quiero que sufras más.-No lo hará Sel, Ángela no es cómo tú piensas.No me mira, ante su silencio la atraigo hacia mis brazos - Por Siempre amigos.-Por siempre amigos-me dice y me regala una
Narra Mateo.Luego de lo que sucedió en la habitación con Angela, ando un poco nervioso. En realidad soy un chico un poco tímido en cuanto a esos temas, y ya que Angela me gusta tanto no me gustaría echarlo a perder, esta vez me gustaría hacer las cosas bien.Ya aseado y cambiado,con mi mochila y mi celular en el bolsillo izquierdo de mi pantalón me dirijo a mi clase que empieza aproximadamente en media hora.Voy por el pasillo principal cuando veo una silueta y un pelo totalmente reconocible para mi a cualquier distancia.Esta de espaldas a mi, hablando por teléfono y haciendo algunos gestos con su mano libre.Decido ir hacia ella,pero en silencio, quiero sorprenderla.Al llegar a su lugar, sigue sin verme ya que estoy atrás de ella, estiro mi mano intentando llamar su atención pero al escuchar el nombre de la persona q