Elizabeth y Juan Pablo desayunaron, mientras lo hacían, ella le dijo: - - ¿Puedo decirte algo? - Claro amor, dime sin miedo, dijo el joven dejando los cubiertos a un lado y prestando total atención a su amada.- Temo que pase algo y pierdas el control, temo en salir lastimada nuevamente. - Entiendo que temas, no he demostrado autocontrol, pero déjame mostrarte esto, Juan Pablo sacó un sobre de su mesa de noche y se lo dio a Elizabeth - ¿Qué es esto? preguntó desconcertada.- Quiero que sepas todo por mí y no quiero comenzar contigo con mentiras. Abre el sobre y ve su contenido.Elizabeth abrió el sobre y sacó las fotografías que recibió Juan Pablo en aquella oportunidad. Quedó atónita al ver la manipulación en dichas capturas, el ángulo daba a entender otras situaciones muy alejadas a la realidad. - Wow, es increíble ¿Cómo obtuvo estas capturas?- Estuve en una recepción por trabajo y cuando tomé una copa de vino, ni siquiera estoy seguro si lo que bebí fue vino o champagne, me s
Elizabeth encontró la ropa para Juan Pablo y caminó hacia él, sus ojos se abrieron como platos al verlo con una mano estirada, con una caja muy delicada en su mano.Colocó la ropa sobre la cama y se sentó a su lado, sin decir más, la sorprendieron más sus palabras: - ¿Me harías el honor de ser mi esposa? Elizabeth tomó la cajita y la abrió, viendo la hermosa piedra con diamantes incrustados, una lágrima cayó sobre su mejilla y le dijo: - Repítelo - Mi amor, mi Elizabeth ¿Aceptarías casarte conmigo? La hermosa chica sacó el anillo y se lo dio a Juan Pablo, haciéndole saber que se lo pusiera él en el dedo. Justo cuando Juan Pablo deslizaba el anillo en el delicado dedo anular de su amada, ella le respondió: - Acepto, mientras las lágrimas caían como cascada en su rostro.Juan Pablo acercó su dedo índice al rostro de Elizabeth, secó sus lágrimas y susurró: - Gracias por darme esta oportunidad, deseo envejecer a tu lado.Ambos se abrazaron, la emoción era evidente porque se amaban y
Al terminar la larga reunión, Elizabeth se retiró y cuando se dirigía hacia su oficina, escuchó la voz de Gabriel que la llamó: - Elizabeth La chica volteó y respondió con amabilidad: - Diga- Me gustaría hablar contigo y siempre estuve con el pendiente de qué te había sucedido.- Gabriel me da tanto gusto verte y así agradecerte una vez más por lo que hiciste por mí en aquellos momentos tan complicados, pero...- No acepto una negativa, cenemos juntos esta noche. - De acuerdo, me esperas solo firmaré unos documentos que requieren con urgencia y salgo.Mientras Elizabeth caminaba hacia su oficina, Gabriel la observaba con la boca abierta y se dijo para sí mismo: - Wow es hermosa El abogado y amigo de Juan Pablo sentado en la silla de espera vio la escena y se preguntó, cómo se conocían. Prefirió no involucrarse y no quitarle la paz a su amigo, quien sufría por Elizabeth; sin imaginar que ellos ya se habían reconciliado. Elizabeth al terminar sus pendientes le escribió un mensaje a
Elizabeth entró a su casa y evitando cruzar mirada con Susan subió, saludando de forma cortante a su nana para evitar conversar con ella y notara que algo no andaba bien. Entró a su habitación y se sentó mirando el hermoso cielo estrellado que iluminaba esa noche, perdida en sus pensamientos, salieron un par de lágrimas de sus ojos, sucedió lo que tanto temía, los celos de Juan Pablo lo hacían perder el control, se preguntaba ¿Por qué nunca le consultaba a ella? ¿Por qué su explicación nunca era importante? Levantó su mano y observó el anillo que hace unos días deslizó en su dedo, esa hermosa piedra no solo era importante por hermoso, si no que también éste era símbolo de muchas promesas. Un mensaje de texto interrumpió sus pensamientos y al leerlo solo chasqueó la lengua y no respondió. Gabriel le envió un mensaje de texto: - ¿Estás bien? aléjate de ese hombre es notoria su inestabilidad.Elizabeth sin poder conciliar el sueño, decidió tomar un baño, tomarse un día libre y escapar
Juan Pablo abrió la puerta y se arrodilló ante ella justo en la entrada de la casa, diciendo: - Perdóname por lo que te hice, te hago y lo que te haré, pero jamás dudes de mi amor por ti. Este anillo corresponde en tu delicado dedo. Entra a tu nueva casa mi amor, tú decides si vivimos aquí o prefieres que compre una nueva propiedad. Elizabeth se inclinó y le dio un dulce beso: - Podemos vivir aquí, tengo un hermoso recuerdo de reconciliación. Juan Pablo con lágrimas en los ojos le dijo: - Quiero que hagamos una celebración para anunciar nuestro compromiso, planear la boda porque no puedo estar más tiempo sin ti. Elizabeth sonrió y le dijo: - Si tú quieres puedo quedarme un par de días aquí. - Suena maravilloso, mañana hablaré con tu nana personalmente y espero me acepte. Ambos cenaron en el comedor, tuvieron un momento a solas, lucían como una pareja enamorada que amaban estar juntos, luego se fueron a la habitación, Juan Pablo y Elizabeth, decidieron pasar la noch
Juan Pablo fue muy breve al expresarse: - Agradezco el apoyo a Elizabeth y a la empresa. Cuando todos se regresaron a sus puestos, Marco aprovechó y se acercó a su hermano y le dijo: - Felicidades hermano, te deseo lo mejor en tu matrimonio y quiero que sean muy felices juntos.Abrazó fuerte a su hermano y luego se dirigió hacia Elizabeth y le dio un enorme abrazo, levantándola levemente del piso y le dijo: - Eres una hermana para mí y soy feliz porque estás con el hombre que tu corazón eligió. - Gracias, tus palabras son un abrazo a mi corazón, dedicó una mirada a Juan Pablo para que dijera algo más y Juan Pablo entendió.- Marco quiero que seas mi padrino en la boda y me ayudes a lidiar con mamá porque sé que querrá tener el control.Los tres sonrieron y estaban felices de convertirse en familia, Juan Pablo se retiró y se fue a su oficina porque tenía mucho trabajo pendiente. Pero antes de ir hacia la oficina pasó por la casa de Elizabeth, consigo llevaba un enorme ramo de ros
Minutos después, Juan Pablo recobró la compostura y llamó a Santos: - ¿Los interrogaron? - Sí jefe, solo hay un fotógrafo con identificación alterada, se lo llevaron y siguen interrogando. Tan pronto sepa algo le avisaré de inmediato.Susan se acercó a Juan Pablo y lo abrazó, mientras le decía: - Hijo debes ser fuerte, ella te necesita en estos momentos. Todo saldrá bien y celebraremos la boda como tanto lo deseaba. - No sé si puedo ser fuerte con ella en ese estado, si algo le pasa no podré resistirlo. Espetó en medio del llanto. Toda su familia fue un apoyo para Juan Pablo y mientras las horas pasaban, la angustia se apoderaba más de todos. El Dr. Eugenio Calderón, neurocirujano, Dr. Augusto Santos cirujano y la Dra. Regina Sol, salieron simultáneamente.El primero en hablar fue el Dr. Augusto Santos y preguntó:- Familiares de la paciente Sotomayor.- Sí somos su familia habló Zacarías, díganos.- Dr. Zacarías y demás familia, la paciente fue herida con un objeto corto punzant
Elizabeth llegó a la villa, su nuevo hogar acompañada por Juan Pablo quién muy atento solicitó decoración de la habitación para que ella se sintiera más cómoda. Susan fue invitada a quedarse a vivir con ellos, ella aceptó para cuidarla durante el embarazo, sin embargo, ese fue su pretexto porque ella en realidad no quería vivir lejos de Elizabeth. Juan Pablo había desatendido la empresa y se le había acumulado demasiado trabajo, con la tranquilidad que Susan estaría en casa cuidando de Elizabeth, él decidió regresar a la empresa porque se estaban desarrollando nuevos proyectos y necesitaban aprobación del Presidente. Rebeca no estaba muy lejos, estaba en un condominio cerca del edificio de la droguería Montenegro, tenía personal vigilando la villa para poder atacar nuevamente. No tenía mayor interés amoroso en Juan Pablo, pero quería lastimarlo en donde más le dolía y su debilidad era Elizabeth. Santos quien siempre le acompañaba, no solo era su chofer, mano derecha, confidente y