El poder, la sangre y el amor se entrelazan y se convierten en una barrera que mantiene la traición lejos del infierno que construí con los cráneos de mis enemigos para mi regina.MatteoSiento asco de saber que soy el hijo de una porquería que traicionó a la persona que menos debía. Una de nuestras normas no escritas es serle leal hasta la muerte a nuestra esposa, porque si ella tiene la confianza suficiente de dormir a nuestro lado a pesar de la mierda que nos rodea, lo mínimo que podemos hacer es ser solo de ellas.No había contemplado el fratricidio como algo necesario en esta guerra, pero si no tengo más opciones no tengo problemas en darle cavidad en mi vida, después de todo, él fue el primero en apuntarme. Por suerte, desde hace mucho tiempo mantengo información que me ha servido mucho en estos últimos días y sobre todo hoy que necesito recopilar datos importantes para poder ir por mi mujer.—¿Y cómo hizo mi padre para mantener en secreto a un hijo bastardo por tanto tiempo? —c
Me baño con la sangre de los traidores, extingo su presencia por completo de este mundo y aseguro el futuro que guiara tus pasos dentro de esta existencia criminal y perversa.MatteoNo solo le cambió el nombre a su hijo, sino que también le dio el apellido de su verdadero padre y el imbécil de Darío pensando que lo hacía para protegerlo, claro, él obedecía las órdenes de ella y sabía que esto sucedería, lo que no pudo prever fue que yo descubriría su secreto mejor guardado.—¡Eres una maldita perra infeliz! —le grita Darío.Siento pena por él, su orgullo y su ego pisoteados por una mujer que no se merece ni sus insultos.—No te desgaste con ella, mejor dime que otra cosa planean en mi contra, dime que tanto han avanzado mis enemigos. —Me mira, sus ojos desbordan dolor, rabia y vergüenza.—Te diré todo lo que sé, pero primero mátala a ella y su bastardo —me pide.Asiento y le hago una seña con la cabeza a Carlos.—¡No! ¡No a mi hijo no! —exclama la mujer e intenta correr hacia su hijo
No temo morir. No temo derramar mi sangre. No temo entregar mi vida por la tuya. Pero me aterra tener que vivir una vida en la que tú no estés.05 de marzoLionettaLucho por mantenerme cuerda, por no perder la razón. Sé que eso es lo que quiere el Pakhan, quiere que pierda mi fuerza y mi voluntad, pero no va a conseguirlo, no importa que tanto haga conmigo, voy a mantenerme firme y consciente.Pensar en Matteo es lo único que me ayuda a no perder la noción de la realidad. Tengo que ser fuerte por él, sé que vendrá por mí, juró que mataría a quien me hiciera daño y yo le creo, siempre lo haré.Cierro los ojos cuando la puerta se abre y la luz brillante del exterior me produce dolor. No sé cuántos días llevo encerrada aquí, me hacen dormir con inyecciones que embotan mis pensamientos y caigo en un estado de narcolepsia que inhibe mi sentido de la orientación.—Hora de tu comida, perrita. —Coloca delante de mí un plato de cartón con sobras de carne y un vaso con agua—. Que te aproveche.
Me sumerjo en la oscuridad y de nuevo emerjo a la luz, estoy en un vaivén que me aturde y me roba el aliento, siento que me pierdo, que no consigo la salida, me aferro a tu nombre al sonido de tu voz, pero cada vez más todo es tan lejano.06 de marzoLionettaEscucho una voz delicada que me habla, no entiendo lo que dice, pero me aferro al sonido que emite para despertar. Abro los ojos lentamente, ya no estoy en el lugar de antes, ¿cuánto tiempo estuve inconsciente esta vez?—Nǐ hái hǎo ma, nǐ jiào shénme míngzì —Miro a la persona que me habla y veo a una joven muy hermosa, de ojos grandes y alargados, su rostro es delgado y sus labios forman un pequeño corazón rojo.Es asiática. Lleva puesto un vestido ceñido al cuerpo en color negro, de líneas rectas, no es un kimono, pero se asemeja un poco, en el cabello lleva dos palillos cruzados… perfectos para sacarle los ojos a alguien.Luce inofensiva.—No entiendo lo que dices —le digo en mi idioma, pero no estoy segura de que me entienda.
La razón se me nubla y solo puedo ver el mundo arder al imaginar que otro hombre te toca. Eres mía, viva o muerta, yo soy tu único dueño.LionettaDecidí no confiar en ella, pero debo seguir el plan. Miro a mi alrededor, no hay nadie cerca, no se han dado cuenta de lo que acaba de suceder. Tomo un par de pistolas y le ofrezco una, pero la rechaza.—No será fácil salir de aquí y no siempre podrás pelear —insisto.—¿Ahora qué hacemos? —Miro el auto detrás de ella, en él nos sacarían de aquí, quizás podamos usarlo.—Sube al auto y vete, yo intentaré distraerlos. —No puedo irme, no sin antes asesinar a Yaroslav.—No te puedes quedar, no puedes con todos tu sola. —Miro de un lado a otro cuidando que nadie nos haya visto aún.—No pierdas el tiempo y sube al maldito auto, no te detengas, solo vete lejos y en cuanto puedas deshazte de ese auto y escóndete —ordeno y la empujo al vehículo.—No es mi culpa si mueres —observa y enciende el motor.—No voy a morir, Matteo espera por mí —afirmo y me
El final es inminente, no todos saldremos con vida. Pero tú, mi Regina, serás quien me guie y me dé vida para continuar.MatteoEl veneno de la serpiente cumple su propósito, Lorenzo deja de sacudirse y sus ojos quedan abiertos al exhalar su último aliento. Inhalo profundamente y pienso en lo mucho que pudo conseguir permaneciendo leal a mí. Espero que esto sirva de lección para Carlos.—¿Qué es eso? —Carlos se agacha y tira de una delgada cadena que sale de uno de los bolsillos de Lorenzo—. ¿Un collar? —inquiere alzando la prenda de modo que todos la veamos.Es la bala que le pedí que engarzaran en un collar. Al menos cumplió con una de las últimas órdenes que le di.—Sí, fue un encargo. —Lo tomo de las manos de Carlos y examino la pieza.De un lado tiene grabada una cruz en oro y del otro lado crearon la imagen de un cráneo, la cadena de la que cuelga es de acero inoxidable. Se supone que es un obsequio para Lionetta, saco mi pistola y disparo directo a la cabeza de Lorenzo un par d
El mundo ansia saber por qué los demonios, mis demonios, los que tú encerraste en mi interior, me temen y no desean ver el infierno que puedo crear si algo te llegase a pasar.07 de marzoMatteoCarlos sale con la china y entra Tito, le hace una seña para que envíe a la chica con alguien más y él se quede, la expresión de su cara me preocupa. Mi consigliere regresa e informa que la dejó a cargo de una mucama y con varios hombres vigilando. Aunque estoy seguro de que ella no va a escapar, solo quería evitar una guerra y ahora está consciente de que conmigo está a salvo.—Don, a su esposa la van a movilizar esta misma tarde, pero tenemos un problema. —Aprieto los labios—. La policía no nos quita los ojos de encima, parece que alguien dio información sobre su llegada a Siracusa —añade.—Encuentra al soplón y ya sabes lo que tienes que hacer.—Ya estoy en eso, ¿pero qué hacemos con la policía? —Dante Romano se está convirtiendo en un verdadero dolor de bolas.—Mantente alerta por el momen
Dije que mataría y moriría por ti, mira a tu alrededor y admira el infierno que he creado con las almas de los inocentes y los pecadores para ti. Utilicé los cráneos de los traidores para construir tu trono.Mi regina.MatteoDejamos a los policías muy atrás. Estamos por interceptar la van en la que llevan a Lionetta, se supone que debemos cortarle el paso. Tomo mi pistola y me preparo para salir, sin embargo, la camioneta blanca nos pasa por el frente antes de que podamos cruzarnos en su camino. Los seguimos de cerca, disparan, bajo el vidrio de mi lado y devuelvo el fuego.—Los tengo. —avisa Carlos.—Estamos detrás. —El auto se para de golpe y sin esperar bajo y continuo disparando.Rápidamente, el conductor de la van y el copiloto caen al suelo, nos acercamos con cuidado y nos aseguramos de que ya no hay peligro, Carlos abre la compuerta de la camioneta y veo a mi mujer en el piso de la misma amordazada y atada.Sus ojos se iluminan al verme y mi corazón late con furia. Subo, la de