Abrí mis ojos por completo al escuchar de nuevo su nombre, le pregunto a mi hijo si estaba seguro que ese es el nombre que le dio y dijo que así se llamaba. Después de cuatro años desde que se fue no volví a saber de Lucas, y ahora llama como si nada hubiese pasado.
—Si vuelve a llamar dile que se ha equivocado de numero.—¿Estas enfadada mamá?—No. Solo… hagan lo que les digo. Por favor. Ambos se acomodaron a mi lado para ver programa favorito junto a mí. Pero mi mente pensaba en él, me reí sin gracia ya que lo más probable es que me está buscando para tener otra noche de sexo conmigo y volver a irse cuando esté satisfecho. —Mamá olvide decirte que .. le dije que aún no habías vuelto de tu trabajo. Mi corazón empezó a latir rápidamente al ver que mis hijos le afirmaron que aún vivía aquí . Lucas es de los hombre que te bajan el cielo y las estrellas y no puedes resistirte ante aquellas palabras que te hacen soñar, pero cuando consigue lo que quiere te deja con el corazón en pedazos para volver a marcharse sin dejar rastro. —¿Todo bien mamá? —Si cielo, solo estoy exhausta—mentí abrazándolos a ambos . Esta vez no será como hace cuatro años, le di la oportunidad y lo único que hizo fue hacer promesas vacías que aunque sabía perfectamente que eran mentiras las que salía de su boca, aun así le creí y luego desaparece como si nada hubiese pasado entre nosotros así que no tiene nada de malo que yo haga lo mismo que él hace. Preparé lo necesario para salir temprano hoy, me llevaría conmigo los trabajos pendientes que tenía y los terminé en casa. Siempre debía levantarme a las tres de la madrugada, la misma rutina todos los días, debía hacer el almuerzo de mis gemelos y el mío también su desayuno y tener listo sus uniformes.El día era arduo como todos los días de la semana, a veces trabajo los sábados para que Max tenga todo listo y disponible para solo revisar y firmar. —Max, ya me voy—abrí la puerta de su oficina entrando —¿Necesitas algo más? —Está bien, yo también estaba por irme, ¿quieres te lleve a casa?No quería abusar de su amabilidad pero en realidad no quería irme en autobús o pagar un taxi, quiero reducir los gastos lo más que pueda porque lo necesito en verdad, además, su casa estaba de camino al colegio en donde mis hijos estaban estudiando. —Acepto solo porque lo necesito, debo ir al colegio de mis hijos y voy retrasada . —Entonces, vámonos. El colegio de mis hijos estaba de camino a casa de Max así que acepté ya que mi auto se había dañado, desde hace dos meses se encontraba en un taller pero como no tenía dinero para pagar un repuesto tan caro no he ido por él, y si me iba en autobús llegaría muy tarde. Max se encontraba hablando con Selene por celular mientras conducía y le informó que me encontraba con él así que la puso en alta voz. —¿A dónde vas Laila? —pregunta del otro lado de la línea —Debo ir al colegio de mis hijos. Max se ofreció llevarme y acepté porque el colegio de mateo y Maicol estaba de camino a tu casa.— ¡Enserió! ¿Y porque no pasas por ellos y vienes a visitarme después de recogerlos?No quería molestarlos con eso, ellos se encuentran disfrutando su vida juntos y no quiero ser un estorbo por si quieren privacidad. —Es que me tomará un buen tiempo salir. —Eso no es problema, Max puede esperarlos ¿verdad cielo? . —Si, claro, —sonríe aceptando. —Hace tiempo que no nos visitas y me parece bien que vayas un rato.En realidad, no quería ir porque ver a Max es como recordar al idiota de su hermano que se le pasa ilusionándome para luego largarse y burlarse a mi espalda. Pero si me niego estoy segura que Max puede hacer esa pregunta. —Está bien —suspiro aceptando después de pensarlo unos segundos y ella cortó la llamada informando que serviría más platos para almorzar. —No creo que sea bueno que vayamos ahora… creo que es mejor decirle que no…—Laila, eres como una hermana para mi esposa, cualquier momento que vayas a nuestro hogar siempre serás bienvenida. Es lindo saber soy bienveni
Mi corazón palpitaba con rapidez y fuerza, siento que el aire desaparece a mi alrededor desde que lo vi parado frente a mi mejor amiga, tenía muchos sentimientos encontrados; alegría, ansiedad, enojo, tristeza, rencor y no me moví de mi lugar, no podía ya que no sabía que hacer o que decir o como reaccionar—Amiga, no es lo que piensas—dijo Selene al darse cuenta de mi presencia, se acercó a mi preocupada mientras me miraba fijamente. —Layla…— ¿Qué hace aquí? —pregunté dejando de observarlo para mirar a mi amiga. —¿Qué hace él aquí?—Intenté detenerla, pero ya estaba adentro de la casa cuando leí tu mensaje—dijo muy agitado Max. —Quise decirte, pero saliste antes de que pudiera alcanzarte.—Lo siento Laila, Lucas llegó hace unos cinco minutos, si hubiera sabido antes… que el vendría... no te habría dicho que vinieras.Todos ellos eran como ecos al hablarme, sentía su mirada sobre mi, lo sentía ya que no me quitaba los ojos de encima, me enfadaba demasiado me molestaba que me viera por
—¿Qué diablos haces Lucas?— dijo Max para que la chica se alejara de él —¿Y esta mujer que hace aquí? Un dolor seguido de un vacío se instaló en mi pecho haciéndome rechinar mis dientes, al no soportar verlo, les di la espalda. Mi mente solo me repetía una y otra vez que me fuera, que tomara a mis hijos y me largara —Amiga perdóname, ... esto no lo planeaba, te lo juro —Y-yo.... me tengo que ir,... vendré después por mis hijos... No pensaba con claridad y no quería que mis hijos se entristecieran por irnos antes así que decidí que la yo era la única que debía irme ya que es la única afectada por su presencia. No puedo estar en el mismo sitio que el se encuentra —Deja que Max te lleve… —Lo siento amiga, pero sabes que esa es la peor idea. Quiero estar sola. Solo quería estar sola así que me negué a que me Max me llevara a casa moviendo mi cabeza a los lados, Selene notó que no quería hablar, así que no agrego nada mas salí de ahí lo más pronto que pude porque sabía que sus palabr
—Mira Carolina—alejé su mano de mi rostro, acerqué a ella quitándole el cigarro de su boca— Me importa muy poco lo que salga de tu boca y te advierto; no te metas con mi hermano, se muy bien lo resbalosa que eres, y no me importara enseñarte los modales que tus padres no te enseñaron —Mmm… —muerde su labio inferior —Alguien parece celoso. —Estaría celoso de una mujer que vale la pena. Y esa, no eres tú. Es difícil estar al lado de una persona que no amas y más soportar sus acciones estúpidas como las que Carolina hacía. —¿Porqué cambiaste tanto, tú antes no eras así Lucas? — me quito el cigarro de mi mano para luego encenderlo y fumar. —Yo lo era todo para ti. Conozco a Carol desde hace tiempos y no lo iba a negar, tuvimos muchas noches de sexo ardiente que disfruté, pero solo eso fue, sexo. Pero ni ella pudo sacar de mi mente a Laila. Esa mujer logró quitarme algo que me hizo aborrecer a las mujeres en una semana. Un día carolina llegó a mi departamento pidiéndome ayuda ya que n
—Creí que estarías en casa Laila— me miró interrogante desviando su vista hacia Spencer. —Así que no pierdes el tiempo.—Necesitaba olvidar mis problemas —murmuro sarcástica —Pero tal parece que a donde vaya me perseguirá.Todos se dan cuenta de la tensión enorme que hay entre nosotros, incluso mi amigo se da cuenta que pasa algo ya que la forma en que me habla es como si fuéramos cercanos, o íntimos.—¿Qué hacen aquí? — pregunté al ver que toda la familia Sallow reunida en una misma mesa—Los señores Sallow querían cenar en familia, aprovechando que Lucas esta en la ciudad de nuevo.—Ya veo —dije a mi amiga —Creo que elegí una mala noche para olvidar mis problemas. ¿Cómo están mis hijos. —ella dice que se quedaron al cuidado de su nana de confianza la esposa de Víctor. Ella mira de reojo a mi acompañante —Oh, perdón, Spencer ella es la amiga de la que te hablé.—Enserió. Un placer, Spencer Harley.—Selene — respondió viendo su mano por unos momentos luego la tomo y rápidamente para
Esbozó media sonrisa haciendo que Spencer se enfadara más. Pero Spencer se pone de pie y comienza a reírse con sutileza mientras se limpia su traje, todos quedamos intrigados y preocupados al mismo tiempo. ¿Qué le causa tanta risa?—¿Acaso no te da vergüenza que tu acompañante te vea peleando por otra mujer?Lucas frunce el ceño molesto, su mandíbula se tensa y entre abre sus labios mostrando un poco sus dientes al ver que Spencer se había percatado de que venía acompañado, cosa que yo no vi.Cuando vi hacia donde se encontraban los demás, me percaté que ahí estaba esa mujer otra vez, la misma que vi en la casa de mi mejor amiga, por supuesto que me sentí mas herida porque esa mujer es tan importante para él que la trajo a la reunión familiar de los Sallow.—Hablamos luego— me despedí de los demás para acercarme a Spencer e irnos pero la mano de Lucas sujetando mi brazo detuvo mis pasos. —¿Qué cree que hace señor Sallow?—Tú no te irás con este sujeto.Mi cuerpo reaccionó ante su
—Mi esposo me ayudó a superarlo, cuando Lucas me había destrozado, Harold arriesgándose tomó cada trozo de mi corazón roto y lo volvió a reparar, por eso es que cuando murió....—Ya veo— dijo con una sonrisa rota. —Qué suerte la que tuvo él.—Lamento todo esto Spencer, eres un buen amigo y no mereces que te haga esto.Estaba por salir del auto ya que esto no tenía sentido para ninguno de los dos pero Spencer tomo mi mano suavemente haciendo que volviera a sentarme. Puedo ver que hay algo que quiere decirme.—¿Y si te dijera que no me importa si amas a otro?—¿De qué hablas?—Si te demuestro que puedo hacerte olvidar… todo lo que puede provocarte… que puedo ser mejor que él.Al ver que se acerca a mí me pongo nerviosa, puedo ver sus intenciones de besarme, quería rechazarlo pero… ¿tiene algo de malo que lo intente? Y si tiene razón de que pueda hacerme olvidar a Lucas.Quería intentarlo, quería olvidarlo, nunca lo intenté porque temía a que no pudiera hacerlo, sus labios se posaro
Era una sensación extraña lo que sentía ya que por años deseaba sus labios, sus caricias en mi piel, extrañaba su fragancia favorita, “Joy Jean patou” pero al pasar el tiempo me había dado por vencida y habia olvidado lo exquisito que es ese aroma, más al ver que todo lo que me dijo habían sido palabras vacías.Es algo que considero injusto y más si había decido dejar de amarlo, pero claro, tiene que volver y hacer de mi vida un lío, no, en realidad es un caos. Lo empujé para alejarlo lejos de mí, molesta por lo que hizo estampé mi mano en su mejilla tan fuerte que mi mano ardía por el golpe y en su cara quedó figurada mi mano.—¡Crees que puedes venir a besarme como si nada pasó! . —ni siquiera me daba cuenta que nos estaban viendo. —¡Crees que puedes venir y hacer como si nada pasó!.—Déjame explicar lo que pasó— trató de tomar mi brazo pero lo rechacé. —Laila…—Yo tengo muchas razones para no confiar en tus explicaciones y lo sabes— me reí sin gracia limpiando mis lágrimas de m