Si alguien me preguntara si disfruto de poseer un Alfa y un Omega, claramente le diría que no, es bastante frustrante y agotador.Y más teniendo a mi destinado pegado a mí, posesivo por ambos seres que poseo.Siempre quise ser un Alfa, tener un buen empleo, mi Omega destinado y formar una hermosa familia, nada que no pudiera un Alfa.Pero ¿qué es lo que tengo? Un Alfa que es el doble de posesivo, mi departamento hecho mierda por la batalla entre mi Alfa y el de Diego, que al final terminaron por hacer las paces.Mi vida, no sé si decirlo si es una bendición o maldición de la Madre Luna, ¿qué tipo de capricho es esto?, como mi aroma ahora puede ser un problema y empeorar mi situación.Mi destinado rugiendo sin poder controlar a su Alfa iracundo, Ángel mi mejor amigo Omega sin darse cuenta está logrando que mi aroma quede impregnado a su cuerpo mientras su Alfa destinado me gruñe por celos, ¿qué tipo de encrucijada es esta?¿A quién debo golpear primero?, ¡qué vida la mía! pero Ángel es
—Y ¿qué piensas hacer Mateo? —Me pregunta Ángel a una distancia considerable, para que Diego dejara de gruñir, mientras termino de asear los cubiertos.—¿A qué te refieres?—¿Dejarás de investigar?—¡Baja la voz Ángel! No voy a dejar de hacerlo, ¿qué sabes de nuestro objetivo? —susurro grave.—Las cosas están más complicadas Mateo. Joe, la pareja de Max ha vuelto al país, creo que deberías de esperar a que se fuera de nuevo.—¡Maldita sea! ¿sabes cuándo será eso?—Creo que la siguiente semana. Mateo, debes dejarlo ir, eso ya quedó en el pasado.—¡Debe pagar por lo que hizo Ángel!—Pero tu vida corre peligro Mateo. Max es un hombre poderoso y un Alfa incluso mayor que Diego. Su mundo lo hace más fuerte, ¿quieres ponerlo en riesgo?—¡No puedo dejarlo ir! haré lo que fuera posible por verlo tras las rejas o muerto, pero libre ya lo estuvo por mucho tiempo. Además, mientras siga siendo cuidadoso nadie sabrá de la existencia de Diego.—Mateo, piénsalo. Mira, tienes a tu destinado, ¿acaso q
Aunque deseara que mi vida no tuviera tantos cambios, era imposible, cada día que pasaba había algo nuevo de qué estresarme con Diego a mi lado.No es que no lo quiera, mis seres lo aman, también yo, pero su presencia traía problemas a cada segundo, con sus celos ante cualquiera, que tan solo me mirara.No sé cómo se pondrá cuando tenga que ir a Lampang para tomar mis fotos.Es una lucha, no solo con ese Alfa testarudo.Abriendo mis ojos lo primero con lo que me encuentro es su rostro tan hermoso, ¿¡acaso puedo estar más enamorado!?, sus pestañas demostrando que está en un sueño profundo, su respiración es tan pacífica, quién diría que al despertar se vuelve un demonio sexy y posesivo.Apartando sus brazos de mi cuerpo observo el reloj a un lado de mi cama para luego ir al baño a ducharme, en unos minutos vendrán a equipar mi sala y comedor.Mientras arrastro el jabón por mi cuerpo, sigo pensando ¿cómo pudo cambiar mi aroma? es algo extraño café—chocolate. Una mezcla que definitivamen
¡No sé en qué momento este Alfa supo dominar mis emociones! Apenas le he dicho para que viviera conmigo, solo fue unos minutos a su departamento y ha vuelto con algunas maletas, ¿que acaso ya lo tenía todo planeado?Aunque quisiera ponerme duro con él, esa sonrisa que llevaba puesto en el rostro era hermosa, la emoción y felicidad se reflejaba en cada paso que daba en todo mi departamento.Ni siquiera debía mover un dedo, él solo se encargó de hacer a un lado mis pertenencias para poner los suyos, por un momento me sentía invadido, pero en verdad era lo que estaba haciendo, lo seguía a cada paso para ver que tantos cambios habría en mi vida.Nuevas prendas en mi placard, que no eran mías, calzados pegados a los míos, en mi porta cepillos un invasor acompañaba al mío, solo podía verlo silencioso y aterrado ante todo lo que ocurría.Su alegría al invadir mi territorio era insuperable, mientras paseaba en toda mi habitación acomodando sus cosas me miraba con una sonrisa que solo me confi
Despertar y verlo pegado a mi cuerpo día a día se está convirtiendo en mi mejor deleite.Hoy viajamos a Lampang, solo espero que todo vaya como tengo planeado. Aunque se vea hermoso con los ojos cerrados debo despertarlo para llegar a la carretera antes que inicie el horario donde todo el mundo salga de sus hogares.—Diego, despierta.—Mmmm unos minutos más —pide haciendo un puchero adorable, ¡pero quien lo manda de calentón toda la noche!—Entonces iré solo —Digo levantándome de la cama.—¡No! ¡no irás solo! —Dice de inmediato quedando sentado, ¡no puede con sus celos!—Si quieres puedes seguir durmiendo, yo volveré en 4 días —Bromeo viendo el rostro aterrado de este hombre, si mientras solo estoy en el baño sin él, se desespera no me imagino que le pasará si no estuviera todos esos días.—¡No! ¡ya desperté! ¿¡y porqué 4 días!? ¿que no eran 2 o 3 nada más?—¿Qué? ¿tienes cosas que hacer?—No, pero…—¡Pero nada! ya levántate que quiero estar fuera de la ciudad antes que amanezca.—Mat
Como era de esperarse Diego hizo que saliéramos del avión y del aeropuerto mucho más rápido de lo que desearía, era divertido verlo nervioso por las personas que aún seguían viéndome, el aroma a café al parecer es muy atractivo para muchos. Y mezclándolo con chocolate creo que lo hacía aún más.Mientras íbamos en un taxi, nos dirigimos a un hotel para dejar nuestras cosas, y tomar solo nuestras cámaras para ir a pie a cada rincón de la ciudad, definitivamente es hermosa, mientras tomaba mis fotos, Diego iba tras de mí también con su cámara, en verdad no sé a qué le tomaba fotos ya que cada vez que giraba para verlo este lo tenía colgando del cuello.Mientras intentaba tomar una foto, buscaba el mejor ángulo para hacerlo, pero no lo encontraba, Diego sonreía por detrás, giro para ver que le parecía gracioso, pero al hacerlo tropiezo con un escalón cayendo sobre mi trasero y fue allí que tomó su cámara y comenzó a sacarme fotos mientras sentía el golpe en mis caderas, ¡que mierda!—¡Dej
De nuevo en el avión, Diego no dejaba de gruñir, la azafata Omega con aroma a vainilla volvió a viajar con nosotros, aunque no se haya acercado mi hombre no dejaba de ponerse posesivo.Decidí ignorarlo para ver si con eso se tranquilizaba, cerrando mis ojos me dispuse a descansar lo que restaba del vuelo.Podía sentir que algo lo tenía triste ¿qué podría sucederle? no logro oír sus pensamientos, odio que pueda controlarlos, tal vez he sido muy duro con él en estos días, pero siempre he sido de esta manera y nunca lo había sentido como ahora.Ya me encontraba preocupado hasta que oigo a su Alfa chillar, abro mis ojos de inmediato para mirarlo y noto que apoyaba su cabeza al asiento durmiendo.Esto no me gusta, pero como hago para que pueda decirme lo que tiene, siento a mis seres intranquilo.—Alfa, ¿tú sabes lo que sucede con Diego?—Lo sé, pero mientras él no decida hablar no puedo hacer nada.—¡Como que no puedes hacer nada! ¡Tu Alfa está sufriendo! ¿qué es lo que sucede?—AlfaDiego
Al parecer Diego extrañaba bastante a mi Alfa.Nos quedamos todo el día en la habitación, ni siquiera permitía que me vistiera, aunque su aroma ya estaba en todo mi cuerpo aún seguía impregnándome con la suya, con la satisfacción de que se hacía uno con el mío. La sonrisa en su rostro era inigualable.**********Ya era de día, cuando abro mis ojos, ese cuerpo musculoso al que amo no se encontraba a mi lado, mi Alfa comienza a gruñir, aunque su aroma estaba en toda la habitación no sentirlo en la cama le hacía sentir molesto.Pero un suave aroma a huevos revueltos alegraba a mi estómago recordando que no he ingerido comida en todo el día de ayer, con la actividad de los Alfas no daban ocasión para cruzar esa puerta.Con solo una camiseta puesta voy hasta el comedor en busca de eso que tan apetecible olía.La mesa estaba servida, muy bien hecho en realidad, pareciera que lo preparó con mucho esmero, mientras podía verlo de espalda se oía que tarareaba una canción, ridículamente sexy, ll