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Estoy tan harta de estar aquí…
— Evasence, My Immortal.—He usado mis contactos y la isla de los Rosemonde abrirá el puente mañana, se armara una buena, la bisnieta de los Rosemonde cumplirá doce años y quieren celebrarlo por lo alto, no he sabido encontrar más detalles, mi informadora no estaba para la labor—añadió Federico mientras su mirada se pierde en algún punto del club supongo que recordando a esa mujer. Ya le preguntaría más tarde por esa fuente tan fiable de todo.
Matt observa la escena serio a lo que yo asiento con mi mejor sonrisa sin mostrar los dientes sabiendo que la rata de Alec le quedaban poco más que dos días de vida.
M O R G A N
Me encontraba mucho más animada después de que Aliyah Rosemonde me transmitiera sus sentimientos de aquella manera, que se sintiera lo suficientemente fuerte como para hablarme de una experiencia tan dolorosa, para luego prometerme que me llevaría con ella,
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Nunca aprendo, solo lo hago peor.— Mothica, oh god.Vi con placer como Donna Ross se movía inquieta ante mío, de un lado a otro, mordiéndose las uñas desesperada, la paro finalmente y la cojo por la barbilla. Ella clava sus gafas de sol en mi mirada en busca de alguna respuesta.Me había citado después de prácticamente 28 años...—¿Has tenido algo que ver con la desaparición de Hugo?—preguntó ella desesperada—O sigues demasiado ocupado destrozando todo lo que tocas, he oído que pronto sellarás un trato que te devolverá la hegemonía dentro de tu clan después de que hicieras lo que hiciste...—añadió ella, noto como la ira se apodera de sus ojos enfrentándome supongo que era al recordar a Melanie Rosemonde. Siento mi pecho encogerse, me recrimino al instante por ese sentimiento.
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Tú podrías ser mi suerte, incluso si estamos a tres metros bajo tierra— Safe and Sound, Capital Cities. —¿Así que después de tantos años Tessa y Hugo han vuelto?—preguntó ella desesperada, veo como una capa de lagrimas nubla sus ojos. ¿Donna Ross llorando?—Tu tampoco pudiste enamorar a Melanie querido, ella prefirió el chico de los recados de Travis Ross, y ir con los polis...—añadió ella después finalmente sin esperar si quiera mi respuesta se levanta de nuevo, pues sabe que la habría ahorcado en prácticamente cuestión de segundos. —Adiós Donna—hablo dando un golpe en la mesa con las dos manos para luego pasarme una mano por el pelo, y como si fuese una orden ella da media vuelta por donde había venido hace unos instantes marchándose. —Adiós Aleksei—gritó sin darse la vuelta mientras oigo poco a poco el sonido de sus tacones cada vez más debilitado. Tiempo al tiempo, me digo mientras cojo mi chaqueta y hago una señal en la distancia a mis
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Si vamos a caer rendidos, dime que esto no es el fin. ¿Cómo acabará?— Rayden y Ruth Lorenzo, El mismo puñal.Me encontraba caminando hacia mi despacho tenía que reunir a Fede, Matt y Dylan para planear todo lo que ocurriría hoy con Sebastien y Alec. Esta noche les daré caza, estoy seguro que si han tenido las pelotas de pactar con los Rosemonde seguramente irían a esa fiesta. Francamente me importaba una mierda enfrentarme hasta con el mismísimo lucifer si conseguía encontrar al cerdo de Alec. Había llegado el día, era hoy, hoy era el día, la noche donde sabría por fin el escondite de la rata sin pene y de paso la volvería a ver...El pitido de alguien llamando a la puerta hace que suelte un par de maldiciones, decido ignorarlo para continuar con mi camino.Al ver que nadie quiso atenderle, decido hacerlo por mi mismo no sin antes soltar un
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Siento que me estoy ahogando... Me estás matando lentamente, tan lentamente.— 2 feet, i feel like i'm drowning. De repente como si el adolescente en cuestión hubiese leído mis pensamientos llega en medio de la sala de reuniones, me llevo una mano a la frente intentando relajar mi cabeza con un masaje para luego finalmente mirar incrédulo ante la situación hago una señal a Federico para que eche a todos y solo deje a la familia, mi tío, Toni, Sebastien, Fede, mis hombres Dylan y Matt, y yo. Estos últimos observan la escena serios en cada punta de la habitación, parecían un matrimonio peleado. Ya me encargaría de eso más tarde. —¿Pasa algo, Sebastien?—pregunto mirando al joven, él se lleva una mano al piercing de su labio inferior, para luego peinarse su melena de momento de color azul. Él me mira serio mientras con los pies señala a Robert Ross inquieto a lo que yo asiento entendiendo el mensaje. —Tío, márchate. Quiero ha
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Convertirme un habito para ti(...)Una posición hipnótica sobre mi.— Zella Day, Hypnotic.M I R E I AFinalmente llegó la noche. Mis nervios estaban a flor de piel, nos volveríamos a ver... Gael y yo nos veríamos y hoy daríamos el paso de presentarlo a mis seres queridos. Sentía las mariposas dar saltos, aunque en lugar de ligeras y rápidas parecían más bien jugadores de sumo en plena partida, pesadas y lentas.Eso era la definición perfecta por lo que sentía con Gael Domínguez, solo sabía que era un empresario ocupado aun así mi corazón ya estaba en sus manos y no me escondía al admitirlo. Siempre he soñado con un romance capaz de derretir a mi pobre y frágil corazón y con Gael todo apuntaba que él podría proporcionármelo.—Seguro que no quieres ir con nosot
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Es ahí donde me rompieron por primera vez el corazón.— Madylin Bailey, Don’t you worry child.A L I Y A HLuces, flashes de fotos, focos, risas poco disimuladas de alguna que otra señora que ya se había pasado con el champagne, no había ni un solo sitio del castillo de los Rosemonde sin alumbrar y no había forma humana de salir de ahí sin ser capturada por las cámaras probablemente estaba incluso la tele. Se ve que la isla no solía abrir mucho sus puertas pero cuando lo hacía, lo hacía a lo grande. Busco con la mirada a Morgan pero no la encuentro, la noche ya había caído y ella seguía desaparecida. Me había pedido unos minutos para hablar con Vince pero no había regresado. Se me encoge el pecho pensando en que pueda haberle pasado algo.Veo como en parejas van entrando al castillo hombres trajeados, del tipo de traje que costaría
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Dime lo que se supone que debo pensar, cuando las balas empiecen a llover—Grandson, WWIII.L E I A—Boyka.—González.—Siempre has sido un blandengue pero no puedo creerme que Liam también vaya a presentar su dimisión justamente ahora...—Y tu siempre has sido una bruja así que es normal que no entiendas que cuando se mezcla trabajo y convivencia pueden surgir estas cosas porque sorpresa somos humanos, tenemos sentimientos por el resto de mortales—contrataca el rubio sin piedad sin si quiera dejarme terminar, le dedico una de mis peores miradas a modo de respuesta, mientras termino por dejar hablar en un susurro sus últimas palabras para acabar haciendo hincapié en bruja dedicándole una mueca—¿Es este tu mejor insulto?—pregunto finalmente.—Muy madura como siempre, solo una arpía como tú es incapaz d
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Bienvenido a la habitación del pánico.— AU/RA, Panic Room.A L I Y A HLuces, flashes de fotos, focos, risas poco disimuladas de alguna que otra señora que ya se había pasado con el champagne, no había ni un solo sitio del castillo de los Rosemonde sin alumbrar y no había forma humana de salir de ahí sin ser capturada por las cámaras probablemente estaba incluso la tele. Se ve que la isla no solía abrir mucho sus puertas pero cuando lo hacía, lo hacía a lo grande. Busco con la mirada a Morgan pero no la encuentro, la noche ya había caído y ella seguía desaparecida. Me había pedido unos minutos para hablar con Vince pero no había regresado. Se me encoge el pecho pensando en que pueda haberle pasado algo.Veo como en parejas van entrando al castillo hombres trajeados, del tipo de traje que costaría tres veces
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